El edema macular es una inflamación del ojo producto del derrame del líquido esencial para el funcionamiento eficiente del globo ocular, hecho que puede provocar la pérdida de la vista. Hasta ahora, la forma de tratar este problema es mediante inyecciones al interior de ojo, lo cual además doloroso resulta muy caro.
Ante esta situación, investigadores del Tecnológico de Monterrey desarrollaron un fármaco oftálmico en gotas para el tratamiento del edema macular, mismo que se ofrece a un costo considerablemente más bajo que los localizados en el mercado nacional.
Esta invención permite el envío efectivo de fármacos, en particular esteroides, al interior del globo ocular, mediante la instalación eficaz y segura de un colirio, que es un medicamento en gotas, sobre la superficie del ojo, evitando los riesgos de los métodos invasivos.
“Este desarrollo, al ser de administración tópica, tiene muy pocos riesgos, no requiere personal altamente capacitado para su administración, ni infraestructura muy sofisticada y tampoco es tan costoso como los tratamientos que actualmente existen”, determina el doctor Arturo Santos García, decano de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud Región Occidente, del Tec de Monterrey.
La mácula es la zona central de la retina donde se concentran la mayoría de los fotoreceptores que permiten la visión nítida y de los colores, es decir, aquella que facilita reconocer rostros, letras y detalles finos de nuestra visión. Para los especialistas, la principal razón por la que el líquido en la mácula se escapa es el alto nivel de glucosa en sangre.
“Patologías como la retinopatía diabética, las oclusiones vasculares o una cirugía de cataratas hace que la permeabilidad de los capilares que están ahí presentes se altere y se libere líquido. El edema macular es la causa más frecuente de discapacidad visual irreversible”, explica el doctor Arturo Santos García.
El tratamiento podrá ser utilizado de manera primaria o como un coadyuvante, es decir, habrá casos en donde el paciente se administre una inyección e inicia el tratamiento con estas gotas y, en lugar de requerir 10 inyecciones al año, probablemente requiera sólo una o dos. Puede ser utilizado como tratamiento primario o terapia coadyuvante.
“El problema de esas inyecciones es que se programan una vez al mes, y se administran con una cantidad mucho más alta de la necesaria para que dure su efecto. Si un paciente desea su visión o su mácula funcionando adecuadamente tiene que recibir aproximadamente 10 inyecciones en un año. Cabe aclarar que el medicamento que se administra en cada una de las inyecciones tiene un costo cercano a los 18 mil pesos”, dejó claro el especialista.
Este desarrollo cuenta con patente otorgada en Taiwán, en Rusia y en Japón. El México Cofepris la ubica en fase 2 de patente y la marca ha sido registrada con el nombre “Klaridum”.
El equipo de trabajo fue conformado por 11 investigadores y seis alumnos de profesional y doctorado, quienes conjuntaron esfuerzos a lo largo de seis años de investigación.
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(Agencia ID)