Brinda IMSS Yucatán atención médica integral para casos de sobrepeso y obesidad en niños y adolescentes.
Mérida, Yucatán, a 4 de marzo de 2025.- La obesidad es una enfermedad prevenible y tratable para evitar padecimientos como: diabetes, hipertensión e hígado graso. Es una enfermedad crónico-degenerativa que se caracteriza por exceso de grasa en el organismo y en el caso de niñas y niños se presenta cuando tiene un sobrepeso mayor a 20 por ciento del ideal, por tal motivo, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán brinda atención médica integral, así como diversos servicios y estrategias, para prevenir y dar seguimiento a esta afección que puede generar muchas otras complicaciones en su salud e incluso, poner en riesgo la vida, si no recibe un seguimiento médico pertinente.
La obesidad en niños y adolescentes puede ser el principio de enfermedades consideradas de adultos, tales como: diabetes mellitus, problemas en pies y espalda, trastornos hormonales, enfermedades cardíacas, así como diversos tipos de cáncer, reiteró el doctor Julio Hernández Carrillo, coordinador de Atención Médica de Primer Nivel de Atención.
Y aseguró que, quien padece obesidad y sobrepeso durante la infancia, puede llegar a registrar daños en su autoestima, ansiedad, depresión y pensamientos negativos.
“Entre los factores determinantes de la obesidad en edad temprana podrían estar relacionadas, principalmente, una alimentación inadecuada y falta de actividad física; no obstante,la genética también puede influir, ya que si los padres presentan obesidad o las madres la presentan durante los primeros tres meses de gestación, existe la posibilidad que los hijos padezcan sobrepeso durante la niñez o adolescencia”, aseveró el coordinador.
Para prevenir y dar atención a estos casos, recordó que el IMSSen Yucatán cuenta con personal médico capacitado en sus Unidades de Medicina Familiar (UMF), para realizar las valoraciones y confirmar o descartar el diagnóstico, de igual forma, se tienen los Módulos PrevenIMSS, en donde se otorga orientación además de chequeos preventivos en los que también se incluye la medición de peso y talla.
El personal de Nutrición del Seguro Social también diseña planes de alimentación, así como pláticas y sesiones en donde se orienta sobre cómo lograr una alimentación correcta, completa, equilibrada, suficiente, variada y adecuada para el buen funcionamiento del organismo.
Este personal entrega la Cartera de alimentación saludable y actividad física, una guía que incluye consejos detallados e información de cómo conocer su estado de nutrición de acuerdo con el Índice de Masa Corporal, rutinas de ejercicio, así como un recetario de alimentación equilibrada, entre otras opciones. Esta herramienta también se puede descargar directamente de internet mediante la página http://www.imss.gob.mx/salud-en-linea/guias-salud
“Es fundamental no consumir productos procesados, altos en azúcares y grasas, realizar 30 minutos de actividad física al día, dormir por lo menos 8 horas diarias, y acudir a revisiones médicas preventivas para conocer el estado nutricional de la población infantil y adolescente”, recomendó el doctor Hernández Carrillo.
También, afirmó que, es importante que los tutores o padres de familia estén al pendiente de la salud de los menores y, de preferencia, los lleven a un chequeo preventivo mínimo una vez al año, ya que la obesidad es una enfermedad completamente prevenible.
Para erradicar este problema de salud, también hizo las siguientes recomendaciones:
* Procurar brindar alimentación saludable.
* Evitar refrescos, jugos (aunque sean naturales) y otras bebidas azucaradas
* Orientar a beber entre 6 y 8 vasos de agua pura al día.
* Realizar alguna actividad física.
* Cumplir, en la medida de lo posible, cada comida de forma regular (tres comidas principales y dos colaciones).
* Seleccionar frutas y verduras de temporada, para las colaciones.
* Preparar de preferencia alimentos al vapor, asados, a la plancha, hervidos o al horno, para evitar freír, capear o empanizar.
* Evitar meriendas con alimentos procesados, con azúcares refinadas o con mucha sal.
Si los menores registran dificultad para moverse, para agacharse y realizar actividades cotidianas, dificultad para respirar, dolores articulares, problemas para dormir y cansancio crónico, es importante llevarlos a un chequeo médico para descartar riesgos y recibir el seguimiento correspondiente.
