Discurso del Diputado Luis Borjas Romero
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Mérida, Yucatán 12 de febrero 2020.- Hace unos meses este Congreso reformó la Constitución Política del Estado de Yucatán, específicamente el artículo 28, el cual contempla el informe de gobierno, las comparecencias y las preguntas que las y los diputados podemos formular para ser respondidas dentro del texto del informe …
Los motivos de aquella reforma fueron muy claros, que el Poder Legislativo con pleno respeto a la división de poderes tuviere mayores herramientas para realizar un ejercicio democrático objetivo y claro al momento de conocer directamente los resultados obtenidos por la administración estatal…
Sin embargo, los servidores públicos que comparecieron, fueron tímidos en sus respuestas, especialmente cuando se les cuestionó respecto a temas, que a decir de ellos, no correspondían al texto del informe.
Así el día de ayer se abordaron los temas de seguridad pública y gobernabilidad donde los titulares de las áreas que a solicitud de esta soberanía, así como los que el propio titular del ejecutivo decidió convocar, se limitaron a dar cifras alegres, pero sin poder responder contundentemente a nuestros cuestionamientos más sensibles…
Dentro de esas preguntas, fuimos claros, y de ninguna manera se abordaron temáticas ajenas a los objetivos gubernamentales en el eje referido.
La seguridad es una construcción permanente de la vida cotidiana, donde actualmente se discuten, no solo los bienes jurídicos que se deben proteger mediante las políticas de seguridad pública, sino también la relación existente entre la noción de seguridad con la de derechos humanos, libertad y democracia, ya que una de las amenazas más visibles a la seguridad pública es la delincuencia, pero existen otras no tan visibles como la violación de derechos.
En ese sentido, en el informe presentado señalan que durante el año de 2019 se pusieron en marcha los proyectos normativos necesarios para dotar de certeza jurídica a los programas, acciones y proyectos de la actual administración.
Que se mantuvo la certeza jurídica de los ciudadanos para el ejercicio de sus derechos patrimoniales a través de la emisión de boletas, constancias y certificados registrales de los actos jurídicos de la propiedad reforzando este marco con nuevas medidas como el registro de notarías, escribanías y juzgados de paz.
Que se continuó con la implementación del servicio de Atención de Casos de emergencia al 911 y al número de denuncia anónima 089 atendiendo 500 mil llamadas de emergencias y 1,520 denuncias.
Que se adquirieron 370 unidades vehiculares totalmente equipadas, que se dotó al personal operativo con vestuario, chalecos blindados, equipos de radiocomunicación, armas y cámaras lectoras de placas vehiculares y que se contrataron 300 nuevos elementos para contar con 4267.
Y que además, intentan reforzar la seguridad con la Iniciativa Yucatán Seguro, presentada y aprobada en esta Legislatura, la cual contempla una inversión de 2 mil 620 millones de pesos en tecnología de última generación, para adquisición de cámaras, botones de pánico; arcos carreteros; una aeronave y cuatro embarcaciones.
Sin embargo, en un estado democrático y progresista, donde la seguridad es un factor coadyuvante del bienestar social y de la calidad de vida. La concepción de seguridad no debe estar circunscrita únicamente a la prevención o persecución del delito, sino orientada también a promover la salvaguarda y garantía de todos los derechos humanos, una seguridad humana.
Que se conciba como un concepto amplio y que signifique mucho más que la ausencia de la amenaza delictiva y la presencia de elementos de seguridad.
Que incluya la seguridad en contra de la privación humana, de una calidad de vida aceptable, así como garantías a todos los derechos humanos;
Por tal razón, acciones de represión no son aceptables en un Estado de Paz como Yucatán, esperamos y exigimos que nunca vuelvan a repetirse en el marco del libre ejercicio de los derechos constitucionales de las personas.
Por lo que debe actuarse con todo el peso de la Ley cuando así se requiera, pero respetando en todo momento los derechos humanos de las personas sin descuidar la seguridad y gobernabilidad.
Otro tema que pareció incomodar a los comparecientes fue la que buscó obtener respuesta de los despidos múltiples al inicio de la administración, no se dieron cifras respecto a juicios, indemnizaciones, ni convenios.
Cobra relevancia que el robo a casa habitación ha aumentado, y la respuesta oficial fue que se han adquirido diversas herramientas, pero que no obtienen resultados tangibles ya que vemos con tristeza que en este tema se prefirió decir que el poder judicial ha dejado en libertad delincuentes al poco tiempo de ser apresados…
A pregunta expresa de qué se ha hecho con los más de 2,600 millones aprobados por este Congreso no quedaron especificados los bienes, montos y avances reales, tan simple como decir que de 50 botones de pánico todavía no hay siquiera uno en operación…
No hay duda de que ha sido un período con altibajos, donde se cumplió el objetivo principal de mantener y mejorar en el Índice de Paz y donde vemos también que los funcionarios encargados de estas áreas hablan de acciones pero que no reconocieron que falta mucho para alcanzar los objetivos que se prometieron a la ciudadanía.
Hoy nos encontramos en un momento de sentimientos encontrados.
Existen hombres y mujeres de Estado, es decir, aquellas personas que sirven a los asuntos públicos más allá de un sexenio, más allá de ideologías o partidos políticos y también existen ideas de Estado, por eso muchos de los que hoy estamos aquí presentes nos encontramos orgullosos de haber construido las ideas que actualmente benefician a Yucatán, pero nos preocupa que los principales logros en seguridad e inversión extranjera en la Entidad sean fruto de ideas, decisiones y acciones que se sembraron y gestionaron en la administración anterior.
Es cuánto.