Visión bioética y legal en el centro de la pandemia por COVID-19

Ante esta pandemia se debe dar prioridad al bienestar de los pacientes, a su autonomía en la toma de decisiones y a la justicia social dando prioridad a los derechos y al beneficio de la propia sociedad

Ciudad de México, 17 junio 2020.- El bienestar de los pacientes, su autonomía en la toma de decisiones y la justicia social, dando prioridad a los derechos y al beneficio de la propia sociedad, son aspectos básicos de bioética que deben ser tomados en cuenta en el escenario actual de la pandemia por COVID-19 que estamos viviendo.

La doctora María Cristina Caballero Velarde explicará por qué la bioética se encuentra en el centro de la pandemia y dará recomendaciones que ofrezcan al paciente bienestar y la seguridad de los profesionales de la salud en la atención de los estados de gravedad, el próximo jueves 18 de junio a las 18:00 horas en el webinar COVID-19: Visión Bioética y Legal que se transmitirá por las redes de Laboratorios Chinoin.

La pediatra-intensivista con Magister en Bioética y presidente de los Comités de Bioética y Ética en Investigación, hablará del panorama general por la crisis que atraviesa el país y el mundo ante la pandemia y la necesidad de contar con una guía, en caso de contingencia, para abordar, por ejemplo, la saturación de los hospitales, la falta de insumos y equipo médico y el debate de quién debe usar primero un ventilador.

La Dra. Caballero Velarde, explicó que actualmente en México no existe una guía bioética oficializada, como la tienen otros países. Esto ha originado que, en la parte legal, haya demandas hacia los profesionales de la salud y/o agresiones hacia el personal de salud por parte de los ciudadanos, derivado de los vacíos legales que existen.

La pandemia de COVID-19 es inesperada e inédita en nuestra época moderna y requiere de la colaboración que toda la sociedad considerando que el bienestar propio se vea reflejado en el bienestar de la sociedad a través de una guía bioética que es tan necesaria hoy, concluyó la doctora