La nula oposición al gobierno de Andrés

Luego de haber logrado el triunfo con una mayoría de 30 millones de mexicanos, el gobierno de Andrés no ha cumplido con las expectativas de aquellos que lo llevaron al poder. Sin embargo, mantiene un margen de aprobación que tiene su fundamento en los fracasos que significaron los gobiernos panistas y la vuelta a la corrupción del último sexenio priísta a cargo de Peña Nieto. Es un hecho el acuerdo de no atacar al gobierno de éste último, por parte de Andrés. Pues es notorio que todo discurso del ahora presidente se basa en el resentimiento ante el gobierno de Calderón y de Fox.

Yo siempre he sostenido que no existe tal oposición entre partidos. Si hay algo hay es apenas una lucha por el saqueo de los recursos con que cuenta México, y que se va acumulando mediante la recaudación de impuestos, las ganancias del petróleo, así como las remesas de los connacionales que viven en el extranjero, particularmente de los millones de mexicanos que se encuentran en los Estados Unidos de América. El gobierno de Andrés no es más que la cumbre del Salinato que rige nuestro país desde 1988 mediante un Teatro de la Democracia, que sostiene en el poder a las mismas familias de empresarios. Usted puede seguir las carreras de Porfirio Muñoz Ledo, del mismo Andrés, Ebrard, y reconocer hasta donde se extiende su influencia política. Una ruptura que apenas es una lucha presupuestal, jamás de ideales, jamás respecto a que el pueblo mexicano se vea beneficiado.

Si desde la reforma electoral que promovió Carlos Salinas de Gortari, los ideales partidistas dejaron de serlo, puede uno seguir mirando saltar de partido a partido a las figuras políticas a nivel municipal, estatal, y a nivel nacional. Tal como decía Groucho Marx, los políticos mexicanos dicen: “Estos son mis ideales, si no te gustan, tengo estos otros”. Así podemos ver a Andrés, a Porfirio Muñoz Ledo, a Ricardo Monreal, por decir apenas a algunos brincar del Pri, al Prd, al PT y de ahí hasta Morena. “Vaya con sus ideologías”.

Todo se trata de llegar al poder, apoyar a los amigos, familia, compadres, a los que me apoyaron, a enriquecerse y poder hacer alianzas de negocios con las mismas familias de empresarios mexicanos millonarios, o con los extranjeros que quieran invertir con ellos. Así, los grandes proyectos de las administraciones gubernamentales serán repartir leyes, contratos, convenios, licitaciones con quienes estén dispuestos a poner su dinero en los planes que el gobierno en turno tenga, beneficiando a ambos lados, manteniendo en la pobreza a los trabajadores, empleados, campesinos, obreros, de nuestro México.

Dado que desde los partidos políticos no hay oposición, surgen las posibilidades de las asociaciones netamente ciudadanas. Y de aquellas que se disfrazan de ciudadanas. Una de ellas hoy se autonombra FRENAA (Frente Nacional Anti Amlo). Pero, ¿por qué FRENAA no es la opción para detener a Andrés y su corte?

Porque su planteamiento contra el aborto, contra la diversidad sexual, así como sus planteamientos de que los pobres son pobres porque quieren, o que la ignorancia es inherente a la pobreza, o lo que es peor: que ningún gobierno es responsable de los pobres e México, los ubica en el mismo plano que el personaje al que se oponen.

Cómo decía Flores Magón, sería quitar a un tirano para poner a otro.

La única Oposición posible tiene que ser ciudadana y claro. Pero tiene que ser una oposición que esté convencida de que: A los gobiernos se les exige y jamás se les aplaude.

Que el gobierno tiene que servir al pueblo. Que el gobierno es responsable de la educación, seguridad, salud y empleo. Y si estos cuatro pilares no son la prioridad no se tendrá jamás un buen gobierno. Un buen gobierno debe aspirar a generar las mismas oportunidades de crecimiento y mejora en la calidad de vida de todos sus ciudadanos, sin perjudicar —si así lo desean— las riquezas de quienes ya la ostentan. Pero dicha mejora en la calidad de vida debe ser generada desde las intenciones del gobierno.

Una Oposición Ciudadana que esté convencida de que el gobierno tiene que ser tolerante con todas las religiones y las diversidades de las sociedades humanas que confluyen en el territorio mexicano. Y jamás favorecer una sola sociedad. Reconocer la multicultura, la enorme tradición de los pueblos originarios, así como del pueblo mestizo que conforma nuestra nación.

Una Oposición Ciudadana convencida de que el gobierno tiene que respetar los derechos humanos y reconocer a los individuos como ciudadanos y núcleos de la sociedad y no la familia, ni al matrimonio, sino únicamente como figuras civiles. Mantener la Separación Iglesia-Estado, sin atentar contra la libertad de cultos y creencias, manteniendo el orden y el respeto con una Legislación que se respete. Todo basado en el impulso de la educación, la ciencia, la cultura, y el trabajo.

Esa será la única Oposición en la que creo.

Lo demás, lo de FRENAA, por ejemplo, es apenas quitar un tirano y poner otro.

Los de FRENAA insisten en que Andrés es Socialista, en que es Comunista, viven y predican con ese error, y ponen de ejemplo a la URSS a Venezuela, a Cuba, a China; y no caen en su error de que ninguno de estos gobiernos es Socialista ni Comunista, ni aunque lo hayan escrito en sus políticas ni en las siglas con que nombraron a su país.

El socialismo no es destruir al rico y enriquecer al gobernante, y esto es lo que han hecho todos esos países a lo largo de la historia desde la Unión Soviética, pasando por China, Cuba, y hasta en Venezuela. Arrancarle el poder económico a un grupo, y ostentarlo desde el gobierno, manteniendo al ciudadano de aquellos países en la derrota de jamás poder aspirar a lograr lo que sus capacidades les impela a lograr.

Ante este ejemplo, es claro que Andrés no es socialista, es claro que Andrés se comporta ya como un tirano, como lo fueron han sido y son los gobernantes de los países que he mencionado. Intentando concentrar todo el poder en su figura, y en esta anomalía mental, permitiendo que una gran parte de sus colaboradores se sirvan del poder con la cuchara grande, como se ha visto que lo hacen los Ackerman-Sandoval.

Hay que leer las teorías socialistas hay que leer sobre Comunismo, sobre Anarquismo, y desde sus postulados entender sus conceptos, y cómo jamás han sido tomados en cuenta al llegar al poder. Repasar la historia de dichos países que se presintieron Comunistas, Socialistas, Nacionalsocialistas, y lo que le han hecho a sus ciudadanos.

El mundo no ha visto un verdadero comunismo más allá del que surgiera en las primeras comunidades cristianas, allá entre los años 34 y 40 después de Cristo. Luego se han visto algunos ejercicios más en las comunidades fundadas por Vasco de Quiroga en el centro de México, o durante lo que se conoció como la Comuna de París, pero jamás pudo ser desarrollada en forma tal que alguna parte de la sociedad pudiera estar orgulloso de dichos modelos, a no ser los tiranos-gobernantes.

Por eso es que lo de FRENAA apenas se trata de otro tipo de resentimiento, de privilegiar el encono, la división y el enfrentamiento entre unos y otros. Lo de FRENAA es el adverso perfecto de Andrés con sus mismos vicios, errores y soberbia. Sería quitar a un tirano y poner a otro.