Esperan autorización para derrumbar seis casonas

“Evidentemente cada año, las condiciones de estos edificios se vuelven cada vez más deplorables y se convierten en un riesgo para los meridanos”: Mauricio Vila

Mérida, Yucatán, lunes 26 de junio de 2017.- Seis antiguos predios serán demolidos por cuestiones de Protección Civil, ya que presentan riesgo de derrumbe.

Así lo indicó el alcalde Mauricio Vila Dosal quien recordó que hace un año, el Colegio de Ingenieros de Yucatán realizó un análisis del estado que guardan nueve predios del centro histórico, entre ellos los que colapsó este sábado ubicado frente a la Casa del Pueblo.

Se determinó en seis de ellos, que el grado de daño que tienen estructuralmente hablando es tal que no hay más que hacer que derrumbarlos, por lo que ahora el Ayuntamiento de Mérida, está a la espera de la autorización por parte del INAH para cumplir con la orden.

“Evidentemente cada año, las condiciones de estos edificios se vuelven cada vez más deplorables y se convierten en un riesgo para los meridanos”, dijo.

Como se recordará, las fuertes lluvias que se registraron este sábado, ocasionaron que parte de la estructura de una antigua casona ubicada frente a la Casa del Pueblo, se viniera abajo. El predio en cuestión, el marcado con el número 425 de la calle 65, justo en el cruzamiento de la y 48, ya tenía antecedentes de otros dos derrumbes parciales.

El primer edil, recordó que en la administración anterior se contaba con un listado de más de 20 edificios con deterioro.

–“Lo que se hizo fue trabajar con sus dueños para que se pudieran reparar, de los cuales solo quedaron los nueve anteriormente señalados, que siguen en estas condiciones porque no tienen claro el tema legal, que tienen cuestiones de herencias, que están intestados, es decir, que no hay nadie que se esté encargando de estos edificios”, detalló.

Los predios que están en espera de la orden para ser derruidos, además del antes mencionado en la calle 65, esta otro de la misma calle, pero marcado con el numero 394 A entre la 42 y 44, otro en la calle 48 por 63 marcado con el número 505, dos más en la calle 52 por 71, que tienen los números 548 A y 556, además de otro ubicado a unos pasos del parque de Santa Ana, el predio 502 de la calle 47 entre 60 y 62.

Los que se apuntalaron fueron el número 413 de la calle 69 por 44, el 552 de la calle 42 entre 65 y 67 y el 501 B de la calle 39 entre 60 y 62.

En cuanto al destino que se le pudiera dar a los espacios que dejarán los edificios que sean demolidos, dijo que son privados, por lo que aseguró que en el caso de que se procediera con la autorización de la demolición por parte del INAH, esto por cuestiones de un tema relacionado con la Protección civil, y serán sus propietarios los que determinarán lo que sucederá con esos espacios.