Ciudad de México, mayo de 2024. Los sistemas de enfriamiento han experimentado una transformación notable en su función y enfoque, especialmente en entornos críticos. Ya no se limitan a combatir el calor estacional; ahora abordan una amplia gama de factores y demandas, gracias a su capacidad para operar de manera inteligente y automática.
En el mundo actual, donde la gestión eficiente de los centros de datos es esencial, estos sistemas han evolucionado para maximizar la eficiencia sin sacrificar la confiabilidad. Desde la precisión hasta el ahorro energético, la última tendencia se centra en optimizar el funcionamiento durante todo el año.
Los sistemas de enfriamiento actuales se dividen principalmente en dos categorías: los sistemas autocontenidos, que son portátiles y pueden ajustarse manualmente para enfriar áreas específicas, y los sistemas de precisión, como SmartRack®, que operan automáticamente al detectar y responder al calor.
Miguel Ángel Monterrosas, Director Técnico de Soporte para la línea Tripp Lite by Eaton, destaca que ahora comprendemos que el enfriamiento no se limita a la temporada de calor, sino que depende de una variedad de factores, como la ubicación geográfica y la demanda específica de enfriamiento de los equipos de TI.
Una tendencia destacada en esta evolución es el acoplamiento directo en los centros de datos, que maximiza la eficiencia energética al enfriar áreas específicas de manera precisa. Aunque puede implicar costos iniciales más altos, los sistemas de precisión ofrecen beneficios a largo plazo al calcular el ahorro energético potencial.
Operar a temperaturas ligeramente más altas, alrededor de 25 grados centígrados, se reconoce ahora como eficiente desde el punto de vista energético, sin comprometer la integridad de los equipos. Se trata de encontrar el equilibrio adecuado entre rendimiento y consumo.
Esta evolución en los sistemas de enfriamiento no solo se trata de combatir el calor estacional, sino de optimizar el rendimiento durante todo el año. Con sistemas más inteligentes y eficientes, las empresas están posicionándose para maximizar el rendimiento mientras reducen su huella ambiental. El futuro del enfriamiento de centros de datos es más inteligente, eficiente y sostenible que nunca.