Hablemos de menstruación. Un tema que recibe etiquetas como algo sucio, como algo malo: Vida Gómez Herrera
Discurso Dip. Vida Gómez Herrera: SE PRESENTA INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO MENSTRUACIÓN DIGNA
Discurso Dip. Vida Gómez Herrera: SE PRESENTA INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO MENSTRUACIÓN DIGNA
Con su permiso presidenta, a los integrantes de la mesa directiva, medios de comunicación y público que nos acompaña de manera presencial o a través de los medios digitales, a la Cónsul Bárbara Nancy González, bienvenida y sus acompañantes también.
Hablemos de menstruación. Un tema que recibe etiquetas como algo sucio, como algo malo. Hablemos de este tema fisiológico y natural que aún sigue siendo un tabú en muchas comunidades y familias yucatecas, y que su estigmatización aún sigue generando una marcada brecha de desigualdad de género desde las infancias. En nuestro Estado habitan cerca de 1 millón 180 mil mujeres, lo que representa el 50.9% de la población, según datos del INEGI. Y según cifras del CONEVAL, el 41.2% de estas mujeres yucatecas, viven en situación de pobreza. Mientras que solo él 40.8% de los hombres sufren esta condición. Hay una marcada brecha de género en la pobreza yucateca, en la que las mujeres nos llevamos la peor parte. Sabemos que esta brecha económica es multifactorial; sin embargo, el acceso a la educación es uno de los principales factores. En Yucatán el analfabetismo también tiene brecha de género. Según el último censo del INEGI, de las 105 mil personas mayores de 15 años que son analfabetas, el 58.4% son mujeres y solo el 41.6% son hombres. 16.8 puntos porcentuales de diferencia en donde también las mujeres nos llevamos la peor parte. Según el manual sobre salud e higiene menstrual publicado por la UNICEF, (que es el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia) durante la menstruación, diferentes fuentes y estudios confirman que es un hábito común que las niñas se queden en casa durante al menos algunos días. Las principales limitantes y preocupaciones que enfrentan las estudiantes y maestras durante la menstruación en relación con el ámbito escolar son: · Falta de materiales de protección sanitaria, lo que genera vergüenza y estrés debido a fugas, olores y burlas. · Menos concentración y participación, lo que incluye no ponerse de pie para responder preguntas. · Falta de instalaciones privadas y suministro de agua para lavar y secar ropa, paños, cambiar materiales desechables de higiene menstrual o lavarse las manos. · Miedo a usar los baños o letrinas, en caso de que otros descubran sangre menstrual o por falta de privacidad. · El olor corporal o el olor de los materiales sanitarios usados que deben llevarse a casa para su eliminación, causando molestias, estrés o incomodidad mientras están en la escuela. · Falta de conocimiento por parte de las niñas, así como de materiales e insumos de apoyo para que las y los maestros eduquen sobre este tema, lo que genere incertidumbre y desconfianza. · Exclusión de los deportes: por molestias, preocupación por fugas o por restricciones culturales.” De igual manera, la UNICEF señala en el citado manual, que es habitual que en México las mujeres dejen de asistir a clases al encontrarse en período menstruante. En ese contexto, podemos advertir que factores meramente biológicos han llegado a afectar a mujeres y niñas en el ámbito educativo, el caso del ausentismo escolar y del posterior analfabetismo es un claro ejemplo. Menstruar no es opcional. Si hacemos cuentas, el período menstrual puede durar de 4 a 7 días y ocurrir en promedio una vez al mes, lo que en caso de ausentismo podría sumar un total de 48 a 84 días al año, situación que coloca a las personas menstruantes en un estado de desigualdad frente a los hombres. Así mismo el hecho de tener que presentarse a la escuela sintiéndose vulneradas por la falta de condiciones, evidentemente afecta de manera directa en el desempeño y aprovechamiento educativo. No tener acceso a toallas sanitarias, tampones, copas menstruales y demás productos de higiene, así como a información adecuada y a atención médica especializada, sumado al estigma social sobre la menstruación, aumenta las probabilidades de ausentismo y deserción escolar, así como de infecciones y precarización económica, por lo tanto, priva a las niñas, adolescentes y personas menstruantes de acceder a un derecho tan básico como la educación. Por ello, es urgente contar con políticas públicas que reviertan la desigualdad. Si queremos resolver esta situación, debemos revisar a profundidad las leyes y comenzar desde ahí a subsanar las omisiones. Las leyes que nos rigen en materia educativa han obviado la obligatoriedad que las escuelas tienen, de brindar productos de higiene básicos como el jabón para lavarse las manos, o el papel higiénico, a los educandos. Como legisladores es nuestro deber establecer en las Leyes, esta obligatoriedad del estado de abastecer estos insumos necesarios para adecuada higiene de las y los estudiantes. Es por ello que la iniciativa que hoy presento busca reformar la Ley de Educación del Estado, para incorporar dentro de las atribuciones que deberán realizar autoridades educativas estatales, el acceso gratuito a productos de gestión menstrual como lo son, toallas sanitarias, tampones, copas menstruales y demás productos de higiene básica, en las escuelas públicas de nuestro Estado. Así mismo se propone incluir dentro de los fines de la educación, el fomento a la educación menstrual por parte de las autoridades educativas, lo anterior a fin de dotar a las y los educandos de las herramientas necesarias que les permitan conocer los aspectos para una correcta higiene y gestión menstrual, así como para normalizar este proceso natural humano, en el contexto sociocultural de las y los educandos. Lamentablemente la falta de información que prevalece en nuestro estado y en general en nuestro país, ha colocado -aun en la actualidad- a la menstruación como un tabú, un tema del que es incómodo hablar, por los prejuicios que la sociedad ha formado sobre la misma. Es nuestra obligación como representantes de la ciudadanía e integrantes de esta legislatura abordar este tema con perspectiva de género, toda vez que la estigmatización de la menstruación no ha permitido implementar acciones que generen condiciones dignas para las yucatecas en edad menstruante, lo que conlleva a un aumento en la brecha de desigualdad que impera en nuestro Yucatán. Por eso inicié diciendo, que hablemos de menstruación. En ese sentido los objetivos que persigue esta iniciativa generan sinergia entre sí, toda vez que, por un lado se propone dotar a niñas, adolescentes y personas menstruantes de los insumos necesarios para poder acceder a la educación en igualdad de condiciones y por otro lado se busca reforzar dicha medida implementando la inclusión de pláticas y talleres informativos en el Sistema Educativo Estatal. Sabemos que el hecho de dotar a personas menstruantes de los insumos de higiene básicos, no resultaría suficiente si dicha acción no es aparejada con pláticas informativas en las escuelas que den las herramientas para la adecuada gestión menstrual y que permitan normalizar este proceso natural en el entorno sociocultural de las y los educandos, esto debido a que aún existen hogares en Yucatán en donde las niñas y adolescentes no reciben la información necesaria. De igual modo se precisa que esta iniciativa no genera un impacto presupuestal en el entendido que no afecta los programas de las dependencias y entidades, ya que no se establecen destinos específicos del gasto público y las actividades adicionadas a la autoridad educativa y lo planteado queda entre lo que concierne al fortalecimiento de la Educación. Por lo expuesto y con objeto de generar las condiciones requeridas para que comience a materializarse una menstruación digna para las estudiantes de nuestro Estado, presento ante este Honorable Congreso del Estado, ésta iniciativa con proyecto de decreto por el cual se adicionan fracciones a los artículos 16 y 34 de la Ley de Educación del Estado, en materia de menstruación digna. Finalmente, quiero reconocer a la Abogada Mariana Zepeda Lahud, quien hizo un pronunciamiento y una petición a las y los diputados para legislar a favor de una menstruación digna durante uno de nuestros Foros de Parlamento Abierto que realizamos en la Comisión de Igualdad de Género. Mariana: tus palabras fueron escuchadas y tu causa que beneficia a más de la mitad de la población, está reflejada en esta iniciativa. Las causas ciudadanas siguen marcando nuestra agenda. Aquí quiero hacer una pausa para reconocer a las y los integrantes de la Comisión de Igualdad de Género. Hacer las cosas bien lleva tiempo, pero es tiempo que cambia la vida de las personas. A la diputada Karla Vanessa Salazar González, a la Diputada Alejandra Novelo Segura, a la Diputada Melba Rosana Gamboa Ávila, a la Diputada Fabiola Loeza Novelo, a la Diputada Karem Achach Ramírez, al Diputado Luis René Fernández Vidal, a la Diputada Rubí Argelia Be Chan, al Diputado Raúl Antonio Romero Chel, muchas gracias por su solidaridad y acompañamiento. Hago entrega de la misma a la Mesa Directiva para los efectos correspondientes. Las personas tienen que estar al centro y sus causas al frente. Es cuánto.