El pasado 26 de abril del año en curso el Senador Daniel Ávila Ruiz, como Presidente de la Comisión de Reforma Agraria, presentó el dictámen que contiene Punto de Acuerdo por el que se ratifican a cuatro ciudadanos como Magistrados Numerarios del Tribunal Unitario Agrario: Benjamín Arellano Navarro, Javier Rodríguez Cruz, María de Lourdes Claudia Martínez Lastiri y Raúl Eduardo Covarrubias García, los cuales fueron aprobados en el Pleno de la Cámara de Senadores.
La importancia de los Magistrados Numerarios de los Tribunales Unitarios Agrarios es que cumplen funciones tales como: resolver controversias en relación a tierras ubicadas dentro de su jurisdicción; conflictos relacionados con la tenencia de las tierras ejidales y comunales; delimitaciones de terrenos entre dos o más núcleos de población ejidal o comunal; restitución de tierras, bosques y aguas a los núcleos de población o a sus integrantes; controversias entre ejidatarios, comuneros, posesionarios o avecindados; entre otros.
La relevancia de la ratificación de estos funcionarios es fundamental para la justicia agraria en México. El Senador comentó, que por esa razón, las Comisiones Unidas de Reforma Agraria y de Justicia realizarón una serie de revisiones exhaustivas para evaluar el desempeño en las labores encomendadas de cada candidato, así como su perfil y preparación. Asimismo, se analizó sus trayectorias profesionales y su desempeño a partir de los resultados de las visitas de inspección; su grado académico que comprende el nivel de estudios; los cursos de actualización y especialización acreditados; así como, su acreditación de no haber sido sancionados por motivos administrativos.
Sin lugar a dudas – dijo el Senador – la ratificación de estos ciudadanos obedece a que cada uno de ellos se ha dedicado a una labor y servicio excepcional, responsable, eficaz y honesto; y tienen la convicción de realizar un trabajo a favor de la sociedad a partir de su lealtad a las instituciones agrarias, además, han inducido su actuar profesional bajo los principios de independencia, imparcialidad, objetividad, honestidad, profesionalismo, excelencia y laboriosidad.
Por último, dijo que seguirá trabajando hasta el término de la LXIII Legislatura de la Cámara de Senadores, con base en la conveniencia de la administración de justicia agraria y en beneficio de los ciudadanos mexicanos.