Presenta iniciativa la diputada Pilar Santos, Ley de Protección a las Abejas y Fomento Apícola del Estado de Yucatán

Cuando de hablar del polinizador por excelencia se trata, el artífice de perfección siempre será la abeja.

Datos recientes del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), señalan que su labor beneficia el cultivo, la propagación, y producción de más del 60% de toda la flora del planeta tierra, siendo fundamental para la producción de al menos 87 de los principales cultivos agroindustriales, conformando así, el 70% de los cultivos usados directamente para consumo humano.

La península de Yucatán es, por tradición, una importante región productora de miel a nivel mundial, ya que en gran proporción el 95% de su producción se destina al mercado internacional, siendo inclusive considerada dentro de los primeros exportadores y productores de gran calidad en Europa y Estados Unidos debido a su característica de origen botánica.

De acuerdo con el Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) hasta antes del cierre del comercio internacional debido a la pandemia y las tormentas ocasionadas por “Amanda” y “Cristóbal” del año 2020 Yucatán era el principal productor de miel en el país, ocupando el primer sitio a nivel nacional con una producción anual en el 2019 de 11 589 toneladas, con un valor de producción de 444 millones de pesos, pero con la llegada de los siniestros antes mencionados, y la perdida de al menos 60mil colmenas debido a las inundaciones, gran parte de las y los apicultores del estado se vieron en la necesidad de migrar hacia diferentes actividades para la solventar los gastos familiares.

Es por ello por lo que, para proteger a los polinizadores, urge crear leyes acordes a las necesidades actuales, así como también crear políticas públicas que no solamente fomenten la apicultura en el estado sino, que también protejan a la abeja Apis Mellífera. Acercando la ley a la actualidad abarcando temas de derechos y obligaciones de las y los apicultores, regulando la instalación de los apiarios, aprovechamientos y protección de las zonas apícolas, inspección y verificación apícola, calidad y mejora de los productos, el retiro de los enjambres y desde luego las sanciones correspondientes por infracciones cometidas a dicha regulación. Así como también con la finalidad de incluir un capítulo exclusivo en temas de sanidad, legislando sobre el uso de plaguicidas que afectan la salud de los insectos de la especie Mellífera, tal como contemplan las legislaciones de otros estados, con el objeto de proteger el modelo de producción apícola campesino, que ha sido por muchos años una fuente de autoempleo que genera recursos importantes para que las familias en su mayoría las rurales, subsistan, y de igual manera se promueva la producción de la miel en el estado de Yucatán.

En virtud de lo anterior, se pretende abrogar la Ley de Protección y Fomento Apícola Del Estado De Yucatán y crear la Ley de Protección a las Abejas y Fomento Apícola del Estado de Yucatán, en donde se incluyan los lineamientos que fomenten el manejo de esta actividad, a fin de crear buenos hábitos en las y los apicultores y por consiguiente producir miel con los estándares de calidad competitivos, que permitan generar un ingreso justo como sustento para todas las familias yucatecas que se dedican a esta noble actividad.

Tomando en cuenta que la actividad apícola es un conocimiento heredado por nuestros antepasados mayas durante generaciones milenarias, que el 90% de las y los apicultores en la Península de Yucatán son pequeños productores (es decir, que cuentan con menos de 60 colmenas), maya hablantes, y en su mayoría personas de la tercera edad y que la apicultura no es la actividad de sustento principal de las familias,   la labor que ejercen en el campo adquiere un valor inescatimable, por eso como yucatecas y yucatecos sentimos gran orgullo y agradecimiento.

Por lo anterior mencionado, es que hoy les pido dejemos de lado toda diferencia, para consolidarnos en un mismo interés en común, como yucatecas, como yucatecos, como mexicanas, como mexicanos, pero más aún, como portavoces de quienes más nos necesitan.

En congruencia al pronunciamiento anterior, convergemos en la ideología de suma de esfuerzos para contribuir a la modernización, correcto desarrollo y recuperación de la ganadería apícola, a través de la implementación de lenguaje con perspectiva de género, procedimientos vanguardistas acorde a los estándares de exportación internacionales y a los procedimientos de prácticas sustentable.

Quiero agradecer a mis amigas y amigos apicultores del distrito quince, su colaboración y su enorme interés en la presente iniciativa, de igual manera le agradezco al director general, mi amigo Rigoberto Serrano Silva, y a el gerente general el contador público Ibis Janitzio Banderas Couoh, ambos de la planta procesadora Oaxaca miel, por todo el interés prestado para fortalecer el trabajo de nuestras apicultoras y apicultores del Estado.

Por último, y no menos importante a la secretaria de Desarrollo Rural, que desde hace ya un tiempo ha estado trabajando de la mano, para que esta iniciativa se haga realidad.

Por tal razón, y de conformidad a lo expuesto con anterioridad me permito someter a la consideración de esta Honorable Soberanía la siguiente iniciativa de Decreto por el que se abroga la Ley de Protección y Fomento Apícola del Estado de Yucatán y se crea la Ley de Protección a las Abejas y Fomento Apícola del Estado de Yucatán.

Hago entrega de la presente iniciativa en físico y en digital a la vicepresidenta de la mesa directiva.