Discurso Dip. Paulina Viana Gómez: En materia de la Ley de Derechos Culturales para el Estado y Municipios de Yucatán.
Hablar de cultura es hablar del pasado, presente y futuro de una sociedad incluso, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación y la Cultura, UNESCO, refiere que la cultura es un elemento crucial en la comprensión de la humanidad.
Si bien la definición, nos dice que la cultura es ese conjunto de conocimientos, ideas, tradiciones y costumbres que caracterizan a un pueblo… LAS NUEVAS GENERACIONES estamos viviendo, aprendiendo y construyendo nuevas formas de visibilizar y abordar temas como el que hoy nos ocupa… LA CULTURA.
Así está plasmado en el marco internacional, así lo establece la Declaración Universal de los Derechos Humanos y la Declaración Americana de Derechos y Deberes del Hombre, así como diversos Pactos de Naciones Unidas que reconocen el derecho a la cultura como un derecho fundamental. En nuestros días la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible identifica a la cultura como impulsora de ámbitos y contextos evolutivos que se gestan en un ambiente de paz y progreso económico.
El concepto de CULTURA en México ha evolucionado y ha tomado diferentes matices en las últimas décadas, de igual forma, ha sido dirigido hacia diferentes ámbitos, tanto el público como el privado y el social; en los cuales ha demostrado un amplio potencial creativo y económico fundamental; y que le han valido el reconocimiento como derecho consagrado en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, específicamente, en su artículo 4° que garantiza el ejercicio de los derechos culturales y la difusión de la cultura.
Hablar de Yucatán es hablar de riqueza cultural, de su biodiversidad, de la obra de sus artistas y creadores, de sus tradiciones originarias; es hablar de sus expresiones creativas y de su infraestructura como expresión de su cultura. Hablar de Yucatán es hablar del legado de la cultura maya que incluso hoy, en pleno siglo 21 permanece viva ya sea en el ámbito de la arquitectura, las bellas artes, la literatura, la medicina,; en el arte popular, la literatura, y gastronomía, entre otros.
La ley que tenemos actualmente vigente en materia cultural en el Estado de Yucatán, denominada: “Ley de Preservación y Promoción de la Cultura de Yucatán”, fue publicada en el Diario Oficial del Gobierno del Estado de Yucatán, desde el 08 de agosto de 2005, -hace 15 años-.
Dicho ordenamiento funcionó en su momento, sin embargo, la CULTURA es una expresión viva que cambia permanentemente, NUESTRA LEY DEL 2005 ha quedado obsoleta frente al avance y progreso normativo registrado en el ámbito mundial y nacional, por lo que, es urgente renovar la legislación en esta materia.
No omito en comentar que el 19 de junio de 2017, entró en vigor la Ley General de Cultura y Derechos Culturales, para avanzar de acuerdo con el mandato constitucional y tratados y convenios internacionales en materia de derechos culturales.
Con este objetivo se ha desarrollado la presente iniciativa que expide la Ley de Derechos Culturales para el Estado y Municipios de Yucatán para responder a los nuevos desafíos sociales, culturales, económicos, ambientales, tecnológicos, y de convivencia pacífica, que enfrenta nuestro estado, y el cual se encuentra en concordancia con el Plan Estatal de Desarrollo 2018-2024, en materia de cultura y arte.
La iniciativa que hoy se propone no compromete únicamente al sector cultural, también coloca a la cultura en el contexto del desarrollo económico y social integral del Estado, bajo el marco de relaciones interinstitucionales que facilitan la suma de recursos y voluntades para acceder a un Yucatán más justo, próspero y participativo.
La iniciativa denominada Ley de Derechos Culturales para el Estado y Municipios de Yucatán contiene ciento cincuenta y tres artículos divididos en diez títulos, y ocho artículos transitorios.
En síntesis, da vida a una visión de los derechos culturales y de la política cultural en el Estado de Yucatán y al reconocimiento de este sector en toda su dimensión social, pública y privada, dando especial atención a las personas con discapacidad y en condiciones de vulnerabilidad, a fin de favorecer la inclusión social, señalando los mecanismos para su garantía.
Se reconoce la descentralización cultural y se alienta el desarrollo cultural y artístico en los municipios, así como en las comunidades menos favorecidas, así como la formación de profesionales de la cultura.
De igual forma, se moderniza, toda vez que se contempla el uso de la Tecnologías de la Información y comunicación como un mecanismo para el ejercicio de los derechos culturales y su aplicación como medio de expresión al implementarse el Sistema Estatal de Información Cultural para recopilar toda la información inherente a este sector en la entidad.
También se instituye el Consejo Estatal para la Cultura y las Artes como órgano de consulta respecto de las políticas culturales y artísticas en la entidad que fungen como instrumento de vinculación y coordinación. Se contempla que tanto autoridades estatales como municipales, en el ámbito de su competencia, definan estrategias para la creación de mecenazgos y alternativas similares orientados al apoyo de creadores.
Se sientan las bases para la protección, restauración y conservación del patrimonio cultural del Estado de Yucatán tangible e intangible; y se faculta a la Secretaría y a los ayuntamientos, en sus respectivos ámbitos de competencia, para sancionar de forma administrativa las violaciones al patrimonio cultural del estado.
Se incluye la promoción y reglamentación de los espacios culturales independientes y se reconoce la vital importancia del fomento a la lectura estableciendo programas, medidas y acciones prioritarias destinadas a su fomento y promoción.
Se reconocen y regulan los Museos del Estado de Yucatán y se contemplan los mecanismos para la creación, fomento, protección e incentivación de las industrias culturales y creativas en el Estado.
Con esta propuestas se fortalecen el Programa Estatal de Cultura y Artes, con el establecimiento de las acciones prioritarias que obligatoriamente debe incluir; así como también el Fondo Estatal para la Cultura y las Artes, a fin de garantizar la inclusión de grupos y personas en situación de vulnerabilidad y la distribución equitativa entre hombres y mujeres de los beneficios que deriven del mismo.
Por lo anteriormente expuesto, la Ley de Derechos Culturales para el Estado y Municipios de Yucatán, es un instrumento legislativo de vanguardia, moderno y acorde a las necesidades del Yucatán del siglo 21.
En este sentido, agradezco las aportaciones de la Lic. Erika Millet Corona titular de la Secretaría de la Cultura y las Artes del Estado, del Doctor Irving Berlín Villafaña, director de Cultura del Ayuntamiento de Mérida. También agradezco de manera muy especial, a todas aquellas personas, asociaciones y colectivos que participaron con sus valiosas opiniones y propuestas, a quienes, sin duda alguna, nos volveremos a encontrar para seguir trabajando en esta materia.
Compañeros diputados, amigos, la CULTURA es una expresión viva, dinámica y plural, que se adecúa y enriquece permanentemente sobre la marcha, en el día a día, no solamente desde la visión unilateral fraguada detrás de un escritorio.
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