Mérida, Yucatán, 16 de junio de 2022.- Debido a que la alimentación es uno de los elementos fundamentales para la pronta recuperación de los pacientes, así como para el cuidado en general del organismo; el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán conmemora cada 16 de junio el Día del Nutricionista Dietista, personal experto en la nutrición humana.
El titular de la Coordinación de Nutrición, licenciado Sergio Humberto Caamal Beltrán, explicó que todos los planes de alimentación y las acciones que realiza el personal de Nutrición en las Unidades de Medicina Familiar y hospitales son parte de la atención integral que se brinda a la derechohabiencia; ya que una alimentación saludable ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y ayuda a la prevención y/o control de diversas enfermedades, sobre todo las crónico-degenerativas.
En Yucatán, el IMSS cuenta en sus unidades, hospitales y guarderías con un total de 65 profesionales en Nutrición, divididos en tres categorías: nutricionistas dietistas, especialistas en nutrición y dietética y nutriólogos clínicos especializados.
Entre los servicios que otorgan, se encuentran: evaluación nutricional de pacientes y el diseño de planes de alimentación, principalmente para los derechohabientes con diagnóstico de alguna enfermedad crónico-degenerativa (obesidad, diabetes, hipertensión, etc.) o los que se encuentran hospitalizados.
En las Unidades de Medicina Familiar (UMF) que cuentan con el servicio de Nutrición, se otorgan: sesiones educativas NutrIMSS y consulta nutricional con el objetivo de tener una alimentación correcta, completa, equilibrada, inocua, suficiente, variada y adecuada para el buen funcionamiento del organismo.
Algunas recomendaciones alimenticias que ayudan a fortalecer la salud, son: Incluir verduras en cada comida. Incrementar el consumo de alimentos ricos en fibra, que se pueden encontrar en frutas, verduras, cereales integrales, y en leguminosas, así como beber 6 a 8 vasos de agua para mantenerse hidratado.
Realizar, en la medida de lo posible, cada comida de forma regular (tres comidas principales y dos colaciones). Disminuir o suprimir el consumo de alimentos procesados, alcohol, gaseosas y bebidas azucaradas. Preparar los alimentos a la plancha, al vapor o al horno.
Finalmente, en caso de presentar alguna patología, solicitar orientación del personal de Nutrición para seguir un plan alimenticio que ayude a mejorar o fortalecer su estado de salud.