El epicentro del fútbol del sureste se muda a Cancún y Mérida

La transición de Chiapas a otros estados del sureste

Si bien el fútbol es una pasión que siempre ha estado presente en el sureste del país, lo cierto es que Tuxtla Gutiérrez había acaparado todos los reflectores desde que Jaguares irrumpió en la primera división en el 2002. Pero hoy en día el panorama del fútbol mexicano ha cambiado mucho desde que el equipo felino vio la primera luz, aunque sí hay cosas que siguen igual, los equipos grandes siguen estando vigentes, el Guadalajara ganó su primer partido del Guardianes 2020 en Ciudad Juárez en lo que fue la cuarta jornada del torneo, en tanto que los Pumas de la UNAM habían iniciado mejor y comenzaron con dos triunfos el nuevo certamen, el segundo ante el Atlas por marcador de dos goles a uno.

Mencionamos a estos equipos porque tienen décadas siendo protagonistas de la liga mexicana y temporada tras temporada son de los favoritos en las apuestas de la Liga MX en Betway. A esto aspiran las franquicias del sureste mexicano, a algún día ser lo suficientemente sólidas como para ser relevantes durante años y sin tener que preocuparse por los cambios de sede o de nombre. Clubes como el Guadalajara, Pumas, América, Cruz Azul, Monterrey, Tigres, y León son únicos dentro de un universo en el que equipos aparecen y desaparecen por decreto, lo cual deja a miles de aficionados dolidos.

Tanto Jaguares como Cafetaleros desaparecieron de la noche a la mañana, así como llegaron se fueron. A este último incluso le robaron en la mesa la posibilidad de ascender a la primera división, cuando lo habían ganado en la cancha a toda ley. Y como aplica para la vida misma, nada es estático, todo es dinámico; y ahora los equipos del sureste mexicano no radican en Chiapas, están en Quintana Roo y Yucatán respectivamente.

La transición de Chiapas a otros estados del sureste

En junio de este año se anunció que Cafetaleros se mudó para Quintana Roo para crear el Cancún FC, con lo cual se cubrió el vació que dejó el Atlante cuando se regresó a la Ciudad de México. El recién creado club buscó dar la nota a nivel internacional y contratar un estratega de renombre mundial, pero terminaron decidiéndose por darle la oportunidad al Cristian Giménez quien fue presentando a finales de julio.

La plantilla que comandará el exjugador del Cruz Azul incluye gente bastante experimentada en primera división y liga de ascenso, el Chaco tendrá a su disposición elementos como: Guillermo Allison, Juan Miguel Basulto, y Guillermo Martínez; quienes fueron estelares en Cruz Azul, Guadalajara, y Mineros de Zacatecas respectivamente. Giménez declaró al portal oficial de la Liga de Expansión que espera una liga muy competitiva y con buen nivel.

Otro equipo del sureste mexicano que estará participando en la recién creada Liga de Expansión son los Venados FC, quienes juegan en Mérida y tienen como sede el Estadio Carlos Iturralde Rivero. Venados también cuenta con una fuerte base de jugadores con experiencia en el máximo nivel profesional de México, entre los que sobresalen: Armando Navarrete, Neri Cardozo, y Rodrigo Prieto.

Venados fue de los equipos más afectados con la desaparición del ascenso y descenso, y fueron bastante proactivos al respecto. Como cuentan desde ESPN, abiertamente buscaron revertir la desaparición del Ascenso MX, pero terminaron aceptando las nuevas condiciones y buscan ganarse la invitación a formar parte de la Liga MX. Pensando en fortalecer su estructura, invitaron a Alejandro Pérez a formar parte del cuerpo técnico que comanda Carlos Antonio Gutiérrez Barriga. Pérez fue el estratega que hizo campeón a Alebrijes de Oaxaca en el torneo de ascenso que culminó en diciembre del año pasado.

Todos estos movimientos son evidencia clara de que el epicentro futbolístico del sureste mexicano dejó de ser el estado de Chiapas. Los estadios en Tuxtla Gutiérrez y Tapachula se quedaron sin inquilinos de primera categoría, todos a causa de razones administrativas y económicas, y ajenas a los méritos deportivos que de sobra tenían los clubes de la entidad. Ahora le toca a Cancún y Yucatán sacar la cara por el balompié de la región, y por suerte ambos proyectos lucen sólidos y con la capacidad de darles muchas alegrías a una afición que ha sufrido bastante por los caprichos de los dueños de la pelota.