“Don Armando Palma Peniche nunca estuvo privado de su libertad”
Mérida, Yucatán 16 de junio 2025.- A casi una semana del falso secuestro de Armando Palma Peniche”, alías La Gaviota, el fundador y director de Grupo Promotora Residencial vive ahora en el predio ubicado en el Campestre, donde lo llevaron sus hijos Armando de Jesús y Malena Palma Vargas después de armar un escándalo que sacudió a la sociedad yucateca.
“Don Armando Palma Peniche nunca estuvo privado de su libertad”
El fundador y director de Grupo Promotora Residencial vivía en el Country Towers de Mérida, “donde recibía visitas y firmaba documentos alusivos a su cargo”.
La primera noticia que llegó de uno de los usuarios del Country Towers de Mérida, como a las 19:40 horas del martes 10 de junio, fue: “ayuda, están secuestrando a don Armando Palma Peniche”, alías La Gaviota, fundador y director de Grupo Promotora Residencial
“Sus hijos Armando de Jesús y Malena Palma Vargas vinieron a visitarlo, aquí en el lobby y se lo están llevando en una ambulancia particular”, esa fue la primera versión de un conocido de la familia del magnate inmobiliario de Yucatán, mientras el lugar se llenaba de policías y agentes investigadores.
“Sí, es un secuestro, porque se lo llevan a la fuerza, está enfermo no se puede defender, miren su rostro”, insistió desesperado un habitante del lugar, mientras afuera llegaba el reportero de Presidio MX para dar cobertura al intenso movimiento policial que se registraba en fraccionamiento Altabrisa, el norte de Mérida, justo a la entrada del Country Towers.
La primera noticia que recibió el reportero a su llegada, como a las 20 horas, fue: “hay mucho movimiento policial, porque secuestraron al magnate inmobiliario y no dejan pasar a nadie”.
Sin embargo, tres horas después del suceso que ocasionó la llegada de más elementos de la Policía Estatal de Investigación (PEI) y la Fiscalía General del Estado (FGE), la SSP emitió un boletín para aclarar que no se trató de un “secuestro”, sino de un operativo por una orden de cateo dictada por un juez de control.
“Ese tipo de situaciones, en los que interviene la Fiscalía, se da cuando los hijos denuncian privación ilegal de la libertad o incluso maltrato familiar”, explicó un abogado de la familia que declinó identificarse.
El magnate inmobiliario, de 85 años y que desde hace más de un año vivía con su hija menor Hevenly Palma Vargas, fue sacado del lobby de una de las torres del Country Towers a bordo de una silla de ruedas para llevarlo a su residencia ubicada en el Campestre, “sin tomar en cuenta que está enfermo y no había cenado”.
“No es su residencia, porque el inmueble no está a su nombre, precisamente Armandito y Malena se opusieron, a pesar de que su padre insistió en convertirse en propietario; así que, esa no es su casa, él ya no quería estar ahí”, contó uno de los familiares que lamentó el suceso que puso en evidencia el problema de los hijos.
También lamentó que acusen a la hija menor de tenerlo secuestrado, “eso es mentira, porque cualquier persona, sea familiar, amigos, empresarios y empleados, iban a visitarlo en el lobby. No subían, pero si don Armando necesitaba firmar algún documento, bajaba con su enfermero”.
El entrevistado comentó que no es justo que entre hermanos se desprestigien: los dos hijos mayores, Armando de Jesús y Malena, se unen para lastimar a la menor que durante mucho tiempo se dedicó a cuidar a su papá, tanto que el empresario tenía enfermeros 24 horas.
“Armandito desatendió a su papá, no es que no lo dejaran verlo, cuando quería iba a verlo y ahora asegura que lo ´rescató´ de la hija menor de la familia Palma Vargas”, contó.
El familiar no quiso identificarse “por temor a represalias”, pero reveló que Malena le ha hecho mucho daño a su padre, “siempre lo chantajeaba con iba a quitarse la vida”.
“Este es un problema que trascendió por la investidura de don Armando Palma Peniche, el magnate inmobiliario de Yucatán, su hijo jamás imaginó el impacto que causó ante la sociedad yucateca”, aseveró la fuente.
Los hijos mayores de don Armando subestimaron los valores de la sociedad yucateca, “mostraron que les importa más el poder y el dinero al acusar a Hevelyn de maltrato familiar y obligar a su padre a firmar documentos; olvidaron sus lazos de hermandad”.
Consideró que el caso es muy extraño, porque don Armando estaba con su hija cuando llegó Armandito con otro familiar y agentes de la Fiscalía que se lo llevan a bordo de una ambulancia particular, unos 20 minutos antes de las ocho de la noche.
“Después de que se lo llevan, los agentes suben con una orden para inspeccionar el lugar y determinar si de verdad ahí vivía. Sí, ahí vivía y vivía bien, bajo la protección de su hija Hevenly Palma Vargas”, confió la fuente.
“Tenía todos los cuidados posibles, sobre todo porque la hija menor era su representante médico legal”, añadió.
Al despedirse, lamentó la situación familiar y dio a conocer un temor: que decaiga la salud del empresario, “su rostro estaba desencajado, triste y temeroso”.
