Discurso de la Diputada Janice Escobedo Salazar Pronunciado en Sesión Ordinaria del Congreso Yucatán del 15 de Octubre

He solicitado el uso de la voz para hablar acerca del día Internacional de la Mujer Rural que se conmemora el día de hoy en todo el mundo.

Es indiscutible que en los últimos años hemos vivido en todo el país una auténtica transformación en materia de equidad e igualdad de género en todos los ámbitos  de la vida democrática nacional, donde la mujer ha jugado un papel  fundamental.

Sin duda alguna, las mujeres en México son un activo primordial para toda acción pública, ya que su participación ha sido un factor determinante de crecimiento e inclusión social sustentado en la igualdad de género como la premisa clave para el empoderamiento femenino.

También tenemos que reconocer que las mujeres son fuente indispensable para el desarrollo económico por su innegable labor en prácticamente todos los ámbitos y sectores laborales, siendo uno de los más significativos y dignos el realizado en el medio  rural.

Ahora bien, el día de hoy 15 de octubre, se conmemora el día Internacional de la Mujer Rural; día establecido por la Organización de las Naciones Unidas desde el año 2008, el cual se instituye para reconocer la función y contribución decisiva de la mujer rural, incluida la mujer indígena, en la promoción del desarrollo agrícola y rural, la mejora de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza rural.

La historia nos lo demuestra, las mujeres rurales han desempeñado  un papel protagónico en las economías rurales a través de la agricultura y la ganadería, así como el desarrollo de actividades complementarias como la artesanía.

Además, tienen a su cargo sin remuneración  funciones esenciales en el cuidado de los niños, los ancianos y los enfermos.

No obstante, lo anterior aún persisten brechas de desigualdad en cuanto el acceso al crédito, los insumos agrícolas, la asistencia técnica y la capacitación.

Según estudios de la  FAO en América Latina un 46 por ciento de las mujeres rurales no tienen ingresos propios, las empleadas en la agricultura reciben en promedio un salario del 75 por ciento al de los hombres y el 54 por ciento de ellas están por debajo de la línea de pobreza.

En este sentido, como legisladores nos corresponde crear el marco normativo para garantizar y facilitar el empoderamiento de la mujer rural ya que es sinónimo de su  bienestar, el de sus familias y sus comunidades, ya que son por su naturaleza promotoras del desarrollo económico.

Por ello, debemos promover e incentivar políticas públicas que  respalden, protejan y fomenten la participación de las mujeres rurales en la construcción de nuestro marco normativo, así como en las estrategias, y acciones públicas que tengan un impacto en sus vidas, sobre todo las que garanticen una mejor seguridad alimentaria y nutricional.

Desde esta máxima tribuna, manifestamos que es imprescindible contemplar en  el plan estatal de desarrollo 2018-2024, políticas públicas con  perspectiva de género, que  abran oportunidades a las mujeres del campo, como sostén de su familia y guía de los hijos al quedarse con el  rol de padre y madre cuando sus parejas se ven obligados a migrar a las ciudades o al extranjero.

Compañeras y compañeros diputados

Es inaplazable legislar con perspectiva de género para garantizar a las mujeres políticas públicas que faciliten el acceso a la tierra, a los recursos naturales, a los recursos públicos para apoyar la producción, como son el crédito, asistencia técnica, la  tecnología y  la capacitación.

De este modo, todos juntos, avanzamos en la construcción de un estado incluyente donde todos tengan las mismas oportunidades, mujeres y hombres por igual, de campo o de ciudad.

Hoy al conmemorar a todas aquellas mujeres que tienen en el campo yucateco su medio de subsistencia, les reconocemos su gran esfuerzo, dedicación y entrega, tienen ustedes nuestra admiración y nuestro respeto.

Desde el Congreso, les hacemos saber que seguiremos trabajando a su lado, respaldando la Política Pública del Gobierno del Estado que  beneficie su incansable labor para hacer producir la tierra y crear con sus manos mágicas artesanías de gran valor cultural.

Les refrendamos nuestro compromiso, les decimos que vamos de la mano con toda clase de iniciativas que abonen a su pleno desarrollo, que seguiremos impulsando una Perspectiva de Género que rompa diferencias, y de manera especial, daremos nuestro aval a todas aquellas acciones públicas que resulten en el beneficio de su trabajo, ese trabajo que día con día realizan para darle a su familia el sustento y seguridad que todos merecemos.  Es cuánto.