Sobre reformar la Ley para la Gestión Integral de los Residuos en el estado de Yucatán. Generando una prohibición gradual del uso de plásticos y sus derivados y poliestireno en cualquier unidad económica .
A nivel mundial el año 2018 fue clave para reducir la carga que implica la contaminación por plásticos para el planeta y sus habitantes. La Organización de las Naciones Unidas ha lanzado una campaña con el fin de rechazar lo que no se puede rehusar, dicha campaña enfocada en los plásticos, que pueden ser de gran utilidad, pero se han convertido en un verdadero problema ecológico cuyo impacto está afectando la vida de la flora y fauna, la salud de las personas y el equilibrio de los ecosistemas.
Se sabe que entre el 60 y el 80 % de la contaminación de nuestros océanos es generado por los plásticos que sólo se usa una vez.
Los plásticos de un solo uso, que se emplean a diario para acarrear objetos, empacar, guardar y disponer de alimentos entre muchos otros propósitos, pudieran considerarse inofensivos por la familiaridad con que los utilizamos. Sin embargo, el hecho de que no se puedan utilizar de nuevo, que tarden mucho tiempo en degradarse y que incluso liberen sustancias nocivas que provocan enfermedades, los convierte en un problema de salud pública y desequilibrio ecológico.
No obstante, lo mencionado con anterioridad, en Yucatán NO existe una regulación sobre la generación de residuos sólidos procedentes de fuentes de “un solo uso” como lo son las bolsas de plástico, sus derivados, envases desechables de unicel y popotes de plástico, convirtiéndose en una fuente de contaminación derivada de la actividad humana y hoy una grave contingencia ambiental.
Tan solo en nuestro país se generan más de 13 mil millones de recipientes de unicel al año. Dicha contingencia supera el ámbito estatal y nacional, siendo considerado ya un problema a nivel mundial en los ecosistemas costeros que comprenden cuerpos de agua, como playas de dunas costeras, pantanos, cenotes, manglares, entre otros.
En Yucatán se generan diariamente más de 1,500 toneladas de basura de las cuales poco más de 800 se dispone en rellenos sanitarios en Mérida y el resto entre los 105 municipios, en muchos de los cuales se disponen en tiraderos a cielo abierto.
Según la Encuesta del año 2015 del INEGI, el 70% de las viviendas particulares entregaban sus residuos sólidos a los servicios públicos de recolección; el 23% aproximadamente queman los residuos; el 5% los tiran en basureros públicos o los colocan en depósitos; y casi el 2% los entierran o los tiran en cualquier otro lugar.
A ello, hay que añadirle que los desechos de un solo uso son altamente contaminantes y están dañando las diferentes Áreas Naturales Protegidas del Estado, ya sean superficies de competencia federal, estatal o municipal afectando a más del 8% de la superficie total del estado.
En el País, ya hay entidades federativas que cuentan con leyes que prohíben alguno de estos materiales, como son: Quintana Roo, Veracruz, Querétaro, Aguascalientes, Nuevo León, Durango, Ciudad de México, cabe resaltar que estas leyes votadas de manera unánime.
Lo que es importante resaltar es que Yucatán, que como siempre está a la vanguardia, con la aprobación del presente dictamen seriamos junto con Hidalgo y Baja California Sur los únicos estados del país en prohibir el uso de popotes, bolsas plásticas y contenedores de unicel.
Es por eso que el dictamen que está a su consideración busca reformar la Ley para la Gestión Integral de los Residuos en el estado de Yucatán. Generando una prohibición gradual del uso de plásticos y sus derivados y poliestireno en cualquier unidad económica que proporcione a los consumidores cualquier tipo de bolsa para el acarreo de productos, así como de popotes y envases desechables de un sólo uso, contaminantes del medio ambiente.
Toda ley siempre busca el beneficio de la ciudadanía, y esta no es la excepción ya que evitar la utilización de materiales como el unicel o el plástico en desechables de un solo uso, es un gran paso para la mitigación del daño al medio ambiente, que estamos dando de la mano con la ciudadanía, asociaciones civiles y cámaras empresariales, con las que tuvimos arduas jornadas de trabajo, no puedo dejar pasar el mencionar de manera particular a la CANACINTRA y a la CANIRAC; empresarios y restauranteros que en todo momento buscaron colaborar y enriquecer este dictamen por su compromiso con toda la ciudadanía de nuestro estado.
Además es muy fácil que con esta actualización al marco normativo y con buenos hábitos como ciudadanos terminemos con esto, utilizando a su vez materiales biodegradables para estas mismas actividades.
Aplaudo la participación siempre activa del Gobernador del estado Mauricio Vila Dosal en los temas de Medio Ambiente. No solo por presentar esta iniciativa sino también en su compromiso permanente realizando acciones y campañas de gobierno encaminadas al mejoramiento de nuestro entorno.
Agradezco también la participación de mis compañeros integrantes de la Comisión de Medio Ambiente, quienes mediante sus comentarios y aportaciones enriquecieron este dictamen que se pone a su consideración.
Esta iniciativa por sus alcances y repercusiones, es sin duda la modificación a una ley ambiental más importante que se ha realizado en el estado. Y es por todo lo anterior, que les pido a todas mis compañeras y compañeros diputados su voto a favor del presente dictamen. Hagámoslo por las siguientes generaciones, hagámoslo por Yucatán.
ES CUANTO
