Mérida, Yucatán, 18 de octubre de 2019.- Para una mejora en la detección oportuna del cáncer de mama lo que ayude a reducir la mortalidad por este tipo de tumores, que en Yucatán ocupa el segundo lugar en causas de defunción, las mujeres deben realizarse revisiones periódicas a partir de los 18 años de edad, revisiones clínicas a partir de los 25 y estudios de mastografía, a partir de los 40 años, coincidieron especialistas de la Clínica Oncofem.
Los doctores Pedro Blas Hernández, gineco-oncólogo; Aarón Palomo Euán, neuropsicólogo; Olga Linden Pérez Gavilán, nutrióloga especializada en Oncología y, Juan Miguel Pech León, radio oncólogo, coincidieron en que a no obstante la gran difusión que se le da a las campañas para la detección del cáncer de mama, entre las mujeres yucatecas todavía persisten barreras de tipo cultural que impiden acercarse a recibir estos tamizajes, los cuales se ofrecen en muchas ocasiones, de manera gratuita.
El Dr. Pedro Blas Hernández explicó que el cáncer es una enfermedad que no solo afecta a las mujeres en lo físico sino también en lo emocional y social, por lo tanto su abordaje actual tiene que hacerse de manera integral, lo que permite una mejor calidad de vida y un mejor pronóstico para las pacientes.
“El cáncer de mama es un problema de salud pública ya que el 40 por ciento de los casos termina por fallecer. Este tipo de tumores son los más frecuentes en la mujer, con una mayor tasa de mortalidad, debido al diagnóstico tardío. En el 55 por ciento de los casos, el diagnóstico se realiza cuando el tumor ya ha invadido otros tejidos y órganos”, subrayó el sub especialista en cirugía de mínima invasión en cáncer ginecológico.
Explicó que los tumores en el sexo femenino, en los últimos años se están presentando en edades cada vez más tempranas. Entre los factores de riesgo citó la obesidad, que afecta de manera importante a las yucatecas.
“Llama la atención que en Yucatán y en el sureste, el cáncer de mama registre menos casos pero sea más mortal que en el norte del país, donde se detecta más pero eso se hace manera temprana, ya que existe mayor cultura de la prevención en esa región”, destacó el Dr. Blas Hernández.
En cuanto a los factores de riesgo mencionó el ritmo de vida acelerado de vida en esa región, principalmente por el exceso de consumo de comidas altas en grasa, abuso del alcohol y tabaquismo.
“Una vez confirmado el diagnóstico, el tratamiento dependerá de la etapa clínica de la enfermedad. En Oncofem, una vez con todos los resultados de los estudios y conociendo el estado actual de la paciente, se somete a una sesión con el equipo multidisciplinario donde se comentan cuáles son las opciones de tratamiento seguras para la paciente. Es un abordaje integral de la enfermedad, que antes no existía en Mérida”, detalló.
Por su parte, el doctor Aarón Palomo Euán, neuropsicólogo clínico con especialidad en psico-oncológica comentó que una vez que la paciente recibe el diagnóstico cambia todo su entorno personal, familiar y laboral.
“Nosotros nos enfocamos en la conducta y las emociones. Es necesario aprender a sobrellevar las emociones, educar a la familia para que sepan que cambios van a experimentar, como va a ser el tratamiento y cuanto tiempo va a durar. Al principio hay cierta negación, seguida del duelo, esto lleva aproximadamente seis meses. Hay que tener una sesión con la familia para saber cómo van a manejar la enfermedad de su ser querido. Es acompañar a la paciente durante su tratamiento y evolución. En fin, les explicamos cómo será su tratamiento o cirugía, dependiendo del caso particular”, expuso el doctor Palomo.
“Hay una afectación cognitiva en algunos casos, en dado caso realizamos una intervención neuropsicológica con su correspondiente rehabilitación. La idea es acompañar a la paciente durante todo el proceso”, indicó.
En su intervención, la Maestra en Nutrición Clínica, Olga Linden mencionó que el trabajo con las pacientes en cuanto a su nutrición se realiza durante las quimioterapias o radioterapias, según la etapa de la enfermedad en que se encuentre.
“El tratamiento nutricional consiste en cuidar los factores relacionados con la nutrición, reeducando a la paciente en un estilo de vida de manera que le permita no volver a tener una revisión de la enfermedad”, explicó.
“Hay factores genéticos que nos predisponen al cáncer y que no se pueden modificar pero los factores ambientales como la obesidad, el sedentarismo, el alcoholismo y la mala nutrición, si pueden cambiarse y de esta forma prevenir”, destacó.
Juan Miguel Pech León, dijo que la labor de la radio oncología es detectar por medio de imagenología y otros estudios, el cáncer en la mujer y tratarlo con el uso de radiación ionizante y otras terapias.
Finalmente, el Dr. Pedro Blas Hernández reiteró que el equipo multidisciplinario de Oncofem permite brindar un manejo seguro para las pacientes.
“La clave del éxito para abordar el cáncer en la actualidad es el trabajo en equipo de profesionales de la salud”, concluyó.
ACERCA DE ONCOFEM
Es un equipo multidisciplinario de profesionales de la salud, con diferentes formaciones académicas y experiencias profesionales, que operan en conjunto, durante un tiempo determinado, que tienen como objetivo común el tratamiento del cáncer ginecológico. Cada uno es consciente de su papel y el de los demás integrantes del equipo y trabajan en conjunto bajo la dirección de un coordinador, lo que garantiza no solo un trato mucho más humanizado, sino un índice de eficacia mayor a lo largo del proceso de cada paciente.
Oncofem trata cánceres de mama, endometrio, cervicouterino, de ovario, de salpingue, de útero, de vagina y de vulva. El equipo está integrado por especialistas en: ginecología oncológica, oncología médica, radio oncología, neuropsicología-oncología clínica, nutrición en oncología así como cuidados paliativos y clínica del dolor.
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