Mérida, Yucatán 11 de febrero 2021.- Derivado de la emergencia sanitaria por COVID-19, especialistas en Pediatría de la Oficina de Representación Yucatán, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), señalaron que ante la recomendación de evitar que salir de casa para prevenir contagios en recién nacidos y bebés, es importante brindarles opciones de estimulación temprana desde el hogar.
Ello, con el propósito de fomentar su desarrollo y habilidades, además de potencializar sus funciones cerebrales en todos los aspectos: cognitivo, lingüístico, motor y social.
La pediatra y coordinadora de Prevención y Atención a la Salud, doctora Flor Rodríguez Melo, indicó que la estimulación temprana debe iniciar, de preferencia, desde el nacimiento y concluir aproximadamente a los tres años de edad, ya que garantiza la adquisición de buenas y distintas funciones y habilidades cerebrales en los menores; posteriormente la familia debe vigilar el desarrollo psicomotor de los niños.
El IMSS en Yucatán cuenta con el servicio de Estimulación Temprana, que ante la emergencia sanitaria y la adecuación de las unidades hospitalarias para su atención, brinda la opción, en caso de requerirlo, de capacitar a madres y padres de familia para que continúen desde sus hogares con estas técnicas.
Aunque algunos ejercicios deben realizarse bajo la supervisión de especialistas, Rodríguez Melo señaló que existen opciones para estimular a los pequeños en casa de forma segura. Por ejemplo, el mostrar diversos objetos y pronunciar el nombre de cada uno de manera correcta. Si el niño señala alguno, se le repite el nombre y sus características.
Otras recomendaciones por grupo de edad son:
- De los cuatro a seis meses, es importante ayudarle a sentarse, hablarle por su nombre y estimularle a jugar con objetos y texturas.
- Entre los siete y nueve meses, permitirle moverse, gatear y explorar.
- De los 10 meses al año, ayudarle a dar sus primeros pasos.
- Entre el primer año y hasta los dos, se le debe motivar a caminar, enseñarle juegos para coordinar movimientos, cómo atrapar pelotas o levantarse y agacharse, así como ayudar a abrir y cerrar objetos.
En caso de disponer de espacios exteriores como terrazas, jardines o patios, se pueden realizar juegos más activos, refirió.
Para estimular la vista, es correcto enseñarle imágenes de alto contraste, así como realizar dinámicas frente a un espejo. Para el olfato se le pueden facilitar algunas cremas con diversos olores; para desarrollar mejor el oído son de apoyo utensilios del hogar (no dañinos) con los que puedan generar y experimentar diversos sonidos.
Cantar también mejora el aprendizaje de sonidos y patrones de lenguaje; leer con las y los niños les ayuda a reconocer secuencias de palabras.
Estas actividades deben realizarse al menos tres veces por semana, como parte de la rutina del infante.
En caso de cualquier duda sobre el desarrollo psicomotor de la o el bebé, es importante acudir a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) para contar con orientación del especialista.