Más reconocimiento social, mejores oportunidades económicas y mejores espacios a nuestros jóvenes: Carmen González

Hago uso de la tribuna nuevamente para presentar a su consideración el dictamen en materia de juventud.

Reforma a nuestra constitución local que obedece a merecido reconocimiento que ha esperado pacientemente el turno de ser introducido en la máxima norma del sistema jurídico yucateco.

La juventud es una etapa permanente en la vida, pero pasajera en el desarrollo y las oportunidades, incomprendida y temida por su vigor y su fuerza, pero anhelada entrada la sazón de la experiencia.

Esto es lo que ha movido al Constituyente Permanente y a este mismo Congreso del Estado, a darle mejores espacios en la vida pública a la juventud, pero ahora es el tiempo de no dejar de lado las herramientas que podamos dotarles reconociendo el derecho al desarrollo integral a partir de la política pública.

Más reconocimiento social, mejores oportunidades económicas desde las capacidades y competencias formadas en el aula, así como en su entorno, y más posibilidades de intercambio cultural son los ejes que podemos y queremos fortalecer como Congreso con esta reforma.

Decirles a nuestros jóvenes que, junto con las mujeres, con las infancias, con las personas adultas mayores y los grupos vulnerables son importantes para nosotros, es que sientan que tienen un aliado en cada una y cada uno de nosotros, y no como una concesión graciosa, sino como una muestra de la composición de este poder del Estado, teniendo la democracia y el diálogo como los faros conductores de esta Soberanía.

Agradezco nuevamente a todas y todos los integrantes de la Comisión de Puntos Constitucionales y Gobernación su voto a favor en las sesiones de trabajo.

Digamos entonces sí a nuestras juventudes, digamos sí a esas futuras constructoras de la equidad, de la igualdad y del equilibrio social; digamos sí a los futuros vigías de la seguridad, la justicia, las tradiciones y la cultura en nuestro Estado.

Es cuanto.