Egipto promete venganza por las víctimas de atentado

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El presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, prometió que el Ejército y la Policía se vengarán por las víctimas del peor ataque terrorista perpetrado en la historia reciente del país, que dejó al menos 235 muertos y 109 heridos.

(Las Fuerzas Armadas y la Policía) se van a vengar por nuestros hijos para recuperar la estabilidad y vamos a responder a este acto con una fuerza brutal», aseguró el mandatario en una alocución transmitida por la televisión oficial.

El atentado tuvo lugar este viernes en la mezquita Al Rauda, frecuentada por los sufíes, una rama del islam, en la localidad de Bear al Abd, al oeste de Al Arish, la capital del norte del Sinaí egipcio.

Egipto afronta el terrorismo solo, en nombre de la región y de todo el mundo», afirmó en árabe clásico el mandatario egipcio, quien añadió que este es un intento para frenar sus esfuerzos en la lucha antiterrorista.

Asimismo, pronunció una frase en dialecto egipcio:

Veremos a quién ayuda Dios, porque Dios ayuda a la gente buena y no a la gente malvada», y arguyó que, pese a este ataque, seguirán resistiendo.

La presidencia egipcia declaró tres días de luto nacional por las víctimas del ataque en la mezquita, que todavía no ha sido reivindicado por ningún grupo extremista.

Según la televisión oficial egipcia, el mandatario ordenó el pago de 200 mil libras egipcias, cerca de 11 mil 300 dólares, a las familias de las víctimas mortales, mientras que 50 mil libras, unos 2 mil 826 dólares, irán para las familias de los heridos.

Fuentes de seguridad egipcias explicaron que los atacantes colocaron artefactos explosivos de fabricación casera alrededor de la mezquita y los hicieron detonar a la salida de los fieles del rezo del viernes, día sagrado para los musulmanes.

Tras las explosiones los terroristas dispararon a las personas que intentaban escapar de la mezquita, y las primeras ambulancias que llegaron a la zona también fueron atacadas.

Los agresores incendiaron vehículos estacionados en las inmediaciones para bloquear el acceso a la mezquita y algunos disparaban desde allí contra quienes salían corriendo del recinto religioso.

Aunque por el momento ningún grupo extremista ha reivindicado el ataque, las autoridades egipcias sospechan que la responsabilidad es de los militantes islamistas, quienes se afiliaron al grupo radical autodenominado Estado Islámico (EI) e intensificaron sus acciones en el norte del Sinaí.