Discurso de la Diputada Janice Escobedo en el Congreso
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CON EL PERMISO DE LA MESA DIRECTIVA,
COMPAÑERAS Y COMPAÑEROS DIPUTADOS,
AMIGOS DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN,
RESPETABLE PÚBLICO.
MUY BUENOS DÍAS.
¿Cuántas de las de aquí presentes han sido víctimas de alguna agresión que ha circulado en internet? Esas imágenes, la información falsa que se comparte en medios digitales, redes sociales y por tecnologías de transmisión de datos que daña la imagen de una mujer; esa divulgación de información personal que vulnera su seguridad y la de su familia.
Dañar la esencia, el nombre y la honra de una mujer está a tan solo un click de distancia.
Eso es Violencia y no lo podemos tolerar.
Desde el 2007, año en el que se expidió la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, quedó clara la necesidad en todo México de garantizar el derecho de las mujeres a vivir de manera plena, tranquila y libre de violencia.
Hoy nos toca adaptarnos a los tiempos modernos. Vivimos en la era de la evolución de las Tecnologías de la información y comunicación, medios digitales y redes sociales, que, si bien han traído consigo innumerables beneficios, el mal uso de los mismos provoca en muchas ocasiones daños irreparables.
Al día de hoy el código penal del estado de Yucatán en su capítulo V y V BIS, en materia de delitos contra la intimidad e imagen personal respectivamente, castiga la difusión de imágenes de contenido erótico, sexual o pornográfico sin consentimiento difundidos a través de las TICs. De la misma manera el capítulo 1 BIS impone sanciones a lo relacionado con el acoso sexual por cualquier medio.
De acuerdo con el INEGI en 2017, las mujeres fueron víctimas en número mayoritario de insinuaciones, propuestas sexuales, amenazas, intimidación, daños por publicación vergonzosa, falsa o real, en comparación con los hombres.
Por eso necesario que las distintas causas que generan violencia hacia la mujer queden bien claras, puesto que en muchas ocasiones únicamente se considera violencia al maltrato físico y no se toma en cuenta que también se puede hacer daño de otras formas, y, por lo tanto, al no definirse de manera precisa, no se actúa, ni se aplica la Ley.
Es por eso, que a través de una extensa labor legislativa de varios meses, el 27 de marzo del año en curso, presenté ante esta Soberanía una Iniciativa en favor de las mujeres, que contenía el proyecto de Decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones a la Ley de Acceso de las Mujeres a una vida libre de violencia en Yucatán con el fin de reconocer y definir la existencia del concepto de “Violencia Digital” dentro de las modalidades establecidas en el artículo 7 de la citada ley.
Si bien la “violencia digital” se ha venido dando de manera cotidiana en nuestra sociedad actual, resultaba novedoso al mundo jurídico y en consecuencia las leyes no habían reconocido su existencia, mucho menos la forma de reducir sus efectos permiciosos hacia las mujeres.
Me congratulo de que en sesión ordinaria de fecha 16 de mayo del año en curso, nuestra compañera, la Diputada Paulina Aurora Viana Gómez se sumó a esta lucha tan importante presentando su propio proyecto de decreto que resonaba en el mismo sentido
Finalmente, esta iniciativa se enriqueció en comisiones con las aportaciones de la diputada María Teresa Moisés Escalante, donde se optó por dotar al Instituto Estatal de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAIP) de atribuciones a fin proporcionar la asesoría y seguimiento para la tramitación de un procedimiento de cancelación de datos personales, que deberá llevarse a instancia de la Víctima de manera paralela y separada a cualquier otro que se hubiese promovido.
Quiero recalcar que en todo momento se priorizó el bienestar de las mujeres víctimas de violencia, y al mismo tiempo velando siempre por la libertad de expresión de la sociedad.
Como podrán observar, esta iniciativa ha sido plural e incluyente en ideas y opiniones. Agradezco la confianza que una maestra tuvo conmigo en el mes de noviembre del año pasado para poder trabajar en esta iniciativa que marcará un parteaguas y que permitirá realizar acciones que promuevan su prevención.
Quiero decirle a la maestra, que reconozco el esfuerzo que ha realizado desde las esferas que le corresponden, alzando la voz por un grupo vulnerable de mujeres. Con la aprobación de esta iniciativa, espero estar retribuyendo a su confianza.
En este sentido me es imperante recalcar que el trabajo legislativo no debe causar divisiones, por el contrario, nos debe unir como sociedad. Todos somos corresponsables de poder garantizarles a todas las mujeres, la oportunidad de poder gozar de la plenitud de sus derechos.
Por eso quiero pedirles que votemos a favor de este dictamen que ha sido estudiado y analizado en comisiones bajo el excelente trabajo que ha realizado la presidenta de la comisión de igualdad de género, la diputada Milagros Romero Bastarrachea, a quien agradezco su oficio político, inclusión y diálogo en los trabajos de esta iniciativa.
Con la aprobación de este dictamen, dotaremos al Poder Ejecutivo del Gobierno del Estado, de los elementos necesarios para que elabore y aplique políticas públicas, programas de acción, así como establecer, promover y vigilar el debido cumplimiento de protocolos y metodologías para la atención y prevención de esta modalidad de violencia en todo Yucatán.
Celebro y agradezco a todos los presentes y a todos aquellos que se tomaron el tiempo de enriquecer el debate con el que culminó la presente reforma.
Sin embargo, mientras sigamos legislando para erradicar la violencia contra la mujer, tendremos que reconocer no solo que persiste, sino que continúa presentándose, ahora en nuevas modalidades.
Sea este un llamado a la tolerancia y un alto a la discriminación hacia las mujeres. “Respetar a las mujeres es respetar a tu familia, es respetar a la sociedad: es respetar a Yucatán”.
Es cuánto.
