Discurso del Gobernador en la entrega de apoyos a vecinas y vecinos de la colonia Emiliano Zapata Sur III

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Mérida, Yucatán, 30 de septiembre de 2018

Muchas gracias, amigas y amigos, más amigas que amigos es lo que estoy viendo. A ver, que levanten sus manos las mujeres… ¡mira! abrumadora mayoría, ni modos compañeros, son más las mujeres porque son luchadoras, esforzadas y, siempre lo digo, son las que se preocupan más por los hijos, por la educación, por el bienestar y por eso las saludo con mucho afecto.

Por supuesto hablando de mujeres, quiero saludar y decirle, no sólo cuánto la quiero, cuánto la reconozco y admiro después de estos seis años de trabajo esforzado, a la Presidenta del DIF, mi esposa Sarita. Muchas gracias, Sarita; le echó muchas ganas, puso todo su esfuerzo, coordinaba la atención de la casa, de Rolo y de Montse -¿está Montse por acá? párate, Montse, para que te salude la gente-; y Rolo no vino porque se iba a jugar futbol.

Pero bueno, estamos aquí muy contentos aquí con nuestro diputado, el diputado Felipe Cervera, quien todos ustedes saben lleva en la sangre el compromiso social, la visión de atender siempre a quienes más lo necesitan. Felipe Cervera es una persona que conozco desde hace muchos años con una personalidad y con una identidad, pero hoy quiero decir que tiene toda ese ADN de compromiso con el pueblo porque es hijo de un gran hombre, de don Víctor Cervera Pacheco.

César Escobedo, mi reconocimiento, el director del IVEY; de verdad, el trabajo realizado ha sido muy intenso en todo el estado; un saludo a su familia porque estos seis años le quité mucho tiempo a la familia para cumplirle al pueblo y lo hizo muy bien.

Y con él quiero saludar a todas las compañeras y a todos los compañeros del IVEY, y les quiero decir porque, miren que hoy es domingo y la gente normalmente está con su familia, en la casa, y no es la única ocasión. En estos seis años en muchísimas ocasiones tuvimos eventos y actividades con el IVEY, aquí en Mérida o en comunidades lejanas, en la mañana, al mediodía, en la tarde y ellos ahí estaban, por eso mi gratitud y reconocimiento a las y los compañeros del IVEY.

Walter Salazar, secretario de Sedesol; de la misma manera,a las compañeras y compañeros de Sedesol agradecerles por lo mismo: sábados y domingos, días festivos, en la tarde o en la noche, cuando había gira ahí estaban ellos entregando los programas, llevando las acciones y eso es algo que agradecemos mucho.

Hoy es un día confortante en mi vida, hoy es el último día que estoy como Gobernador porque hoy se acaba mi periodo. Cuando den las 12 de la noche de hoy ya concluye mi Gobierno, mañana habrá cambio de Gobierno.

Y quiero decirles algo, me siento contento de estar con ustedes, me siento con la satisfacción de haber podido cumplir con los compromisos que hicimos. Y me nace decirles que empecé hoy el día, hoy en la mañana, desayunando en el parque de la colonia Felipe Carrillo Puerto, ¿conocen ustedes la colonia Felipe Carrillo Puerto? A ver aquí los vecinos, ¿saben dónde está la colonia Felipe?

Pues la colonia Felipe Carrillo Puerto es donde yo nací; allí nací, no me lo están preguntando, hace 50 años, ya tengo 50 años. Ahí nací y ustedes podrán decir, y cualquiera podría decir, “el Gobernador pues es Gobernador” pero yo les quiero decir que ahí en mi colonia donde nací en 1968 era, en esa época, donde no había luz, las casas no tenía baño y había mucha necesidad.

Yo hoy lo recordaba en la mañana y, al convivir con esas circunstancias y condiciones de las que me siento muy orgulloso, por eso empecé mi Gobierno ahí en la Felipe Carrillo y hoy ahí lo concluyo, porque uno siempre debe estar orgulloso de su origen, siempre debe estar orgulloso de lo que es, de donde viene.

Por eso pude entender, por eso se me dio la sensibilidad de entender y de saber lo importante que es para una familia el tener techo. Porque allá en mi colonia muchas de las casas eran de cartón y cuando venía la lluvia había que proteger los muebles, los papeles, los documentos, y no que decir si venía un huracán o un ciclón.

Por eso, mi Gobierno desde el principio tuvo muy claro que necesitábamos generar un crecimiento en la economía, que vengan grandes empresas como lo hemos conseguido, que haya inversión, que haya más empleo. Porque cuando la gente tiene empleo, tiene bienestar. Se han generado muchos empleos y el crecimiento económico es muy importante, pero no lo es todo.

Un gobierno no puede pensar nada más en el crecimiento económico, un gobierno tiene que pensar en que haya crecimiento económico pero también una justa distribución de la economía y de la riqueza que se vaya generando. No pueden avanzar nada más unos y otros quedarse atrás, para que se diga que un pueblo verdaderamente está avanzando todos tenemos que hacerlo juntos, nadie debe quedarse atrás.

Me siento contento también porque estar aquí en la Emiliano Zapata III me mueve recuerdos y compromisos de hace mucho tiempo. En el año de 1998 -¡mare, cuánto tiempo tiene así!- hace 20 años vine aquí para pedirles la oportunidad de ser diputado, y me dieron esa oportunidad y fui diputado.

Así como hoy Felipe es diputado, yo fui diputado del 98 al 2001. Y luego, en el 2004 volví a pedir la oportunidad de ser diputado y me la volvieron a dar, la gente aquí de todo el rumbo de Emiliano Zapata, de San Antonio Xluch, San José Tecoh, todo el rumbo del sur me hizo a mí entender, convivir y ver las condiciones de necesidad y la necesidad de la presencia del gobierno para entender las necesidades de la gente.

Por eso hoy en este último día de mi gestión, me mueve mucho el sentimiento el haber estado en mi colonia donde sigue viviendo mi mamá, allí donde yo nací, allí sigue viviendo mi mamá y yo la voy a visitar con mucha frecuencia, a partir de mañana con más frecuencia y más tiempo.

Y estar aquí en esta colonia que tanto le dice al sur de la ciudad de Mérida, que tanto le dice a las autoridades y que tanto debe llamar siempre su atención por lo que se necesita en esta zona de la ciudad.

Por eso me da gusto venir y, ¿saben qué?, vengo a decirles muchas gracias. Muchas gracias a todos ustedes porque ustedes simbolizan lo que ha sido la parte más importante de mi Gobierno: la confianza de la gente en sus autoridades y les voy a decir porqué.

Ustedes saben que este asentamiento, bien lo decía César, hay quien desde hace cuatro años por la necesidad se asentaron en un espacio en un terreno y vivían en condiciones muy complicadas cómo pudieran, una casa de cartón de lámina como fuera. Y con justicia desde hace tiempo estaban solicitando que se hiciera una regularización, ¿cierto o no cierto?

Era una petición que existía y pasaba el tiempo y algunos pensaban que no se iba hacer, y yo le dije a César “anda y habla con la gente y diles que nos tengan confianza”, había que seguir diferentes trámites, había que seguir diferentes cosas, para que se los voy a decir cómo es, para garantizar que la tierra le toque a quien verdaderamente lo necesita y lo estaba viviendo.

Porque ustedes saben que en algunos casos no eran precisamente personas que lo necesitaban, quienes lo viven y deberás lo necesitan que se le dé. Por eso seis censos se hicieron para verificar.

Y más gusto me dio el saber y  sentir que ustedes tuvieron esa confianza, ¿y saben dónde radica esa confianza? En la colaboración y en el trabajo con la comunidad, con el gobierno y la autoridad porque cuando llegaron los momentos de hacer las asignaciones después de los censos y de ver que se muevan o que se ubiquen como correspondía, no fue necesario ni traer a la policía, ni a la autoridad ni nada.

Los mismos vecinos de manera ordenada y organizada fueron retirando las viviendas, retirando todo para que estuviera en orden y en orden se le dio su asignación a cada quien y no sólo eso, eso yo lo hablaba con Felipe, Felipe Cervera el diputado le decía, que bueno que se hicieron las asignaciones pero es muy importante igual que puedan tener un cuarto, un espacio, una habitación, una casa.

Porque yo sé que para ustedes este cuarto significa su hogar, significa su casa, porque a partir de ahí ustedes van a construir y consolidar su hogar y lo platicamos y buscamos la manera y hoy ya es una realidad.

Las 426 familias no solo tienen su asignación legal del terreno sino que ya tienen su cuarto y eso es lo que va darles una certeza del espacio del terreno que tienen y les va dar también la esperanza de seguir avanzando, de seguir construyendo, de trabajar pero ante todo con una seguridad. Porque yo sé perfectamente que todos vivían con la inquietud de qué pasa si un día vienen y nos sacan a todos de acá.

¿Cierto o no es cierto? Y esa inquietud de decir oye y qué voy hacer si un día vienen …  esa inquietud no es correcto ahorita ustedes pueden tener la seguridad de que pueden ir a su trabajo regresar, esta es mi casa, aquí estoy.

Y bueno, ese sentimiento de seguridad a mí me da una gran satisfacción porque es lo que les va permitir a ustedes seguir viviendo, trabajando, esforzándose y por qué no con el fruto de su esfuerzo y de su trabajo ir haciendo mejoras, ir ampliando y el día de mañana hoy este cuarto el día de mañana hacerle otra construcción y el día de mañana tener su vivienda en mejores condiciones.

Eso es lo estamos construyendo y haciendo, bien lo dijo Felipe, para mí es muy importante que ustedes tengan este cuarto, esta construcción, ahora que venía hace un rato en que estaba viniendo caminando una vecina, no sé si esta por acá, le dije ¿oye y en dónde vives tú?

Aquí me dice, yo ya tengo mi casa ya la construyeron y me contó una anécdota me dijo que ella desde hace tiempo vive acá, vivía acá y tenía una casa de cartón y me dice, me construyeron ya mi casa, mi cuarto y me dice, ya me pasé allá al cuarto porque ya está listo, ya está completo, me pase a vivir allá me dice y no lo va creer usted hace poco que cayó fuerte la lluvia se cayó mi casa donde yo vivía la casa de cartón, fíjese ustedes eso que le pasó a ella le podría pasar a cualquiera.

El hecho de vivir en una construcción sólida, en un cuarto, les da a ustedes una seguridad a ustedes y a sus hijos, aquí el nene verdad me estaba comentando la vecina, el nené la seguridad que esté ahí adentro, bien protegido, así es como vamos a ir viendo que van avanzando las generaciones.

No podía, de verdad, no podía concluir mi gobierno sin venir a saludarles, el día que vinieron a darles las asignaciones y las constancias de los cuartos fue un domingo,  que yo había previsto venir y no pude venir y les voy a decir por qué.

Porque hace como dos meses, mes y medio me operaron de mi rodilla y ya que me operaron de mi rodilla pues ya estaba yo bien, pero como dice la doctora, Gobernador usted no está quieto no hizo su rehabilitación, no hizo su reposo, y ahí está se volvió a echar a perder su rodilla. Entonces ese domingo que yo debía venir aquí tuve un problema en la rodilla que me habían operado y no pude venir.

Pero saben, me dio mucho gusto, porque dije “no puedo terminar mi Gobierno sin ir y saludar a mis amigas y mis amigos de la Emiliano Zapata III, que aquí doña Rosa Isela me dice que le llaman también el Arco, ¿verdad?

Así bueno, porque ese día le hablé a la secretaria General de Gobierno, Martha Góngora, y le dije “Martha, hazme un favor anda el evento en mi lugar, acompaña a César discúlpame porque tengo este problema en mi rodilla”.

¿Y saben qué? Ya luego cuando fui a mi oficina había una bolsita y en esa bolsita habían varios papeles doblados y le digo a José Miguel, que es mi secretario particular ahí en Palacio, le digo “¿y esa bolsita y esos papeles?” y me dice lo mandó “la secretaria Martha, que fue al evento allá a la Emiliano Zapata en lugar de usted y me dice que eran personas que tenían esos papeles para entregarle a usted, y como no fue usted se lo entregaron a ella y ella lo metió en esa bolsa y aquí está”.

Y los abro y los empiezo a leer y, se los digo con gran emoción, eran puras cartas diciéndome “Rolando, gracias por mi terreno, gracias por mi cuarto”. Eran invitaciones donde me pedían “quiero que vengas a mi casa, quiero que vengas a mi cuarto quiero que vengas a conocerlo”. Eran cartas donde le pedía a Dios por mí, eran cartas de madres que me decía “Dios te bendiga” y eso a mí me dio una gran emoción.

Eso a mí me hizo recordar que el pueblo de Yucatán, y cuando hablo del pueblo de Yucatán me refiero a quienes hemos tenido el privilegio de nacer aquí y a quienes aun cuando nacieron en otro lado hoy han elegido este lugar para que sea su casa, todos somos yucatecos, somos todos hermanos.

Me hizo recordar que este pueblo es un pueblo luchador, es un pueblo esforzado pero también es un pueblo agradecido y por eso con ese mismo sentimiento yo dije, no puedo terminar mi gobierno sin ir con mis amigas y amigos de la Emiliano Zapata Sur para decirles que les quiero mucho, que estoy muy reconocido por la confianza que tuvieron en mi Gobierno.

Cuando les “dijimos tengan confianza les vamos a escriturar le vamos a dar esos terrenos organizadamente”; pero lo más importante, lo más importante para lo que vine hoy fue para decirles algo. Muchas, muchas, muchas gracias por haberme permitido el gran privilegio de ser su Gobernador durante estos seis años.

Muchas gracias, les quiero mucho y a seguir trabajando todos unidos juntos siempre por Yucatán.