Ningún servidor público de México.
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Reciéntemente en un canal de noticias que se transmite por televisión de paga, en México, a manera de burla, un grupo de 5 diputados federales del partido acción nacional (los partidos políticos siempre deben escribirse con minúsculas, dado el pobre alcance de su valor social), decidieron apoyar a México con medidas de austeridad, entre las que se mencionaron: renunciar a sus vales de gasolina, reparación de sus vehículos, y gastos de telefonía celular.
Su postura ante la crisis económica que vive México resulta una burla. En primera instancia, es inaudito que además de los sueldos que reciben, con el dinero de nuestros impuestos se les tenga que dar Bonos Extra. En México somos alrededor de 100 millones de habitantes, de los cuales, un gran porcentaje es el que paga sus impuestos, de una u otra forma, aún los del comercio informal, porque se nos cobran impuestos por cada compra que realizamos. Pero si quieres usar telefonía celular, pagas tu plan, o usas tarjetas pre pago, pero los diputados y senadores, junto con los altos funcionarios del gobierno, alcaldes y gobernadores, tienen Bonos y Pagos de Telefonía Celular a nuestro cargo.
Si a ti, ciudadano, se te avería el vehículo de transporte, tienes que pagar el servicio mecánico con el dinero de tu sueldo, pero los diputados tienen Mantenimiento Vehícular con nuestro sueldo. Lo triste de sus Trágicos Planes de Austeridad, es que los Trabajadores del Gobierno, los empleados de bajos y medianos puestos son los que no recibirán aumentos al salario, no podrán realizar salidas de campo, no podrán hacer las visitas necesarias por su trabajo, porque a ellos es a los que se les Aplicará el Programa de Austeridad, y no a los diputados y senadores.
Ningún servidor público en México debe ganar más de 60 mil pesos al mes, en ningún puesto de gobierno. No hay razón para que un individuo «IMPRODUCTIVO ECONÓMICAMENTE» como lo son los diputados y senadores federales y estatales, se hagan de un sueldo, que es producto de los impuestos que millones de mexicanos les pagamos vía los impuestos por nuestro trabajo cuyos sueldos van de los 4 mil a los 30 mil pesos mensuales, como trabajadores de cualquier empresa. La gran mayoría de mexicanos gana al mes entre 4 y 8 mil pesos mensuales, y los que bien les va: entre 9 y 30 mil pesos mensuales. Mientras que los diputados ganan cifras exorbitantes. Los personajes de México que ganan más de 60 mil pesos al mes, son porque sus ideas, sus esfuerzos, su creatividad, su talento los han llevado a ser artistas, científicos, deportistas empresarios de éxito.
Pero ningún parásito, por sentarse a revisar Leyes, que ni siquiera ellos generan con sus cabecitas, sino que devengan en sus asistentes, colaboradores, abogados y demás personas bajo su cargo, no pueden ganar más que un empresario, ni más que alguien cuyo ingenio o talento se ha trasladado del conocimiento y esfuerzo a la población.
La lucha del pueblo de México, ahora, tiene que ser por el TOPE SALARIAL a los diputados, senadores, gobernadores, alcaldes y regidores, ministros de la suprema corte, directores y secretarios de gobierno. Nadie en la Administración pública puede ganar más de 60 mil pesos mensuales (dos mil pesos diarios). Es una burla al país, y no debemos permitirlo más.