Fidget Spinner, entre el odio y el amor

Este juguete de moda cuenta con miles de seguidores que aseguran que es terapéutico, pero también tiene detractores en en cual ya mató a una niña en Coahuila

Es atractivo e hipnotizante. Definitivamente, la moda del momento entre niños y adultos: el Fidget Spinner o Spinner, como comúnmente se le conoce.

Se trata de un objeto, de plástico o acero, con un eje central y dos o tres brazos que terminan en aros con rodamientos, lo que lo convierte en un juguete giratorio.

En México, los hay desde 50 pesos hasta 600 dependiendo del modelo y las características, que van desde el plástico, acero u otros metales.

De este popular instrumento se ha dicho de todo, desde que nació con fines terapéuticos y que reduce la ansiedad hasta que funciona bien para personas con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o trastorno del espectro autista.

De hecho, el propio Jeff Bezos, empresario y fundador de Amazon.com comentó que es el juguete más vendido en su sitio, mientras que la revista Forbes lo ha llamado ‘El juguete imprescindible para la oficina en 2017’.

Muchos, por ejemplo, enumeran sus virtudes, como la directora del Centro de Autismo de la National Autistic Society del Reino Unido, quien se lamenta que ya estén prohibidos porque son juguetes que ayudan a sus alumnos a concentrarse, relajarse y aprender.

Incluso, un estudio publicado en la revista Jounal of Abnormal Child Psichology en 2015 determinó que las personas con déficit de atención pueden tener mejores resultados si al estar aprendiendo algo mueven constantemente la pierna, el pie o la silla, situación que los seguidores de este popular juguete le atribuyen.

Sin embargo, el sicólogo Mark Rapport dejó en claro que el Spinner no ha sido sujeto de estudio y que por ende no se puede afirmar que realmente cumpla con ese fin terapéutico. “Usar un gadget tipo Spinner es más probable que sirva como una distracción que como un beneficio para las personas con TDAH”, comentó al portal CNN.

Por otra parte, profesores de escuelas de Estados Unidos, Reino Unido y México aseguran que estos juguetes, lejos de mejorar la atención del niño, los distrae y los aleja de cualquier relación con sus compañeros, además de que ya están ocasionando daños físicos, principalmente a las niñas al accionarlo cerca del cabello haciendo que se les enrede irremediablemente.

Los usuarios, en su afán de demostrar que son muy diestros se han ocasionado daños en nariz, boca y dientes, además de ser peligroso para menores de cuatro años por las piezas pequeñas que posee.

Con todos estos elementos en contra, la consejera escolar de Illinois, Jennifer Horns dijo a la cadena radiofónica NPR que el Spinner se han convertido en un problema.

Los estudiantes siempre están sosteniendo el spinner en la mano y lo giran, usualmente en las mesas, y los niños lo mueven en el aire. Lo tratan de girar sobre sus narices y codos y tratan de jugar con él en todos lados… Es bastante molesto”, dijo Horns.

En México también existen dos vertientes: escuelas que los han prohibido definitivamente y otras que  han aprovechado la fascinación que los niños tienen por este juguete y que los impulsa a desarrollar otras actividades, compitiendo entre ellos.

Se les pide, por ejemplo, ver cuántas operaciones matemáticas pueden hacer mientras su Spinner sigue girando, un método que les ha funcionado bastante bien.

En fin, el juguete de moda creado por Catherine Hettinger, en la década de los noventa,  que ideó para pasar más tiempo con su hija y no como método terapéutico y cuya patente perdió en 2005 al no contar con los 400 dólares que requería para hacer el trámite, sigue siendo motivo de controversia pero a pesar de todo, por el momento nadie le quita el ser el juguete de moda.