LA BATALLA ENTRE SOÑADORES Y NINIS

Hoy que el Congreso de la Unión de esta republica mexicana, se suben a la plataforma electorera para hablar sobre los «soñadores», (qué irresponsable es ir siempre hablando en anglicismos), y traen la preocupación mediática de ¿Qué vamos a hacer cuando envíen a México a todos los migrantes?, esos que quisieron vivir ‘el sueño americano’, de ganar buen dinero, y que huyeron de un país sumido en la miseria (por los mismos personajes del Congreso de la Unión, y los presidentes Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto), y también sumidos en la violencia. Y que plantean como su principal punto de discusión que la UNAM o el IPN los matricule.

A esos senadores y diputados, pendientes del teleprompter, pendientes de dar la nota, de aparecer con sus vestidos caros, sus trajes importados, frente a las cámaras de las televisoras, o de pérdida en los periódicos o la radio, se les olvida que muchos estudiantes egresados de las preparatorias, presentaron examen de admisión en la UNAM y en el IPN y no fueron admitidos. Solo para hacerles memoria se habla de más de 170 mil aspirantes que no lo lograron; solamente a la UNAM, una nota señala que los no aceptados en el proceso de admisión en julio de 2016 (para el curso 2016-2017) asciende al 91.34%, que intentaron ingresar a alguno de los 117 programas de licenciatura que se ofertan en esa casa de estudios y no lo consiguieron.

Y esas son las cifras cada año. A las que habrían de sumarse las de todas las universidades públicas, las dizque «autónomas». Y luego sumar el número de «ninis», otra palabreja sacada de la vergonzosa prensa nacional, y usada para calificar a los jóvenes mexicanos que por culpa de los mismos Senadores y Diputados no pueden ni continuar sus estudios universitarios, ni conseguir un empleo digno; que ha ido en aumento en México en los últimos años, como señala el último reporte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y que asciende a 7.5 millones de jóvenes mexicanos. Pero estos 7.5 millones de jóvenes pues hoy no son preocupación de los senadores y diputados (escupo en la tumba de sus padres).

Ya espero la Batalla Campal entre los «soñadores» y los «ninis» que ocurrirá de un momento a otro, cuando los vagos Senadores y Diputados de México, aprueben que los soñadores serán matriculados en las universidades públicas de México, por encima de los derechos de todos esos jóvenes que durante años no consiguen ni ingresar a la universidad ni poder hacerse de un empleo que les permita el adecuado desarrollo de su vida. Recuerde usted, querido lector, que ahora incluso han inventado algo que llaman «el posdoctorado», que es un tipo de beca que ofertan los proyectos de investigación, para no contratarte y tener que pagarte lo que por tus estudios de doctorado deberías de percibir. Entonces te piden que hagas uno o dos doctorados, o te pases el resto de tu vida adulta siendo posdoctorado. Pues claro, todo lo que hagas después del doctorado, es un posdoctorado, no hay que ser genio para ello.

¡Qué vergonzosas discusiones en el Congreso de la Unión! Su nula preocupación por el pueblo de México, es alarmante.