Mensaje del Gobernador del Estado, Mauricio Vila Dosal, respecto del Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado de Yucatán para 2018
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Muy buenos días tengan todos ustedes. Me acompañan aquí, en el presídium, la abogada María Dolores Fritz Sierra, secretaria General del Gobierno; la maestra Olga Rosas Moya, secretaria de Administración y Finanzas; el consejero Jurídico, licenciado Mauricio Tappan Silveira, y el contador público Juan Carlos Rosel Flores, director de la Agencia de Administración Fiscal. Muy buenos días tengan todos los representantes de los medios de comunicación.
Como ustedes bien saben, el día de ayer, presentamos el paquete fiscal del Estado de Yucatán para el ejercicio del año 2019. La propuesta que presentamos es el resultado de un ejercicio de diálogo y construcción con la sociedad civil, sin precedente en la historia de nuestro estado; la propuesta fiscal de ingresos y de egresos, que presentamos el día de ayer, fue aprobada por unanimidad por el Consejo Consultivo del Presupuesto y Ejercicio del Gasto del Gobierno de Yucatán.
Este es un hecho histórico en nuestro estado: por primera vez, el paquete fiscal, y la propuesta de ingresos y egresos, no es construida unilateralmente por el Ejecutivo del Estado; es una propuesta construida con los expertos del tema, en un Consejo donde la sociedad civil, y no los funcionarios públicos, tienen mayoría.
Esta propuesta se hace con responsabilidad, austeridad, disciplina, reflejando el interés de la sociedad y despolitizando las finanzas públicas. Lo anterior fue sólo posible porque instalamos, desde el segundo día de nuestra administración, dicho Consejo, y nos ha permitido trabajar de la mano de la sociedad civil. Sin duda, nos enfrentamos a un escenario inédito en materia presupuestal, considerando específicamente dos hechos principales.
El primero de ellos es que el Estado de Yucatán recibirá, por parte de la Federación, un presupuesto para el año 2019 que representa, en términos reales, un ocho por ciento menos de lo recibido en este año 2018. Esto significa dejar de recibir 3,387 millones de pesos en términos reales.
Además de los recortes de la Federación, la actual administración todavía arrastra un déficit de 1,800 millones de pesos, heredados de la administración anterior, y a ello se suman contingencias por más de 2,500 millones de pesos, derivadas de observaciones de organismos fiscalizadores federales, no solventadas, correspondientes a la administración anterior, lo cual, sin duda, también contribuye a complicar el actual panorama presupuestal de la entidad.
La situación global de las finanzas del Estado es más complicada y deficitaria, pues el proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación, que está en discusión en estos momentos, del año 2019, elimina varios fondos muy importantes para las finanzas del Estado, entre ellos, el de contingencia del Ramo 23, y reduce significativamente convenios destinados a la educación y programas de apoyo a las mujeres, entre otros.
Importante señalar que estas reducciones no son exclusivas del estado de Yucatán, sino que se están dando en todos los estados que incluye este país. Esta reducción significa que el año 2019 será un año sumamente difícil y tendremos que hacer esfuerzos muy grandes para atender las necesidades de los yucatecos.