Garantizar la sobrevivencia, bienestar y desarrollo pleno de las niñas, niños y adolescentes para dar satisfacción a sus derechos: Fabiola Loeza

Discurso de la Diputada Fabiola Loeza Novelo

Hago uso de la voz para presentar una iniciativa que considero tiene una gran carga humanista y de empatía. Previo a detallar puntualmente en qué consiste la modificación normativa, haré referencia a hechos que merecen ser reflexionados para tener un contexto de la importancia la misma.

Hace ya 3 años cuando escuchábamos que un virus causaba preocupación al otro lado del mundo. Muchos pensamos que no tendría mayor impacto en nuestro país y entidad.

Nunca imaginamos que una gripe pudiera ocasionar tanto daño a las sociedades del mundo. Lamentablemente, en marzo del 2020 el Covid cambiaría nuestras vidas. Muchos nos curamos, pero otros no pudieron ganar esa batalla.

En esos momentos la incertidumbre y el miedo nos embargó. Quizás ese temor fue mayor en las madres y padres de familia por el pesar de ver enfermos a sus hijos y no saber qué pasaría.

Durante la pandemia, la familia se volvió el mejor escudo de cuidado y protección. Las madres y padres arriesgaron su vida para buscar el sustento de sus familias.

En esos momentos, los niños y adolescentes, más que nunca tuvieron en sus hogares toda la prevención posible para no contagiarse y estar a salvo.

Muchos recordaremos ese abrazo y la calidez de nuestros seres queridos que nos reconfortaron en esos momentos de angustia.  Tristemente, niñas, niños y adolescentes perdieron a sus padres a causa de la pandemia y nunca más volvieron a sentir esa seguridad, ni el cuidado del sustento familiar.

Se estima que más de 200 mil niños, niñas y adolescentes en México quedaron en orfandad a causa del covid. No existe una medición exacta, pero se sabe que miles de menores de edad sufren carencias económicas, de salud y educativas por haber perdido a mamá o papá, o solo contar con uno de ellos.

La orfandad provoca efectos adversos como la mala nutrición, problemas emocionales, salud, mendicidad, explotación entre otros males. La UNICEF, realizó estudios para identificar su impacto arrojando preocupantes cifras para México.

A fin de contener los daños se urgió a realizar acciones que garantizaran los derechos de la infancia para que las autoridades en sus países brindaran la mayor protección en eras del interés superior de la niñez.

A la fecha es común escuchar que aún hay problemas económicos surgidos por el covid, pero se omite hablar de las infancias que quedaron desprotegidas y sin sustento.

En fechas recientes, tanto el DIF federal como las instancias locales, de nuevo han puesto el tema como una prioridad a atender.

Es evidente que en Yucatán habrá casos de menores de edad que no cuentan con protección, cuidado, ni sustento económico por estar en orfandad; es necesario ubicarlos y atenderlos.

Por ello, propongo cambios a la Ley local de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, para contemplar acciones de provisión que permita garantizar la sobrevivencia, bienestar y desarrollo pleno de las niñas, niños y adolescentes para dar satisfacción a sus derechos.

Dicha provisión, contempla desde la subsistencia económica hasta el máximo acceso integral a las políticas públicas para apoyar a quienes se encuentren en situación de orfandad, así, este tipo de acciones deberán ejecutarse de manera urgente para salvaguardar la integridad del menor.

Resalto que este tipo de política pública fue aprobado por unanimidad en el Congreso de la Ciudad de México; este sensible tema unió a todas las fuerzas para lograr su aprobación y otras legislaturas pronto estarán promoviendo cambios sustanciales en favor de las infancias y juventudes.

Estoy segura que el Congreso de Yucatán no será la excepción. Hago entrega de la iniciativa en versión física y digital. Gracias por su atención, es cuánto.