Un estudio advierte de que la gripe, unida a una neumonía bacteriana, incrementa más de tres veces el riesgo de muerte.
La gripe, junto con una neumonía bacteriana, podría incrementar más de tres veces el riesgo de muerte, por lo que prevenir neumonías bacterianas es especialmente importante cuando surge una infección por el virus de la gripe, según un estudio realizado por investigadores del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
La investigación, publicada en la revista ‘International Journal of Infectious Diseases’, ha sido coordinada por el Grupo de Investigación de Virología e Inmunidad Innata de la Universidad CEU San Pablo (USPCEU), que dirige el doctor Estanislao Nistal Villán, en colaboración con la Unidad de Inmunología y Trasplantes del Centro Nacional de Microbiología del ISCIII, liderada por el doctor Jordi Ochando.
Los investigadores han analizado datos de más de 48 mil pacientes publicados entre 2010 y 2020, provenientes de 135 estudios desarrollados en 28 países, en busca de las principales causas que incrementan la gravedad en caso de gripe. Los resultados, además, han sido validados de forma independiente mediante la plataforma ‘TrinetX’ con datos de casi cuatro millones de pacientes.
Los resultados apuntan hacia las infecciones pulmonares bacterianas como uno de los factores de riesgo más relevantes en infecciones por virus de la gripe.
«Algunas de las bacterias que causan estas neumonías secundarias pueden vivir en nuestro cuerpo y colonizar nuestro aparato respiratorio superior o infectarnos desde el exterior. Las más habituales, como ‘Streptococcus pneumoniae’ y ‘Staphylococcus aureus’, son responsables de más del 60 por ciento de las neumonías bacterianas asociadas a la gripe», detallan Javier Arranz-Herrero y Jesús Presa, primeros autores del estudio.
El doctor Estanislao Nistal Villán apunta que el análisis arroja datos «especialmente interesantes». Los investigadores han hallado también que algunas enfermedades hematológicas crónicas presentan un riesgo similar si se une a la gripe, seguidas del riesgo asociado a desórdenes neurológicos, insuficiencia renal, inmunosupresión, enfermedades hepáticas o cardiovasculares crónicas, además de otras condiciones.
LA PREVENCIÓN DE NEUMONÍAS BACTERIANAS, UNA DE LAS CLAVES
El estudio también arroja la posibilidad de que se estén infradiagnosticando las complicaciones bacterianas en casos de gripe, y pone de manifiesto la necesidad de afrontar estrategias de prevención, diagnóstico y tratamiento antibiótico en casos donde exista un riesgo alto de complicaciones asociadas a las infecciones gripales.
La gripe es una enfermedad causada por distintos virus Influenza. «A pesar de lo habituados que estamos a la palabra gripe, esta enfermedad se relaciona en España con más fallecimientos que los producidos por accidentes de tráfico. Existen distintas condiciones físicas, de edad, o enfermedades que hacen que los pacientes que desarrollen gripe tengan un riesgo alto de sufrir complicaciones y de morir», añade Nistal Villán.
Por otro lado, la investigación apunta a que el impacto de las infecciones bacterianas asociadas a casos de gripe puede estar detrás de la alta letalidad de la pandemia de 1918. «Más del 90 por ciento de las necropsias de pulmón analizadas de fallecidos por gripe durante la pandemia de 1918 tenían una alta presencia de bacterias, algo que pudo estar asociado a una mayor letalidad que la causada únicamente por la infección viral», apuntan los autores.
Los resultados apuntan a que la prevención mediante la vacunación, junto con medidas de contención de salud pública, el diagnóstico precoz y el tratamiento adecuado de las infecciones bacterianas para prevenir la posible aparición de otras bacterias cada vez más resistentes a antibióticos, son factores clave para mejorar el pronóstico de los pacientes con infecciones gripales.
La población infantil y las personas de edad avanzada son los grupos de mayor riesgo de sufrir complicaciones por la gripe. «Este trabajo trata de enfatizar con valores concretos los puntos débiles que deben de tenerse en cuenta para afrontar una mejor atención frente a la gripe», concluyen los autores del estudio.
REACCIÓN AL ESTUDIO: «EL ARTÍCULO INCIDE EN UN TEMA YA SABIDO»
Con todo, el profesor de Microbiología, asesor científico y director emérito del Centro Nacional de Gripe de Valladolid, Raúl Ortiz de Lejarazu, ha reaccionado a dicho artículo, del que ha opinado que «incide en un tema ya sabido: las complicaciones bacterianas de la gripe», según recoge Science Media Centre España.
«Más de la tercera parte de los 50-60 millones de muertes por la gripe pandémica de 1918 se debieron a sobreinfecciones bacterianas en una época en la que no se habían descubierto los antibióticos. Este artículo, análisis de artículos sobre gripe publicados entre 2010 y 2020, resume y cuantifica ese hecho conocido antes», reitera el experto.
Para Ortiz de Lejarazu, en los metaanálisis, lo que importa son los criterios de selección de los artículos que se ha usado y el análisis posterior. «Echo de menos, no sé si lo habrán recogido y preparado para otro artículo, separar los artículos en los que el diagnóstico de gripe está confirmado por el laboratorio de los que no lo está», ha sugerido.
A su juicio, también hubiera sido interesante saber si hay diferencias entre el porcentaje de sobreinfecciones bacterianas en los casos de gripe A subtipo H1 (afecta más a jóvenes) y los del A subtipo H3 (afecta más a mayores), y asimismo entre las gripes producidas por el tipo B.
jcp