Trabajemos juntas y juntos para construir un futuro en el que el lenguaje incluyente y no sexista sea la norma, no la excepción: Dafne López
Discurso de la Diputado Dafne López Osorio
Hoy me dirijo a esta honorable asamblea para abordar un tema de gran relevancia en la sociedad contemporánea: la necesidad de reformar nuestro marco normativo local para incorporar un lenguaje incluyente y no sexista como una tarea fundamental para promover la igualdad de género en el quehacer público.
El lenguaje es una poderosa herramienta que utilizamos para comunicarnos y dar forma a nuestra realidad. Transmite nuestra percepción del mundo y, en última instancia, influye en nuestras acciones y decisiones. Por lo tanto, es esencial la utilización de un lenguaje que refleje y promueva los valores de igualdad.
El lenguaje sexista ha sido una barrera para la plena inclusión de las mujeres en el quehacer público, de manera que impacta en los diferentes idiomas alrededor del mundo. A lo largo de la historia se ha normalizado el uso de términos masculinos para referirse a ambos géneros, lo que permite la prevalencia de estereotipos y ha invisibilizado la contribución de las mujeres en la sociedad.
Por ello, la adopción de un lenguaje incluyente y no sexista busca visibilizar las contribuciones de todas las personas independientemente de su sexo o género, por medio de recursos lingüísticos que permitan reconocer la diversidad de género y promover la igualdad.
Esta medida aporta diferentes beneficios a la dinámica social:
Promueve la igualdad de oportunidades entre las personas;
Garantiza la representación y respeto de las personas independientemente de su sexo o género;
Desafía los estereotipos de género y evita las asignaciones de roles discriminatorios en sociedad, y;
Alienta la participación activa de las mujeres en la política.
Es alentador ver cómo varios países y organizaciones han adoptado políticas de lenguaje inclusivo con resultados positivos. Así pues, como representantes de la ciudadanía yucateca, tenemos la responsabilidad de liderar el cambio y establecer el ejemplo en la promoción del lenguaje incluyente y no sexista. Esto implica la revisión y reforma de nuestras normativas locales para garantizar que reflejen nuestros valores de igualdad y diversidad.
En este sentido, el dictamen que hoy se pone a discusión de todas y todos nosotros representa un esfuerzo importante en materia de igualdad, pues en el descansan las aportaciones de cada una de las personas que integran la comisión dictaminadora.
Es importante reconocer que la transición hacia el lenguaje incluyente y no sexista puede enfrentar resistencia por parte de quienes se sienten cómodos con las estructuras lingüísticas tradicionales. Sin embargo, es nuestro deber liderar el cambio y garantizar que nuestros esfuerzos por la igualdad sean inquebrantables.
En conclusión, las reformas que acá se presentan son más que necesarias para avanzar hacia una sociedad más igualitaria. Al adoptar esta práctica, demostramos nuestro compromiso con los derechos de todas las personas, sin importar su género, y allanamos el camino para una sociedad más justa y equitativa.
Les invito a que respalden el dictamen en discusión y que trabajemos juntas y juntos para construir un futuro en el que el lenguaje incluyente y no sexista sea la norma, no la excepción. Hagamos la diferencia y construyamos un Yucatán más inclusivo para las generaciones futuras.
Es cuanto Presidente.
