Tres años sin justicia para Ana Karen

Así recuerda Ana Karen Morales Barradas, hoy de 17 años el accidente que le cambió la vida

«Cuando fue el accidente me quedé 15 minutos tirada en la calle porque la Cruz Roja no llegaba, llamaron a Protección Civil y si llego rápido; debido a que yo había perdido casi toda la sangre en mi cuerpo le dijeron a mi mamá: eran mis piernas o era mi vida, obviamente mi mamá prefirió mi vida”, así recuerda Ana Karen Morales Barradas, hoy de 17 años el accidente que le cambió la vida el 19 de abril de 2016 alrededor de las ocho de la noche en Tapachula Chiapas, entonces tenía 15 años.

“Venía saliendo de la escuela federal 2 y una patrulla municipal traía en persecución a una camioneta que la venía conduciendo un hombre ebrio”, recordó también el padre de Ana Juan Morales Toledo. Ambos acudieron al noticiero de Yuriria Sierra para Imagen Televisión.

“Entonces mi hija estaba a dos cuadras de llegar a la casa cuando la camioneta la atropelló y aparte de que la atropelló se echó en reversa para rematar y los policías, detuvieron a la persona que la atropelló, pero a los dos días de haberlo detenido lo dejaron en libertad”, continuó describiendo Juan.

Ellos identifican al presunto culpable como Delfido Roeli Chacón Palomeque y aseguran quedó en libertad por su parentesco con el político Samuel Alexis Chacón Morales. “Se escucharon rumores que como era sobrino de un diputado un tal Samuel Chacón que por eso usaron la influencia y hubo una corrupción de 160 mil pesos para dejarlo en libertad”, dijo el padre de Ana a Yuriria Sierra.

Sin un culpable definitivo, no han recibido compensación alguna por la imprudencia del hombre que intentaba escapar de la policía conduciendo ebrio, por eso llevaron una carta a la oficina de atención Ciudadana del presidente Andrés Manuel López Obrador, le piden registre a Ana en el registro nacional de víctimas, que el DIF o la dependencia indicada les apoye con la donación de un par de prótesis biónicas y una silla de ruedas eléctrica; por último le piden inscribirla en el programa de apoyo para personas con discapacidad.

El servicio médico de Ana ha corrido a cargo del Servicio Médico Naval pues su padre es infante de Marina, eso no es lo que preocupa a la familia, sino los recursos económicos que se han agotado por los constantes viajes que deben hacer para seguir su tratamiento.

Ana concluyó su entrevista dándole un mensaje a las personas que conducen ebrios.” Cuando van a tomar y conducen no solamente se afectan a ellos sino a los inocentes como me paso, me dejaron a la deriva no hay justicia y más de personas que no tienen el apoyo de nadie”.