Discurso del diputado Mario Alejandro Cuevas mena Estancias infantiles

.

Desde la semana pasada inició la discusión en este Honorable recinto Legislativo sobre el recorte que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador decidió sobre el Presupuesto de las Estancias Infantiles financiadas desde la Sedesol.

El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador propone reducir el presupuesto de este programa, de 4 mil setenta millones de pesos de presupuesto anual del 2018 a 2 mil 41 millones de pesos para este 2019; a la mitad aproximadamente. Los datos oficiales nos indican que este presupuesto sirvió en el 2018 para el funcionamiento de 9 mil 300 estancias en todo el país, que beneficiaban, según padrón oficial a 329 mil 482 infantes y donde laboran alrededor de 50 mil trabajadores. En la propuesta del gobierno de Andrés Manuel se considera reducir el apoyo por niño de 950 pesos mensuales que se daba antes a 800 pesos mensuales; así mismo, sostienen que se les dará este recurso a las madres de los infantes beneficiarios, para que ellas decidan si les pagan a las estancias o si con ese recurso apoyan a los abuelos para que cuiden a los niños en su hogar. Andrés Manuel plantea también que se hará un censo para incluir en este apoyo a todas las madres con hijos en edad de estancias infantiles que no tiene acceso a estos centros educativos.

El Presidente de la República y su Secretario de Hacienda sostienen que el funcionamiento de estas estancias infantiles, en muchos lados ha servido para que funcionarios sustraigan recursos públicos en un claro acto de corrupción. Señalan que una buena cantidad de estas estancias son fantasmas y que el padrón de niños esta inflado, con el fin de desviar los recursos. Se señala también que buena parte de la burocracia que forma parte de la nómina de este programa es inventada o son aviadores que únicamente han favorecido a funcionarios públicos corruptos.

Esta decisión ha provocado una fuerte controversia. No solo aquí en el poder legislativo, también en todo el país; incluso entre las familias beneficiarias de este programa y entre las propias trabajadoras de las estancias infantiles y el personal que apoya y las supervisa. Algunos se preocupan por que consideran que éstas si son un espacio positivo y muy útil para sus hijos; otros consideran que son de muy mala calidad; hay quienes llevan el tema al extremo como si la iniciativa del gobierno federal pretendiera desaparecer estas estancias infantiles; las familias más pobres sin duda preferirían dejar en sus casas a sus hijos, con los abuelos, con tal de contar con este recurso, sin importar la función educativa y sociológica que estas estancias cumplen.

Llamo a la reflexión compañeras y compañeros legisladores. Serenemos. No nos cerremos; ni veamos las cosas en blanco y negro. Desde mi punto de vista, sería un grave error considerar a estas estas estancias infantiles, como inútiles e inservibles; como sería otro grave error defender a ultranza este programa, como si no se hubieran cometido actos de corrupción ni abusos de autoridad. El mismo Andrés Manuel a ofrecido reconsiderar algunos aspectos de su medida original.

En primer lugar, quiero preguntar: ¿alguien de esta sala estaría en contra de que se erradique la corrupción en el programa de estancias infantiles y en todos los programas gubernamentales? ¿Acaso alguien duda de que se inventaron estancias infantiles fantasmas y beneficiarios para inflar el padrón de niños? ¿Acaso alguien duda de que haya nombres inventados y aviadores entre los supuestos 50 mil trabajadores del programa para desviar corruptamente recursos públicos?

Propongo a este Pleno que dejemos a un lado la disputa y hagamos nuestro mejor esfuerzo para ponernos de acuerdo y lograr un consenso en torno a una propuesta de como consideramos que se debe de reestructurar el Programa federal de Estancias Infantiles.

En primer lugar, sugiero que le propongamos al gobierno federal que apoyado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) realicen de inmediato una auditoria objetiva y justa, donde se ubique:

  • cuáles son las estancias infantiles que realmente están funcionando y de estas cuales los hacen con calidad; y cuáles son las son realmente fantasmas
  • cuál es el padrón real de niños y familias que deberían de ser beneficiarias de las estancias infantiles; y la lista de nombres con los que inflaron este padrón;
  • de las 50 mil personas que aparecen en la nómina, cuantos trabajadores reales hay en el programa y de estos cuales cubren la capacidad para cumplir sus funciones; ubicando también a aviadores y nombres inventados.
  • sugiero también una encuesta entre las madres beneficiarias y entre el personal de las estancias infantiles, para conocer sus puntos de vista sobre su funcionamiento;
El gobierno de Andrés Manuel se ha caracterizado por actuar con cautela y cordura y en tener cuidado de no dañar a nadie, menos a personas inocentes. Por tal motivo, pido:
  • que el apoyo de 950 pesos mensuales por niño beneficiado no se reduzca a 800, se mantenga en 950 pesos mensuales;
  • que el apoyo se le dé directamente a la madre únicamente en las comunidades donde no haya estancias infantiles, pero donde estén funcionando eficientemente, sugerimos se mantenga la aportación directamente a ellas, para evitar que la pobreza provoque que dejen de llevar a los niños a una instancia educativa;

Por último, propongo que, para realizar la restructuración del Programa de estancias infantiles, primero se conozca toda la información real de cómo están funcionando y se ponga al descubierto la corrupción del programa. Ya conociendo a fondo la situación real del Programa, exigiremos todos que se tomen las medidas necesarias para erradicar a fondo la corrupción y priorizar el bienestar de las familias y en especial de los niños de nuestro pueblo.

Es cuanto señores diputados.