Discurso del Gobernador Rolando Zapata Bello al presentar el Sistema de Prevención de la Deserción Escolar (Siprede) del Conalep

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Yo me siento muy contento, de verdad me siento muy contento de estar aquí; le agradezco muchísimo al licenciado representante de la maestra Candita, que la queremos mucho, le manda muchos saludos, ella sabemos que tiene muy pendiente a todos los Conalep pero particularmente en el caso de Yucatán.

Y a los padres de familia, a las mamás, que veo que normalmente, siempre así lo digo, “las madres de familia”, aunque se dice “padres de familia” pero realmente las madres de familia son las que vemos que están más atentas con los temas relacionados con la educación y, en general, con el bienestar de la casa.

Me da mucho gusto saludar al doctor Manuel Carrillo, Manolín, como le digo con afecto y, con él, saludar a todas las directoras, directores; a la directora del plantel, aquí está la directora del plantel, muchas gracias; a los demás planteles; al personal directivo; a los maestros, maestras; a todos quienes, como hemos dicho, forman esta gran familia Conalep.

A las autoridades educativas; el secretario de Educación, Víctor Caballero; al profesor Wilbert, de la SEP; a todas las autoridades educativas; Gabriel Barragán, del Cepredey, es importante por todo el proceso de prevención del delito; representantes de nuestra máxima casa de estudios, la Universidad, muchísimas gracias; a todos.

Y he escuchado esta dinámica muy interesante, pero sobre todo muy importante, muy útil para el gran propósito que tenemos, que es brindarle, en este caso a nuestra juventud, no únicamente educación sino una educación de calidad, una educación que cumpla con los propósitos de formar integralmente a los jóvenes para que estén listos, o bien para incorporarse a las actividades productivas, o bien para continuar sus estudios en los niveles superiores.

Y yo creo que la mejor manera de hacerlo es precisamente con instrumentos como éste, que permiten algo que doña María Elena dijo y yo le agradezco mucho, porque yo creo que es la esencia de este programa, y bien lo expresaba igual acá el licenciado hace un momento, un alumno no es un folio, un alumno no es un número, un alumno no es un registro, un alumno es un ser humano.

Y acciones como ésta o programas como éste, permiten precisamente que se les trate como tal, que haya una comunicación directa y efectiva que refleje, no únicamente la preocupación, sino la ocupación y la atención que la institución educativa le está dando a ese ser humano.

Que es un ser humano que, como todos, tiene sentimientos, tiene problemas, tiene inquietudes, tiene dudas, tiene situaciones en la casa, etcétera, y si un día no va a una clase o falta a clase, o su rendimiento está bajo, no únicamente hay que ponernos a pensar si es flojo o es irresponsable.

Hay que ponernos a pensar qué hay detrás de esas actitudes o de esas conductas, pero fundamentalmente, es más importante preguntarnos como institución educativa, qué podemos hacer nosotros como institución educativa para atender o solucionar esa situación, como bien lo decía la psicóloga con toda precisión, con ejemplos concretos.

Cuántos jóvenes se pueden encauzar adecuadamente, como ella dijo, con una intervención –que bien puede ser una plática– y estamos en un mundo moderno, estamos en un mundo caracterizado por el desarrollo tecnológico, por la modernidad, por el uso de instrumentos digitales: estamos en un mundo caracterizado por la información, hay mucha información, pero lo verdaderamente importante es saber utilizar esta información y darle una utilidad a esa información.

El maestro sabe que el alumno no acudió a su clase y, si realiza una labor de manera automática o, digámoslo así, tradicional, pues simple y sencillamente, al llegar el mes, de manera mecánica o automática hará su reporte y dirá “tal alumno faltó tres veces; tal, cinco; tal, ocho”.

Bueno, cierra su reporte, presenta su reporte, “yo ya cumplí” y, al finalizar el año, a lo mejor se hace un balance y se ve que el alumno acumuló demasiadas faltas como para aprobar y simplemente está reprobado, porque excedió el número de faltas posibles y se acabó.

No, en este caso, la información que tiene el maestro… Porque muchas veces –hay que decirlo, duele decirlo pero es la verdad–, muchas veces el padre de familia se entera de que su hijo reprobó una materia hasta que ya la reprobó, y qué mejor que saberlo desde el momento en que se está gestando esa inconsistencia o esa conducta, porque faltó un día a clase o porque ya lleva varias faltas acumuladas, o porque está teniendo un bajo rendimiento.

Porque es cuando el padre puede platicar, el papá, la mamá puede platicar con su hijo, inclusive con el apoyo profesional de la institución, para arreglar cualquier situación que hay en casa, porque somos seres humanos; hay veces hay alguna situación en la casa y ni nosotros mismos nos damos cuenta sino hasta que se nos avisa, o también poder aclarar y decir que estamos enterados y que no hay problema.

Cuando estaban pasando el reporte de las respuestas de padres de familia, vi una que me llamó la atención, porque entiendo que le reportaron a un padre de familia, a una mamá, que su hijo había faltado, tuvo inasistencia y vi que la contestación fue: “sí, es que le duele la panza, pero mañana sí va”. Y bueno, eso es bueno porque entonces ya se está estableciendo una relación personal con el alumno, con los padres de familia.

Y ese vínculo y esa relación personal es lo que, desde mi punto de vista, establece un círculo virtuoso que permite que padres de familia, que la escuela, la institución educativa y toda la sociedad representada con ellos, con los padres de familia y con la institución educativa, estemos abrazando, protegiendo, impulsando a nuestros jóvenes, que son lo más valioso que tenemos.

Y son lo más valioso porque hoy Yucatán está transformando su economía, está desarrollando un nuevo rostro económico y ese nuevo rostro económico demanda la formación de capital humano, demanda a jóvenes que tengan la capacidad, que tengan la preparación para ocupar los espacios y las plazas que las nuevas empresas que están invirtiendo en Yucatán, y que requieren técnicos, que requieren ingenieros, que requieren personal capacitado y calificado, tenga esta formación y existan en cantidad suficiente.

A mí me da mucho gusto, porque también este programa es signo o símbolo de un elemento que estamos impulsando mucho en Yucatán, que se llama innovación, y la innovación se da en todos los aspectos, absolutamente en todos los aspectos de la vida.

Si tú estás desarrollando una actividad de determinada forma, pero a esa actividad le aplicas elementos nuevos, diferentes, novedosos, que te permiten cumplir con el propósito de la actividad de una manera más eficiente, más rápida, más adecuada, entonces estás innovando.

Y aquí en el Conalep se está innovando, este programa es una gran innovación que permite una mayor eficiencia terminal para nuestros alumnos; sin duda, esto va a disminuir el rezago educativo, fundamentalmente la deserción escolar, pero lo más importante, le va a dar a los papás la seguridad y la certeza de que sus hijos están acudiendo a las clases y, si hay alguna falta, bueno, pues saberlo, o si hay un bajo rendimiento, saberlo.

¿Y saben algo más? Yo creo que muchas veces pudiéramos pensar que pues esto resulta como para, como una presión o algo para los alumnos, pero yo creo que no; yo creo que, a fin de cuentas, los alumnos realmente aprecian este programa.

Porque muchas veces, cuando un joven, cuando una señorita, tiene una mala conducta, o tiene una falta o una asistencia, no es que sea un joven malo, no es que sea una muchacha mala, simple y sencillamente es que a lo mejor tiene algún problema, y no tiene o no encuentra la forma de cómo manifestar o cómo llamar la atención, porque necesita ayuda.

Y ahí es donde debe estar presente su institución educativa lista para detectar el problema y fundamentalmente para apoyarlo, porque lo que nosotros queremos es que todos nuestros alumnos concluyan sus estudios, que todos nuestros alumnos sean hombres y mujeres de bien, y la mejor manera de hacerlo es así, viéndolos como seres humanos, tratándolos como seres humanos, estando muy cerca de ellos.

Y yo quiero aprovechar para decirles algo que me da mucho gusto. En las últimas semanas que se inauguraron los torneos de fútbol aquí en la ciudad, el Conalep tiene equipos creo que en tres ligas, ¿verdad? ¿Dos o tres ligas? En el Rogers, en la Modelo y en el Patria… No, en la Modelo igual. Ah, bueno, en el Tec, pero en el Tec no fui a la inauguración, no fui.

Pero bueno, a donde fui a la inauguración, me dio mucho gusto ver al director General del Conalep en la inauguración, a los directores, a los maestros; a pesar de que el evento era domingo a las ocho de la mañana, allá estaban, ¿verdad?, apoyando a su equipo.

Y eso es algo muy positivo porque eso, mi estimado licenciado, es lo que le está cambiando el rostro al Conalep en Yucatán, esa vinculación, esa interacción; no es nada más “a ver, vayan chavos”, desfile inaugural, o que vaya algún maestro y los apoye, sino que se siente la institución, el arropamiento, apoyándolos.

Y eso está permitiendo, entre otras cosas y no es un asunto menor, gracias al apoyo del Gobierno de la República, del Presidente Peña. En estos años, se han podido introducir modernos laboratorios, equipo, mobiliario, infraestructura.

Y ese conjunto de elementos, la actitud del personal directivo, de los maestros, de las maestras, la formación permanente que están teniendo, el programa de profesionalización docentes, bueno, todos esos elementos, han generado una sinergia, que yo digo y me da una gran satisfacción.

Yo recuerdo pues, hasta hace algunos años y lo digo con claridad, cuando se abría el periodo de registro para las escuelas, el Conalep muchas veces no llenaba su solicitudes de ingreso, y era hasta que en otras escuelas presentaban y no podían pasar los que, digámoslo así, veían al Conalep como una segunda opción, pues para no dejar de estudiar y continuar estudiando.

En estos últimos cursos escolares, de manera particular, desde el momento que se abre el registro para los aspirantes, se llenan por completo las aulas de los Conalep, de todos ellos, con una primera opción. Bueno, ya inclusive hay la problemática de que las solicitudes rebasan la capacidad y bueno, pues son los que califican el examen con mejores calificaciones los que entran.

Y eso dice mucho, eso dice mucho porque es la mejor prueba, es la mejor prueba de que se están haciendo las cosas bien, se está innovando, se está preocupando la institución por sus alumnos, está disminuyendo la deserción escolar sustancialmente y se está haciendo de manera conjunta.

Y se está haciendo, como nosotros decimos, la parte que le corresponde: los alumnos echándole muchas ganas con un gran sentido de participación; los maestros, el personal directivo, y de manera muy amplia, toda la sociedad, los sectores productivos, que han entendido muy bien el valor y el peso que tiene la educación en el propio proceso del tejido social, de la armonía que queremos que se siga viviendo siempre en Yucatán.

Y por eso es tan importante vigilar todos estos procesos educativos con nuestras estrategias de prevención del delito –aquí está Gabriel Barragán–, en fin, todo esto son situaciones muy positivas para el estado, muy buenas noticias, de las noticias que nos indican que vamos por el camino correcto y que hay que seguir avanzando.

¿Quiénes de los que están aquí, alumnos y alumnas, están en el tercer trimestre? Que levanten su mano. Aquí, ¿de qué semestre son? ¿Tú eres de tercero? Bueno, los que están en tercer trimestre, les quiero decir que acabo de confirmarlo acá con el secretario de Educación, lo estamos revisando, y nuestro compromiso es que, antes que termine este año, antes de diciembre, les vamos a entregar sus computadoras del programa Bienestar Digital, ¿verdad, secretario?

Como lo estamos haciendo ya con los diferentes planteles, porque sabemos también que ese ha sido también un programa que ha contribuido, les digo, cada quien haciendo la parte que le corresponde; así que chavos, chavas, a estudiar muy fuerte, a enaltecer, a honrar ese gran esfuerzo que hacen sus papás y que hacen sus mamás para que ustedes vengan a clase.

Pero fundamentalmente, más que por que vengan a clase, por que tengan ustedes la mejor de las herencias que un padre le puede dar a un hijo, que es una formación educativa y profesional para abrirse paso por la vida, siendo una persona de bien, viviendo en condiciones dignas y de bienestar, ustedes y, el día de mañana, sus familias.

A seguir echándole muchas ganas. Muchas felicidades. Manolo, muchas felicidades; directora, directores, a todos, a seguir echándole muchas ganas por Yucatán. Muchas gracias.