Personal de Profepa acudió al domicilio, en el ejido Las Perlas, de quien señalaron vecinos como el presunto responsable de la caza del felino, especie en peligro de extinción
En respuesta a denuncias ciudadanas hechas a través de las redes sociales, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) localizó el cuerpo de un jaguar, presuntamente cazado por pobladores del ejido Las Perlas, en el municipio de Jesús Carranza, Veracruz, por lo que anunció que presentará una denuncia penal contra quien resulte responsable por delitos contra la biodiversidad.
Inspectores federales acudieron al poblado para iniciar una investigación de oficio sobre la muerte del ejemplar protegido por la Norma Oficial Mexicana 059 en la categoría de especie «En Peligro de Extinción».
El personal de la Profepa en compañía del Comité de Vigilancia Participativa, así como de la regidora del municipio de Jesús Carranza, acudieron al domicilio de quien señalaron vecinos como el presunto responsable de la caza del ejemplar.
El cuerpo del jaguar, que se encontraba dentro de la vivienda, era una hembra joven de 121 centímetros de longitud, con cuatro centímetros de colmillo, 70 kilogramos de peso, con aproximadamente seis días de muerto y olor a descomposición.
El jaguar presentaba una herida de arma de fuego en un costado del ojo izquierdo, lo que posiblemente le causó la muerte.
Ante esta situación, se procedió a levantar un acta administrativa, con lo que se dictó el aseguramiento precautorio del ejemplar, que fue trasladado a una clínica veterinaria en donde se practicará la necropsia y el peritaje administrativo correspondiente.
El jaguar será trasladado a la ciudad de Ixtacxoquitlan y depositado en la Unidad de Manejo Ambiental “El Pochote”, en donde se conservará para la presentación de la denuncia penal.
La pena por cazar a un ejemplar de vida silvestre protegida como el jaguar es de uno a nueve años de prisión y multa de 50 a 50 mil Unidades de Medida y Actualización.
