Proteger a Yucatán; frenar el deterioro de la vida y del medio ambiente, sin lugar a duda, es un tema prioritario y urgente: Eduardo Sobrino Sierra.

Discurso Dip. Eduardo Sobrino Sierra: Hay sembrar en la conciencia ciudadana la cultura de cómo evitar los daños que contrarresten las malas costumbres en materia de medio ambiente.

Con el permiso de la mesa directiva, Diputada Presidenta.

Diputadas y diputados de este H Congreso

Compañeros de los medios de comunicación

Publico que nos escucha en el medio de este H Congreso.

Mis respetos para todos.

Llevamos apenas 2 meses de trabajo, en la construcción de nuestra encomienda en el Poder Legislativo, sin embargo; en este breve tiempo he podido apreciar, que hay coincidencias y también hay diferencias; y eso es lógico; nuestros orígenes, nuestras posiciones políticas, nuestras historias, son diferentes. Lo más importante es que prevalezca el esfuerzo de hacer de este H Congreso, un poder soberano, autónomo; y donde también prevalezca el respeto y la tolerancia.

Hoy nos toca discutir en este pleno, la iniciativa sobre la Ley del Cambio Climático del Estado de Yucatán. En verdad que me preocupa que siendo la primera iniciativa que se turna al Pleno de esta legislatura, se haya convertido en un tema polémico. Y es claro que la polémica no es si estamos de acuerdo o no en que se requiere en Yucatán de la Ley del Cambio Climático.  Considero que al menos la mayoría, estamos de acuerdo en que hay que poner a Yucatán al día en tan importante materia: proteger a Yucatán; frenar el deterioro de la vida y del medio ambiente, sin lugar a duda, es un tema prioritario y urgente. Es más, estoy seguro de que este tema está en la agenda legislativa de todos. La aprobación de esta Ley permitirá crear las instancias para organizar y coordinar los trabajos, para darle coherencia y coordinación a los trabajos en pro de atender las urgencias que reclama el cambio climático; y se implementaran los mecanismos necesarios para evitar prácticas negativas y se promuevan políticas que propicien la protección del medio ambiente, así como sembrar en la conciencia ciudadana la cultura de como evitar los daños al medio ambiente que contrarrestar las malas costumbres en materia del medio ambiente y el cambio climático.

Para mí en lo general, el tema no tiene mayor discusión. Incluso en la propuesta no viene imponer nuevos impuestos, ni ningún tipo de cobros a los ciudadanos. Si está intención se presentará más adelante, en ese momento lo discutiremos, y me adelantó de que estaré en contra.  La polémica se abrió más bien, por una cuestión de procedimiento. ¿Sobre si Yucatán requiere de una regulación para amortiguar los efectos negativos del cambio climático? Eso no está discusión, si, si requerimos en Yucatán de la Ley del de Cambio Climático.  ¿La discusión sobre si debimos o no, haberle dado más tiempo de discusión a esta iniciativa y de manera incluyente? También considero que si debió haberse dado más tiempo de discusión entre los legisladores esta iniciativa e incluso debió abrirse la discusión.

Fíjense no más que paradójico: al mismo tiempo que se realizaba en este H Congreso un estupendo ejercicio de Parlamento Abierto organizado por nuestra diputada Vida Gómez, en torno a un tema del medio ambiente, sobre la situación que guarda la contaminación del agua en Yucatán, las razones científicas técnicas de su contaminación y como rescatarla, y sobre los alcances del agua potable en el estado, en otra sala de reuniones, la comisión de Medio ambiente, discutía si debíamos darnos más tiempo los legisladores para pasar la iniciativa del cambio climático de estado al pleno o se aprobaba como relámpago.

Y esta diferencia ha generado una polémica de procedimiento más que de fondo. Lamento que no se haya podido consensar, porque esta iniciativa pudo haberse acordado por unanimidad. Por lo que expreso públicamente mi acuerdo con que se apruebe la Ley del Cambio Climático en Yucatán en lo general, y al mismo tiempo externo mi desacuerdo y mi preocupación por en el procedimiento aplicado: del fast track, dañando la autonomía de este H. Congreso.

Es cuánto