“SI VIENEN LOS DE LA PROFEPA, ¡LOS SACO CON POLICIAS!” – Felipe Marrufo López
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El síndico del municipio de San Felipe, Felipe Marrufo López, alías “Catarino”, amenaza que de ir algún representante de PROFEPA u otra autoridad que intente tomar testigo del Mega-Ecocidio por la tala de más de 5,000 metros de Mangle de la Reserva de Ría Lagartos, hará uso de la fuerza pública municipal para expulsarlos.
El Mega-Ecocidio en San Felipe continúa, ya que de la parte destruida que hicieran público diversos medios de comunicación, hubo nula intervención o sanción por parte de autoridades como SEDUMA, PROFEPA o SEMARNAT, dando permisividad a continuar con la exterminación del mangle, ahora con el del fraccionamiento Vicente Fox Quezada a la altura de la calle 6 x 13 de ese municipio, las cuales para que no se vea la destrucción del humedal están siendo rellenadas con sascab.
Los habitantes a pesar del temor de posibles represalias por parte del Síndico y la Alcaldesa, comentan que parece una complicidad o protección por parte de las autoridades estatales y federales quienes han hecho caso omiso a los señalamientos y denuncias anónimas que decenas de ellos han realizado. Ante el cuestionamiento de los pobladores, la actual administración municipal alega que estas acciones son para la construcción de calles y casas, las cuales aún no queda claro para quien serían.
Recordemos que la semana pasada la agrupación Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) encabezada por el Secretario General del Comité Directivo Estatal, Ignacio Machaín Sosa, acudió a la Delegación de la PROFEPA en Yucatán para presentar un exhorto por este caso al titular de esta dependencia, José Lafontaine Hamui.
Indignación e impotencia es lo que sienten los pobladores ante este atropello que realizan el Síndico y la Alcaldesa sin ningún tipo de permiso o supervisión de autoridades estatales o federales, así como la nula intervención de grupos u asociaciones de protección ambiental a las cuales los mismos habitantes señalan haber contactado a través de las redes sociales, los cuales a pesar de la difusión de la noticia en medios de comunicación, parecieren omitir este hecho que afecta ambientalmente a toda la Península de Yucatán.