Hillary Clinton ganó el último debate frente a Donald Trump
Los analistas Gabriel Guerra y Ana María Salazar; y el director de Consulta Mitofsky, Roy Campos; analizan el tercer debate entre Hillary Clinton y Donald Trump
Los analistas Gabriel Guerra y Ana María Salazar; y el director de Consulta Mitofsky, Roy Campos; analizan el tercer debate entre Hillary Clinton y Donald Trump
CIUDAD DE MÉXICO, México, oct. 20, 2016.- Los analistas Gabriel Guerra y Ana María Salazar; y el director de Consulta Mitofsky, Roy Campos; analizan el tercer debate entre Hillary Clinton y Donald Trump en Despierta con Loret.
Aunque Hillary Clinton ganó con sus propuestas, eso puede no traducirse en votos duros el día de la elección y, en cambio, Donald Trump, a lo mejor perdió algunos votos de las mujeres, a lo mejor perdió algunos votos de políticos tradicionales del Partido Republicano, pero mantiene su voto duro, afirmó Ana María Salazar.
Gabriel Guerra afirmó que el debate lo ganó el moderador y la cadena FOX News, que tenía la imagen de ser completamente republicana; también consideró que fue el mejor debate.
En una metáfora futbolera, Roy Campos considera que Clinton siente que va goleando y sale a pasear el balón. Trump perdió, afirmó el fundador de Consulta Mitofsky, porque no logró dar un solo golpe.
La ventaja de Hillary Clinton, además, puede cambiar si sucede una catástrofe de seguridad nacional. «Escándalos personales ya no cambian los resultados, pero un atentado puede hacerlo», estimó Ana María Salazar.
De acuerdo con Roy Campos, «Trump sueña que haya un voto oculto en los nueve estados que pueden mover la balanza de la elección. Las probabilidades están 7 a 1».
Para Gabriel Guerra, el gran riesgo es que la pasión y la furia de los partidarios de Trump se traduzca en altísima participación de sus simpatizantes. Además, hay gente a la que le da vergüenza decir que está de acuerdo con el republicano, pero a la hora de votar pueden decantarse por él. «Y en nueve estados clave el margen no es tan amplio.»
Por eso, abundó Ana María Salazar, Clinton requiere ganar por 10 puntos el voto popular.
Por lo pronto, mercados y políticos están nerviosos porque la negativa de Trump a aceptar los resultados de la elección pone en jaque la legitimidad entera del sistema electoral de Estados Unidos, un sistema «tan diverso y frágil, que puede romperse si no tiene la confianza y el voto de confianza de los candidatos», recordó Gabriel Guerra.
Para Ana María Salazar, hasta en eso le faltó experiencia a Donald Trump, porque pudo poner como ejemplo la reacción de Al Gore, candidato demócrata, cuando cuestionó las elecciones en la Corte.
De acuerdo con Roy Campos, hasta en rechazar el resultado de las elecciones Trump le habla a 51% de los votantes que creen que puede haber fraude.
Y aunque para Ana María Salazar todo va a depender de con qué porcentaje gane Hillary Clinton, para Gabriel Guerra no será suficiente, porque en canales locales de Estados Unidos hay gente hablando de rebelión armada, revolución y gente que dice que puede deshacerse de Clinton porque tiene armas. «Porque Trump le sigue a hablando a esos individuos, sigue encendiendo el odio.»
Trump, abundó Guerra Castellanos, no tiene nada que perder y el 9 de noviembre dirá que hay fraude. «Trump capturó una parte del electorado republicano y ya no van por su partido, el riesgo es que se parta el partido y surja una nueva ala, con lo que ya tiene a los próximos candidatos: sus hijos.»
De cualquier manera, dijo Ana María Salazar, «México debe empezar a organizarse».
Gane quien gane en la elección presidencial en Estados Unidos, la relación con México va a cambiar diametralmente, afirmó Gabriel Guerra Castellanos.
Guerra recomendó que el gobierno de México tenga un «plan B», para los próximos años porque «será durísima la relación de México con Hillary Clinton». Recordó que en 1992, cuando comenzó a negociarse el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el gobierno mexicano eligió apostar por la reelección de George Bush padre, «y hay un agravio que no se ha resuelto con los Clinton».
La internacionalista Ana María Salazar consideró que el desdén que se vio desde el equipo de Hillary Clinton a la invitación del gobierno mexicano se reflejará en la relación cotidiana. «No le van a hacer ningún favor al presidente; no le van a tomar la llamada. Serán educados y saludarán, pero no le tomarán la llamada.»
Roy Campos, fundador de Consulta Mitofsky, anticipó que será un periodo de muchas críticas por derechos humanos, por derechos laborales, por tráfico de personas. Además, recomendó que México «debería estar preparando una comisión porque viene una renegociación del TLC. Tenemos que ver la advertencia de que los dos no nos quieren».
Guerra coincidió en que lo único que cambia es el tono. «Clinton ya advirtió que es necesario revisar el TLC y lamentablemente los funcionarios lo han aceptado después de la visita de Trump. Pero un tratado de comercio no se revisa en partes, se abre completamente.»
Además de la revisión del TLC, Ana María Salazar asegura que no habrá TPP en los siguientes tres años. «El TPP va en ruta al hospital», redondeó Gabriel Guerra.
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