El Papa ‘olvida’ su cumpleaños y condena la pena de muerte
En el día de su cumpleaños 82, Francisco cumple con una agenda normal de actividades, sin festejos especiales, y fustiga las ejecuciones extrajudiciales y la pena de muerte
En el día de su cumpleaños 82, Francisco cumple con una agenda normal de actividades, sin festejos especiales, y fustiga las ejecuciones extrajudiciales y la pena de muerte
El papa Francisco celebró hoy su cumpleaños número 82 en modo austero, sin festejos especiales y cumpliendo una agenda normal de actividades, interrumpida sólo por algunos regalos recibidos, sobre todo pasteles.
Nacido el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires (Argentina), hijo de emigrantes italianos originarios de la norteña región del Piamonte, desde su llegada al pontificado en 2013 el líder católico estableció la costumbre de pasar su onomástico austeramente.
De todas maneras, no ha podido evitar recibir algunos regalos y gestos en los últimos días.
En varias audiencias públicas, feligreses le acercaron varios pasteles de cumpleaños o, incluso, ya el miércoles pasado, un grupo de mexicanos le cantó las mañanitas por adelantado.
Ocurrió en el Aula Pablo VI, la más grande sala de audiencias de la Santa Sede, durante la catequesis pública semanal del Papa, que coincidió con la manifestación cultural “Navidad Mexicana en el Vaticano”, que este año estuvo dedicada al estado de Tamaulipas.
Por otra parte, apenas la víspera, al recibir en audiencia a un grupo de niños atendidos en el Dispensario (centro de salud) del Vaticano, recibió de regalo un gran pastel con los colores de la bandera papal (amarillo y blanco) además de una vela en el centro.
El dulce estaba acompañado por un cartel con la frase: “No podemos acostumbrarnos a las situaciones de decadencia y de miseria que nos circundan. Un cristiano debe reaccionar”.
Francisco se acercó junto a algunos pequeños, vio los adornos sobre el pastel (un árbol de Navidad y un muñeco de nieve, ambos de la propia pasta) y sopló la vela.
La mañana de este lunes, una pastelería cercana a la Plaza de San Pedro, preparó un pastel especial para Francisco utilizando el mango variedad Alfonso, harinas naturales molidas a piedra y leche de la granja del Vaticano.
En esta ocasión, el pastel fue decorado con una imagen del propio Papa en medio de una multitud de jóvenes, en referencia a la próxima Jornada Mundial de la Juventud que encabezará el pontífice, a finales de enero en Panamá.
Durante la jornada de este lunes, Francisco fustigó las «ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias» ordenadas en algunos países «con o sin pena de muerte legal».
Se trata de homicidios deliberados cometidos por agentes estatales, que a menudo se los hace pasar como resultado de enfrentamientos con presuntos delincuentes o son presentados como consecuencias no deseadas del uso razonable, necesario y proporcional de la fuerza para proteger a los ciudadanos», dijo el Papa, sin citar algún país, al recibir en audiencia una delegación de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte.
El Papa subrayó que «la legítima defensa no es un derecho sino un deber para el que es responsable de la vida de otro».
Los que tienen autoridad legítima deben rechazar toda agresión, incluso con el uso de las armas, siempre que ello sea necesario para la conservación de la propia vida o la de las personas a su cuidado», declaró.
Como consecuencia, todo uso de fuerza letal que no sea estrictamente necesario para este fin sólo puede ser reputado como una ejecución ilegal, un crimen de Estado», agregó el Sumo Pontífice.
A principios de agosto, Francisco inscribió por primera vez en el catecismo de la Iglesia Católica (libro de enseñanza oficial que contiene los principios de la fe) la oposición categórica a la pena de muerte y llamó a la Iglesia a comprometerse para abolir la pena capital «en todo el mundo».
La organización de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional registró en 2017 al menos 2 mil 591 condenas a muerte en 53 países y casi mil ejecuciones (excluyendo a China que no comunica sobre sus miles de sentencias).
jrr