Llaman a los padres de familia a educar con el buen ejemplo

Mérida, Yucatán 17 de junio 2017.- En el marco del décimo aniversario de la implementación del sistema de justicia para adolescentes, la especialista en el tema de jóvenes infractores, Guadalupe Ruíz Bojórquez, pide a los padres de familia intervenir de manera decidida en la educación de sus hijos.

«Hay que tener disciplina pero sin caer en excesos como golpearlos o lastimarlos», dijo la abogada quien momentos antes ofreció una conferencia magistral en la que destacó que a nivel nacional hay 50 millones de personas que viven en condiciones paupérrimas.

«Muchas familias no tienen casa, y los padres tienen que salir a trabajar para sostener el hogar, por lo que los hijos prácticamente al no estar bien atendidos, se sienten abandonados y salen a buscar compañía, formando pandillas que roban y asaltan, sin olvidar que estas condiciones son propicias para que el consumo de drogas terminen por desquiciar el hogar», recalcó.

Al respecto, el magistrado de la Sala Unitaria de Justicia para adolescentes, Santiago Altamirano Escalante, dijo que debido a la complicada situación económica, el riesgo de que empeore la incidencia delictiva en menores es latente, por lo que recomendó a los padres de familia tener en cuenta aplicar a sus hijos  reglas y límites para fortalecer sus principios y valores, pero sin olvidarse del amor.

Dijo que al igual que hace 50 años, la mejor manera de formar a los hijos, es dándoles un buen ejemplo, aunque recalca que en la actualidad con la tecnología, hay más factores de riesgo que inciden en la conducta de los menores.

«Lo importante es que la familia entera se reeduque y se adapte a los cambios que trae la modernización, de modo que no solo los menores y adolescentes, sino todos sus integrantes, sean capaces de discernir cuando una acción, como el consumo de alcohol o tabaco o inclusive de alguna otra sustancia como la mariguana, puede traerles una consecuencia legal o un daño a su salud», explicó.

En este sentido dejó en claro que las reformas del 2005 al artículo 18 constitucional establecen, que si bien los

Infractores de 12 a menos de 18 serán sujetos al sistema acusatorio oral, pero bajo principios específicos por ser perdonas en desarrollo, los menores de 12 también tienen una consecuencia en sus actos, ya que serán atendidos con asistencia social por parte del estado, aunque no tengan que estar privados de su libertad.

«Podemos afirmar que a diez años de la implementación de este sistema de justicia para adolescentes vamos por buen camino, siendo que en el caso de los menores y jóvenes internos en el Ceama, sólo dos por ciento son reincidentes», subrayó.

En contraste, esa efectividad se ve afectada cuando el tratamiento que se le da al menor tras su sentencia condenatoria es externa, es decir cuando la cumple en el núcleo familiar bajo supervisión de los padres ya que el porcentaje de reincidencia aumenta a más del 60 por ciento.

«Esto se debe a que regresan a las mismas condiciones y circunstancias que los llevaron a cometer el delito por lo que la recomendación que hace la maestra Ruíz Bojórquez, es de gran importancia», concluyó