Banda Sinfónica Juvenil de Yucatán, ejemplo del legado de Luis Luna
El repertorio incluyó desde música académica hasta popular.
El repertorio incluyó desde música académica hasta popular.
Mérida, Yucatán a 14 de noviembre de 2017.- El trabajo constante, la disciplina, talento y dedicación de los integrantes de la Banda Sinfónica Juvenil de Yucatán «Luis Fernando Luna Guarneros» hizo vibrar a los asistentes que se deleitaron con el concierto Menguante anoche en el teatro «José Peón Contreras».
El escenario recibió a los integrantes de este ensamble, que rindió tributo a la memoria, enseñanza y ejemplo del compositor que les da nombre, en el marco del tercer aniversario luctuoso de quien consideraban su amigo, expresó el actual director del conjunto, Oscar Osorio Ortiz.
En ese sentido, revivió emotivos recuerdos y anécdotas de los ensayos y enfatizó que su ejemplo sigue siendo inspiración de los miembros y modelo para mantener la calidad del grupo, pues su legado continúa presente en cada uno de ellos.
Agradeció a la familia del homenajeado y al titular de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), Roger Metri Duarte, quien asistió al recinto a disfrutar de la velada, por las facilidades para llevar a cabo el concierto.
Los 45 músicos brindaron las piezas «Obertura Festiva» de Dmitri Shostakovich, para continuar con el estreno «Ventanas de México» del compositor yucateco Amaury León Sosa y dedicada especialmente al homenajeado.
También se escuchó el «Concierto para flauta y Banda» de Cécile Chaminade a cargo del solista invitado Alberto Domínguez.
Posteriormente, se apreció el nivel musical de las Bandas Juveniles Municipales, de las cuales Luna Guarneros fue un gran promotor, que formaron un gran conjunto, bajo la batuta de Raúl Villaseñor Gamboa.
Así, casi 100 noveles artistas interpretaron la suite Algo de Guty Cárdenas, cuyos arreglos incluyeron los temas de «Nunca» y «Caminante del Mayab» para finalizar con la «Pantera Rosa» de Henry Mancini.
Casi al término del recital, tocaron el «Danzón número 2» de Arturo Márquez, y una suite sorpresa de la década de los ochentas, que trajo a la memoria melodías emblemáticas como «Thriller» de Michael Jackson y «Eye of tiger» de Survivor, entre otras.
Cerraron la presentación con un popurrí de mambos de Pérez Prado, que puso a bailar a los asistentes que los despidieron con una prolongada ovación.