Diputada María Teresa Moisés en su intervención en el Congreso
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Solicite hacer uso de la palabra, en mi calidad de presidenta de la Comisión Permanente de Derechos Humanos.
Es lamentable, pero tenemos que reconocer que persisten casos de violencia contra niñas, niños y adolescentes, quienes viven situación de calle, abandono, violencia física y psicológica, entre otros.
No obstante, no se cuentan con datos precisos o estadísticas para medir este problema, según los especialistas por temor al agresor, a la exposición pública, a la estigmatización, por desconfianza en las autoridades, por desconocimiento de los derechos o bien, por “normalizar” lo que de ninguna manera lo es, y la ausencia de mecanismos disponibles y accesibles para reportar y pedir ayuda.
En este sentido, podemos deducir que muchos de nuestras niñas y niños viven una constante violación a sus derechos humanos, sin nosotros si quiera percibirlo y poder ayudarlo.
Por lo tanto, como legisladores nos corresponde fortalecer los instrumentos previstos por la norma, para atender posibles violaciones a los derechos de niñas y niños en Yucatán.
En congruencia con lo anterior, la iniciativa presentada por la Dip. Janice Escobedo Salazar, propone fortalecer los mecanismos para establecer políticas públicas específicas para que las unidades administrativas de primer contacto de niñas, niños y adolecentes en los 106 municipios del Estado, cuenten con los medios y herramientas necesarias que permitan su implementación, el perfil idóneo para su titular y del personal que brinde su atención, así como los indicadores de evaluación claros y medibles.
Bajo esa tesitura, este nuevo producto legislativo complementa lo ya previsto en la Ley de Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes del estado de Yucatán, para que a través de estas unidades, coordinen a los servidores públicos municipales cuando en la operación, verificación y supervisión de las funciones y servicios que les corresponden, detecten casos de violación a los derechos de niñas, niños y adolescentes, a efecto de que se de vista a la Procuraduría de Protección de la Defensa del Menor y la Familia, de forma inmediata.
En este sentido, dentro de un ejercicio de análisis y estudio, diputadas y diputados de la Comisión Permanente de Derechos Humanos coincidimos en principio, que la aprobación de cualquier ley relacionada con derechos de niñas y niños debe regirse por todo y sobre todo, en preservar el interés superior de la niñez, lo que para nosotros los legisladores implica tomar la mejor decisión atendiendo a sus circunstancias, necesidades y el contexto donde se desenvuelven, garantizando que vivan una vida libre de violencia y posibilitando el máximo disfrute de sus derechos.
Reconocimos también, que era necesario posicionar al niño como titular de derechos humanos. Pensar por ellos y trabajar por ellos, atender las observaciones del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, el contenido de la Convención, La Ley general y la ley local de protección de los derechos del niño.
Es por ello, que aprobamos el perfil idóneo del titular y de su personal, promoviendo la capacidad, la formación y la idoneidad que exige la Convención de los Derechos del Niño y las observaciones emanadas de este documento vinculante en el orden juridico mexicano, las facultades de esta unidad y los parámetros para la creación de un Protocolo de actuación del servicio público municipal, quien deberá contar con la capacitación y sensibilización necesaria, sin que exista mayor presupuesto destinado para ello, pues esas unidades ya existían en la norma.
Ha sido un proceso de discusión legislativa cuyo aporte final me llena de orgullo, pues ha promovido la participación activa, propositiva y sensible de todos los integrantes de la Comisión Permanente de Derechos Humanos, por y para nuestra niñez en Yucatán.
La niñez es una prioridad en todos los asuntos públicos, y preservar su interés superior representa el verdadero compromiso por trabajar en el presente pensando en un futuro de paz y armonía en el Estado.
Por todo lo anterior, solicito su voto a favor del presente dictamen.
Es cuánto.