Tan sólo un verso de los poetas mexicanos. Parte 3.

Las Reliquias del Hombre Ave por: Dr Adán Echeverría García

Siguiendo con el reconocimiento de la poesía mexicana, y haciendo este recorrido a través de las letras de sus autores, revisamos de nuevo la Ciudad de México, y presentamos los versos de los siguientes poetas:

Rodrigo Flores Sánchez: “Habla para que su boca no se queme mientras espera”. Marco Fonz: “Un aullido al fondo del corredor nos hace cerrar los ojos”. Alberto Forcada: “Ansiosa por entregar su fuego al fuego, la madera se arranca el humo”. Ana Franco Ortuño: “Fue una luz pequeñita de animales que vuelan”. Juan Manuel Gómez: “Estás prisionera en el metal de mis labios”. Alberto Gómez del Campo Trigueros: “Y los pájaros volvieron cantando tantas canciones”. Grisel Gómez Estrada: “Soy los dedos de un meteorito”. Jesús Gómez Morán: “A veces la palabra toma un contorno de luz húmeda”. Omar Góngora: “Con la cabeza perforada de silencios”. Obed González: “Hay un perro húmedo en tu ventana”. Armando González Torres: “Un otro habita nuestras comisuras”. Mónica González Velázquez: “Llueven gatos de uñas afiladas”. César Guerrero: “Hace tiempo los árboles extraviaron sus pájaros”. Maricela Guerrero: “Alrededor de círculos de amantes”. Juan Carlos H. Vera: “Que los poetas continúen haciendo cola para suicidarse”. Claudia Hernández de Valle Arizpe: “En los recodos de las letras tus pausas me serenan”. Julio Hubard: “Dejo a mi hermano andar por propia cuenta al llamado del diablo”. Raquel Huerta-Nava: “Qué soledades nos habitan en la cúspide absoluta de la llama”. Macarena Huicochea: “Vano fue el paso de los Dioses por la arena”. Teresa Irazaba: “A mí me dieron un nombre a ellos les borraron la vida”. Edgar Khonde: “Habrá ya otros poetas que merezcan el aplauso”. Marco Tulio Lailson: “Si pudiera poner nombre a la luna que en tu vientre crece”. Leopoldo Lezama: “Y cae la noche calcinando con su costra húmeda la blancura de las manos”. Sergio Loo: “La ciudad se retuerce por ti”. Mauricio López Valdés: “Usted sabe que mi tumba es el cosmos infinito”. Leticia Luna: “Quién soy yo para nombrar tu claridad en un amanecer que se sonroja”. Roberto Luviano: “El deseo comienza en la duración del vértigo”. Mariana Martínez Esténs: “Busco desaforada quien me mienta”. Alejandro Martínez Lira: “Se derrumba mi cuerpo sobre la noche”. Alejandra Martínez Vázquez: “Buscamos una noche y aparecen dos lunas”. Santiago Matías: “El pájaro casi siempre está solo frente al rayo”. David Medina Portillo: “Que una palabra y otra se acomoden para animar al árbol”. Érika Mergruen: “El acuático susurro de la coladera”. Daniel Mir: “Propongo que se cocinen los deseos”. Catalina Miranda: “Hay un charco para cada hoja”. Zita Noriega: “Sintiendo la derrota que se cuelga a tu espalda”. Carmen Nozal: “No quiero que como un látigo la luz me traspase los ojos”. Adriana Ortega Ortiz: “Mi lengua santifica tus rincones”. Jaime Ortiz Álvarez: “Obsesiva necesidad de saber tu sueño y dormir con él”. Alejandro Ortiz González: “Descubro que a la mañana le faltan pájaros en vuelo”. Alejandro Palma Castro: “Si tuvieras tiempo de criar lagartijas los sueños nacerían dentro de una caja sorpresa”. Inés Parra: “Arrancaré los pétalos dorados de su odio”. Nirvana Paz: “Y azotando los recuerdos contra las paredes”. Christian Peña: “Bajo tu falda abandoné la infancia”. Javier Peñaloza: “Esta es la última noche en que duerme la fe en esta tierra”.

Espero que esta recopilación de apenas un verso de cada autor te esté agradando. Está hecha con la finalidad de invitarte a conocer a los poetas que impulsan la vida literaria de México.