México, EU y Canadá inician 6ª Ronda de renegociación del TLCAN
Se esperan avances concretos en los temas más ásperos del comercio trilateral, como reglas de origen y mecanismos de resolución de controversias
Se esperan avances concretos en los temas más ásperos del comercio trilateral, como reglas de origen y mecanismos de resolución de controversias
Los equipos negociadores de México, Canadá y Estados Unidos comenzaron aquí la sexta ronda de negociación para modernizar y actualizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
La reunión se extenderá hasta el lunes 29 en que los principales negociadores, Chrystia Freeland, Ildefonso Guajardo y Robert Lighthizer, darán un anuncio conjunto, en el que se esperan avances concretos en los temas más ásperos del comercio trilateral, como reglas de origen y mecanismos de resolución de controversias.
En la ronda intermedia de hace un mes en Washington los equipos avanzaron en temas como comercio digital, telecomunicaciones, facilitación comercial, empresas del Estado y anticorrupción.
En esta penúltima ronda se instalará una treintena de grupos de trabajo para seguir cerrando capítulos y presentar contrapropuestas a lo avanzado por el equipo estadunidense.
A diferencia de las rondas anteriores, donde Canadá y México mantuvieron una posición firme en contra de las propuestas “inaceptables” de Estados Unidos, la víspera de esta ronda en Montreal se perfiló una mayor apertura a fin de “salvar” un tratado de 24 años y que significa un comercio trilateral que alcanza el billón de dólares.
Ante la propuesta estadunidense de aumentar el contenido de este país en la fabricación de autos en la región, los negociadores canadienses proponen reevaluar el cálculo del contenido nacional y regional tomando en cuenta factores como el sistema de software, que actualmente no está considerado.
En respuesta a la cláusula de extinción (“sunset clause”) para terminar el TLCAN cada cinco años, propuesta por los estadunidenses, México propone no terminarlo sino negociarlo y modernizarlo cada quinquenio.
La sexta ronda del TLCAN se realiza en el lujoso Hotel Bonaventure, cerca del puerto del viejo Montreal.
A pesar de que los equipos negociadores señalan que “se sigue avanzando” para modernizar el acuerdo, la ronda de esta semana es una prueba para canadienses y mexicanos sobre si los estadunidenses en verdad quieren negociar o seguirán con propuestas proteccionistas denominadas “píldoras venenosas”.
En el ambiente frío de Montreal, -11 grados centígrados con alerta de lluvia congelada, que enmarca esta ronda, predomina la amenaza del presidente estadunidense Donald Trump de iniciar el proceso de salida de su país del acuerdo trilateral.
Además, las negociaciones en la ciudad francófona están empañadas por la imposición de aranceles a páneles solares y lavadoras, que afectan a México, y por las cuotas compensatorias contra las importaciones canadienses de maderas, papel y aviones C Series.
En el arranque de esta ronda el sindicato Unifor, uno de los más grandes de Canadá que representa a 310 mil trabajadores, realiza una manifestación en la Plaza Dorchester de Montreal para demandar “un mejor TLC”, con la consigna de que “el comercio no funciona si no beneficia a todos”.