Instituto de Biotecnología de la UNAM transfiere tecnología a tres jóvenes empresarios que egresaron del mismo
Los biotecnólogos crearon método del que se obtiene capsaicina a usarse en plaguicidas orgánicos o como repelente en pinturas
Los biotecnólogos crearon método del que se obtiene capsaicina a usarse en plaguicidas orgánicos o como repelente en pinturas
Por primera vez, el Instituto de Biotecnología (IBt) de la UNAM firmó un convenio de licenciamiento de tecnología a una empresa creada por estudiantes de la propia institución. De esta manera, la compañía tiene legalmente los derechos de explotación de la patente que está protegida por la máxima casa de estudios de México, a la que está comprometida a un pago de regalías por ventas de los productos emanados por esa tecnología.
En 2016, los egresados del IBt Alejandro Torres Gavilán, Esmeralda Ramírez y Omar Piña crearon la empresa Applied Biotec, la cual desarrolló un método biotecnológico que genera la molécula que propician el picante del chile, capsaicina, sin que se tenga que sembrar una semilla.
Uno de los usos para lo que fue desarrollada esta tecnología es como materia prima para el desarrollo de bioplaguicidas contra insectos, roedores y mamíferos. De igual manera puede emplearse como repelente en la formulación de pinturas marinas anti-vegetativas que evitan la adherencia de bacterias, microalgas o moluscos en puertos, barcos y redes de acuicultura.
El doctor en ciencias bioquímicas Torres Gavilán explica en entrevista que mediante la tecnología desarrollada se produce capsaicina de manera más sustentable, es decir, sin considerar extensiones de tierra, cantidades de agua y pesticidas, sin cosecha y secado, como tampoco los procesos de extracción y concentrado de la materia.
“Un litro de nuestro producto puede sustituir 500 kilos de chile jalapeño, y lo comercializamos como materia prima para la producción de bioiplaguicidas o repelentes biodegradables. Actualmente hay infraestructura montada y trabajamos ya con clientes en Holanda y Portugal”, revela el científico mexicano quien obtuvo el Premio Nacional de Tecnología e Innovación 2018 a en la categoría Prototipos.
Cabe destacar que en 2017, Applied Biotec es finalista en el certamen Clean Technology Channel, una incubadora para proyectos que promueven la innovación y sustentabilidad tecnológica. Al año siguiente fue beneficiada por un programa de aceleración de empresas en Einhoven, Holanda, evento patrocinado por la firma Philips.
En el evento protocolario Octavio Tonatiuh Ramírez Reivich, director del IBt, reconoció que nuestro país enfrenta la enorme dificultad de transformar el conocimiento y regresarlo a la sociedad en forma de innovación, misma que reside en empresas (micros, medianas y grandes) y en la motivación de los emprendedores. En ello radica la creación de una empresa como Applied Biotec.
“El doctor Torres Gavilán pretendía transformar el conocimiento que reside en las bitácoras de los laboratorios a empresas que generen empleos y bienestar. Y eso es lo que requiere nuestro país para impulsar la economía del conocimiento”.
(Agencia ID/Noticyti)