Ciudad de México, a 12 de marzo de 2021.- El presidente de la Concanaco Servytur, José Manuel López Campos, sostuvo que la pandemia ocasionada por el Coronavirus detonó condiciones adversas que provocaron un mayor crecimiento de las grandes brechas de desigualdad que se encuentran en las relaciones del mundo del trabajo para un desarrollo pleno, incluyente y sostenible.
Al participar en el Encuentro Mundo del Trabajo, organizado por la Unión Social de Empresarios de México (USEM), la Conferencia del Episcopado Mexicano y la Pastoral del Trabajo, el líder empresarial destacó que la Economía social y solidaria son conceptos que buscan solucionar la desigualdad que existe mediante alternativas para aplicar al modelo económico a través de los valores universales.
Durante su intervención en la Mesa de Trabajo 1: “Desarrollo visto “desde tierra” propuso que se valore la Economía social y solidaria como opción para el desarrollo personal y colectivo, que permita a las comunidades rezagadas elevar sus niveles de bienestar al contar con un trabajo digno y mejor remunerado.
Consideró urgente la implementación de políticas económicas, que conlleva a cambios en las formas de producción y de distribución, para impactar de manera positiva en el consumo interno nacional.
“Tenemos que asumir el compromiso, pues actualmente se abre la posibilidad de apostarle en la etapa post pandemia a la economía solidaria para alcanzar la transformación social mediante la atracción de inversiones y de actividades económicas productivas, que generen crecimiento y desarrollo económico”, anotó.
José Manuel López Campos reconoció la necesidad de atender la problemática laboral con una amplia visión para comprender desde el ámbito social, cultural y político las carencias que permitan dar sentido a la parte económica, a fin de dignificar las condiciones de vida de las poblaciones que se encuentran rezagadas en su desarrollo, exigiendo disminuir las desigualdades e inequidades.
En ese sentido subrayó: “El sector terciario de la economía que incluye el comercio, los servicios y el turismo; en donde se encuentra la mayor cantidad de las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), participarán en las acciones que se planteen entre sectores y gobierno para engranar el esfuerzo de avanzar en la solución de la falta de oportunidades de trabajo de los mexicanos que carecen de los medios para incorporarse a las cadenas productivas en general.
Destacó que el compromiso de la Concanaco es aplicar estrategias basadas en la inclusión, y valores como la solidaridad y el respeto a las diferencias, con el propósito de contribuir a tener una sociedad en armonía capaz de generar empatía por los problemas que aquejan a las comunidades generando condiciones de bienestar a mayor número de mexicanos.
El dirigente empresarial precisó que la problemática social-económica se refleja en poblaciones carentes de servicios, educación, salud, viviendas dignas, mismas que son impactadas por la falta de oportunidades laborales que permitan un mejor desarrollo familiar.
Esta situación, apuntó, es un círculo vicioso porque a falta de condiciones que impulsen los cambios no se obtiene lo esencial, un sustento que permita a las personas cubrir sus necesidades básicas con un trabajo formal.
Por ello, planteó dirigir la responsabilidad social a fortalecer el trabajo digno, el desarrollo económico, y a procurar que aumente el número de empresas socialmente responsables y comprometidas con los derechos laborales.
Aseguró que en las empresas representadas por la Concanaco Servytur se aplican estrategias que brinden a los colaboradores condiciones de bienestar, a través de las cadenas de valor, con su participación en los procesos de producción, distribución y comercialización de bienes y servicios.
“Aunque hemos avanzado en este sentido en los últimos años, estamos conscientes que falta mucho por hacer, que los esfuerzos de los diversos sectores por combatir la desigualdad no son suficientes, que debemos plantear de manera coordinada modelos que permitan la creación de empleo para hombres y mujeres, de manera incluyente y sostenible, desde las comunidades rurales, en zonas rezagadas, hasta en las grandes metrópolis poniendo énfasis en sus vocaciones productivas”.
Es ahí, dijo, cuando empieza a cobrar su verdadera dimensión la estrategia a impulsar, la trasversalidad hay que volverla realidad y el proyecto convertirlo en sostenible en el tiempo, llevar a esas comunidades a ser productivas, a generar oportunidades de desarrollo con la incorporación a la economía formal, al pasar de ser productores de autoconsumo a proveedores de micro, pequeñas y medianas empresas, de diferentes sectores, dentro de las grandes cadenas productivas del país.
En la Mesa de Trabajo 1: Desarrollo visto “desde tierra” participaron S. E. Mons. Gustavo Rodríguez Vega, Presidente de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social de la Conferencia del Episcopado Mexicano; Juan Manuel Martínez Louvier, Director del Instituto Nacional de la Economía Social (INAES); Antonio Sánchez Díaz de Rivera, Presidente de la Comisión de Bienestar e Inclusión Social de COPARMEX; Enrique González Álvarez, Rector Presidente de las Universidades La Salle México; Marcela Ibarra Mateos, Directora del Laboratorio de Innovación Económica y Social (LAINES) de la Universidad Iberoamericana Puebla; Adriana Gómez Chico Spamer, Investigadora de Economías incluyentes y solidarias; María Carola Diez, Directora General de Ensamble Artesano; Alberto Irezabal Vilaclara, Director General de Capeltic; Gerardo Gordillo Zamora, Director General de Horizontes Creativos; y Gerardo Aranda Orozco Vicepresidente de CEPOS, que fungió como Moderador.