Uno de cada diez niños trabaja para sobrevivir

El 10 % de los niños y niñas de 5 a 15 años de toda la Argentina realiza al menos una actividad productiva con la que tienen que aportar dinero en sus casas o sobrevivir en las calles

Nn informe oficial sobre el trabajo infantil en Argentina indica que uno de cada diez niños de hasta 15 años de Argentina realiza una «actividad productiva», fenómeno que, a su vez, afecta a casi un tercio de los adolescentes de 16 y 17 años.

De acuerdo con los resultados de la Encuesta de Actividades de Niños, Niñas y Adolescentes, el 10 % de los niños y niñas de 5 a 15 años de todo el país realiza al menos una actividad productiva.

El sondeo, realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) y la Secretaría de Trabajo y Empleo de Argentina, tiene en cuenta datos de 2016 y 2017.

Según el estudio, el nivel de quienes realizan una actividad productiva llega al 31,9 % en el caso de los adolescentes de 16 y 17 años.

Los principales motivos que los impulsan al mercado laboral están relacionados con la ayuda familiar y la necesidad de ganar dinero para sus gastos y los de su hogar», explicaron los responsables del estudio.

La encuesta muestra que las distintas formas del trabajo infantil y adolescente están más extendidas en las zonas rurales.

El sondeo revela que el trabajo infantil tiene mayor presencia relativa en las áreas urbanas de las regiones noroeste y noreste del país y en las áreas rurales de las regiones Pampeana (centro), Cuyo (centro-oeste) y noreste.

Los trabajos más habituales entre los niños y adolescentes de las ciudades son en negocios, talleres u oficinas por dinero (para el 39,9 % de los niños y el 37,9 % de los adolescentes que trabajan) y en la construcción y reparación de viviendas (el 29,5% de los adolescentes).

En tanto, entre las adolescentes urbanas tiene mayor frecuencia como trabajo el cuidado de niños y personas mayores o enfermas, la limpieza de casas y la elaboración de comidas o productos para vender.

Por su parte, en las zonas rurales, cerca de la mitad de los niños y niñas que trabajan se dedica al cultivo o la cosecha de productos para vender (14,2 %), el cuidado u ordeñe de animales (14,4 %), la ayuda en la construcción o reparación de viviendas (11,9 %) y la ayuda en negocios u oficinas (11,9 %).

Según el informe, la inclusión educativa de los niños y niñas de 5 a 15 años en Argentina es casi universal (98,7 % de los que residen en ámbitos urbanos y 96,6 % de los rurales).

Sin embargo, el trabajo infantil en cualquiera de sus formas incide en las trayectorias educativas de quienes lo realizan. Las principales problemáticas que afectan a los niños y niñas que trabajan están relacionadas con las llegadas tarde y, en menor medida, con las inasistencias frecuentes a la escuela», indica el informe.

emb