Los passwords agonizan, pronto podrían quedar obsoletos

Los consumidores demandarán procesos de pago más seguros en dispositivos móviles y a biometría será cada vez más usada para reconocimiento del usuario

La empresa S21sec, especializada en seguridad de la información con presencia en España, Portugal, Estados Unidos y México, establece en su reporte Ciberpredicciones 2019 que el uso de contraseñas pronto podría desaparecer en los procesos de pago realizados a través de teléfonos móviles, debido al impulso que en fechas recientes se le ha otorgado al desarrollo y despliegue de nuevas invenciones y tecnologías con el fin de proporcionar medios más seguros a los diferentes elementos implicados a través de las transacciones en línea.

Cada vez con más frecuencia, empresas comerciales y financieras centran sus estrategias en el uso de teléfonos móviles debido a su alta adopción por parte de los usuarios, y ofrecen aplicaciones basadas en tecnología biométrica, como lectura de huellas dactilares y reconocimiento facial, para autentificar las transacciones. Según Juniper Research, 770 millones de aplicaciones de autenticación biométrica serán descargadas en 2019.

“Con esta tecnología no sólo viene la conveniencia y una mejor experiencia del cliente, sino también una nueva forma de seguridad y verificación de identidad para los servicios”, señaló Alejandro Clares, líder de auditoría para Latinoamérica en S21sec.

El especialista, con más de 15 años de experiencia en seguridad de la industria financiera, señala que, a medida que más aplicaciones entren en el mercado, las tecnologías de escaneo de huellas dactilares mejorarán e incluso más métodos biométricos serán la regla: “Las contraseñas (passwords) pronto pueden quedar obsoletas”, comentó.

Debido a la continua transformación digital que experimentan todos los sectores de la industria, el proceso de pago ya no es visto como una mercancía, sino como una verdadera experiencia de compra. Es por ello que los consumidores esperan experiencias de checkout sin complicaciones y seguras desde sus teléfonos móviles.

No hay que olvidar que el nuevo entorno regulatorio promovido en 2018 por el Gobierno de México bajo la Ley Fintech obligó a la mayoría de las marcas de tarjetas de crédito e instituciones financieras a proporcionar Interfaces de programación de aplicaciones (APIs) que permitan la interacción con las empresas over-the-top para que los consumidores, por ejemplo, puedan tener una sola vista de dónde se almacenan sus tarjetas en todos los servicios digitales.

Es debido a esta interacción entre distintos actores a través de APIs que S21sec también pronostica un incremento en la introducción de métodos basados en machine learning y robo-asesores en tiempo real para bloquear transacciones y comportamientos sospechosos antes de ejecutarse.

“Más allá de las tecnologías de tokenización y encriptación en la nube, que ya se utilizan actualmente, estos nuevos métodos predominarán a lo largo del presente año con el fin de asegurar el principio fundamental de las APIs: la instantaneidad de la ejecución y el control en el proceso de pago”, puntualizó Clares.