El turismo negro en Fukushima
El desastre nuclear de Fukushima atrae a más de dos mil visitantes al año que buscan ver las consecuencias del peor accidente nuclear del siglo XXI
El desastre nuclear de Fukushima atrae a más de dos mil visitantes al año que buscan ver las consecuencias del peor accidente nuclear del siglo XXI
NAMIE, Japón, mar. 11, 2016.- Un grupo de habitantes entusiasman a los turistas de la pequeña ciudad de Namie: muestran la costa afectada por un tsunami, las casas abandonadas y en las colinas, los reactores de la planta nuclear de Fukushima.
A cinco años de la catástrofe la costa noreste de Japón luce vacía, algunos locales hacen que la ciudad abandonada dé una oportunidad de exorcizar los horrores del pasado.
Al igual que los campos de concentración nazis en Polonia o en la Zona Cero de Nueva York, las regiones devastadas por el desastre, se han convertido en puntos calientes para el «turismo negro» y anualmente atraiga a más de dos mil visitantes interesados en ver las consecuencias del peor accidente nuclear en un cuarto de siglo.
«No hay lugar como el de Fukushima, tal vez Chernobyl, para ver lo terrible que es un accidente nuclear», aseguró un guía turístico, en referencia al accidente de 1986 en Ucrania.
Los prestadores del turismo negro conducen a los visitantes por la calle principal de Namie, que se encuentra a sólo 8 km de la planta afectada.
El 11 de marzo de 2011, un terremoto de 9.0 grados provocó un enorme tsunami que dejó 19 mil muertos.
VISITANTES INTERESADOS EN EL ACCIDENTE NUCLEAR
Residentes de Namie fueron evacuados después del tsunami que afectó y dejó a la planta nuclear en crisis y, hasta ahora, nadie ha sido autorizado a regresar debido a la preocupación por la radiación.
Existen al menos 10 guías voluntarios que organizan excursiones a lugares de interés en Namie y otras comunidades de Fukushima, incluyendo las áreas restringidas por los altos niveles de radiación.
Los guías utilizan dosímetros de control de radiación para evitar los «puntos calientes».
Una escuela primaria afectada por el tsunami es otra parada en la gira mórbida. Relojes en las paredes del aula se detienen a las 3:38 de la tarde, el momento exacto en las olas que barrieron la costa.
En el gimnasio, una bandera para la graduación de 2011 todavía se cierne sobre un escenario y la planta paralizada es visible a través de las ventanas rotas.
EL IMPACTO AMBIENTAL
Grupo de conservación de Greenpeace, aseguran que el impacto ambiental de la crisis nuclear de Fukushima, en los bosques cercanos empieza a ser visto y será una fuente de contaminación durante años.
Expertos confirman el hallazgo de signos de mutaciones en los árboles y en los gusanos, el ADN dañado, debido a que los bosques no pueden ser descontaminados de la radiación.
En un informe, de Greenpeace citan «aparentes aumentos en las mutaciones en los abetos, mutaciones hereditarias en las poblaciones de mariposas».
Los productores de leche todavía mantienen unas 300 vacas en Namie, en desafío a una orden del gobierno de sacrificarlas.
El desastre obligó a todas las decenas de reactores en línea de Japón, por cerca de dos años, a convertirse en el rostro de las preocupaciones sobre la seguridad y los temores de exposición a la radiación.
El gobierno japonés ha presionado para reiniciar los reactores, alegando que el país necesita la energía nuclear.
(Con información de agencias y Straitstimes)
HVI