Tecnología para astronautas es utilizada para mejorar la calidad del sueño

• En los años 60s, como parte de un programa espacial de la NASA, se desarrolló un material para reducir y aliviar al máximo la presión que los astronautas sufrían.
• La viscoelástica brinda el soporte necesario para obtener una mejor calidad de sueño reparador.

Ciudad de Mexico 11 de junio 2019.- De acuerdo con cifras publicadas por la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Nacional Autónoma de México, se estima que en el país alrededor del 45% de la población adulta presenta mala calidad para descansar[i]. Lo anterior se refleja en la dificultad que las personas tienen para levantarse, así  como en una constante somnolencia y cansancio durante las primeras horas de la mañana.

El sueño es uno de los procesos reparadores del organismo más importantes, pero el número de horas para descansar varía en cada persona, no obstante, la media en un adulto se encuentra entre siete y ocho horas. En el caso de los niños, depende de las necesidades de la edad[ii].

Son diversos los factores que influyen en la mala calidad del sueño: desde la luz que se filtra por la ventana, hasta el lugar en donde diariamente dormimos. Está comprobado que dormir en un colchón de mala calidad puede causar o empeorar dolores musculares y de columna[iii].

“Lo más recomendable para descansar es utilizar un colchón de firmeza media y adaptable[iv] que incorpore materiales innovadores que proporcionen las máximas garantías de confort e higiene. De ahí que el uso de la viscoelástica (memory foam) en el sector del bienestar sea cada vez más común, ya que los beneficios que ofrece son los más sugeridos para lograr un descanso saludable”, comentó Isauro de la Fuente, Director de Poliuretanos (PUR) en Covestro México. 

¿Qué es un colchón de viscoelástica?

En los años 60s como parte de un programa espacial de la NASA, se desarrolló un material llamado viscoelástica –también conocida como memory foam–, para reducir y aliviar al máximo la presión que los cuerpos de los astronautas sufrían en el momento de despegar y aterrizar, aunque fue hasta principios de los 80s que este material empezó a utilizarse en colchones y demás productos de descanso, por sus extraordinarias propiedades adaptativas[v].

“La viscoelástica es una espuma de poliuretano. Es parecida al hule espuma, solamente que la tecnología de los  químicos que se utilizan en su fabricación logran la propiedad de ‘memoria’ que tiene este material”, explicó Isauro de la Fuente, Director de Poliuretanos (PUR) en Covestro México.

Dicha espuma se comporta de diferente manera dependiendo de la temperatura en la que se encuentre. Cuando está fría es más dura, y caliente se vuelve más suave. Adicionalmente, se adapta a la forma del cuerpo disipando la presión, lo que hace posible que se utilice en distintas aplicaciones médicas y de descanso[vi].

Es así como el colchón se convierte en un elemento importante para un buen descanso, puesto que dormir poco o no hacerlo afecta de manera importante el rendimiento laboral, lo cual no solo se manifiesta en ausentismo, sino también en el riesgo de tener mayor cantidad de accidentes de trabajo, cuya consecuencia puede ser incluso una discapacidad permanente[vii].

Aunque hasta hoy la característica que rige la decisión de compra de colchones en México es el precio[viii], el desarrollo de tecnologías para el descanso ha provocado que existan diversos materiales de aislamiento y acojinamiento como la viscoelástica, que además de ofrecer confort y suavidad, brinda el soporte necesario para obtener una mejor calidad de sueño reparador.

 
Acerca de Covestro:

Con una facturación de 14,600 millones de euros en 2018, Covestro se sitúa entre las mayores empresas de polímeros del mundo. Su actividad empresarial se concentra en la fabricación de polímeros de alto rendimiento y en el desarrollo de soluciones innovadoras para productos pertenecientes a muchos ámbitos de la vida diaria. Los principales segmentos a los que atiende la empresa son la industria automotriz, la de procesamiento de madera y fabricación de muebles, el sector de la construcción y el ramo de la electricidad y la electrónica, seguidos del ámbito del deporte y el tiempo libre, la industria de productos cosméticos, el ramo de la salud y la misma industria química. Covestro fabrica sus productos en unos 30 centros repartidos por todo el mundo y a finales de 2018 contaba con aproximadamente 16,800 trabajadores (equivalentes a tiempo completo).