Siempre tendremos a Calderón.

Las Reliquias del Hombre Ave por: Dr Adán Echeverría García

¿Cuántos cartuchos le quedan a Andrés?

Luego de que a media pandemia, que ha entregado 64 mil mexicanos muertos y 600 mil contagiados, 1 millón y medio de desempleados, más los millones que sufren desde el trabajo informal, Andrés decidió usar el cartucho Lozoya. Mandó por él a España, donde la última vez que se le tomó una foto fue abordando el avión mexicano. Hicieron escala en Canadá para luego llegar a la CDMX. Fingieron un traslado a la cárcel. Pero usaron un doble. La telenovela Lozoya no le ha dado una sola foto a la prensa mexicana del personaje, pero sí el video de unos trajeados y maletas de dinero. Si las 64 hojas que fueron liberadas a la prensa conteniendo una denuncia de hechos, cuchareada. Porque Andrés pidió que se liberaran tanto el vídeo como la denuncia. Andrés dispuso muchas conferencias en este tema, y se le veía muy sonriente, hasta que Carlos Loret de Mola liberó un vídeo donde se observa a su hermano recibiendo 1 millón, cuatrocientos mil pesos de manos de David León Romero.

Entonces Andrés tuvo que abandonar el cartucho Lozoya. Y ahora se ha lanzado contra los expresidentes. En el camino renunció a Víctor Toledo, quien desde la SEMARNAT decidió criticar a la 4T. Andrés también decidió renunciar a Ricardo Peralta de la Subsecretaria de Gobernación. Luego de que el alcalde de Tijuana lo acusara de pedirle dinero o echarle las investigaciones de la unidad de fiscalización. Y luego de que Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, lo acusara de reunirse con supuestos criminales. Andrés tuvo que recular, entregar a Toledo, entregar a Peralta, romper con Fernández Noroña, todo para calmar a quienes Lozoya acusara sin pruebas. Fue encarado por los gobernadores de Colima, Querétaro y Tamaulipas, cuando visitó dichas entidades federativas, y Andrés no podía manejar el enojo y la frustración que fue apareciendo en su rostro.

Ahora, luego de que el cartucho Lozoya no dio resultados, ha enfocado sus baterías en querer enjuiciar (solo en el imaginario), solo para el pueblo —y eso hay que subrayarlo—, a los expresidentes. Y lo hace porque le urge mantenerse en la Preferencia de las Encuestas. Lo único que en verdad le importa. Seguir creyendo que el pueblo lo quiere.

Como todos los analistas saben que esto solo le ocasionará respuesta de parte de sus opositores, circo y más circo porque ningún expresidente será juzgado si no se presentan pruebas contundentes, Andrés mueve la maquinaria de su partido que instala mesas para recabar firmas.

No hay atención en salud. No hay seguridad en el país, pero si hay dinero para instalar mesas por todo el país para recabar firmas. Están cerrados los negocios, pero si se pueden hacer colas en la calle para obtener las firmas.

Cuando este cartucho se acabe. Se sabe que hay 15 vídeos más donde se observa al hermano del presidente recibiendo dinero, en lo oscuro, para Andrés. Y entonces Andrés tendrá todavía un último cartucho, el de siempre: Felipe Calderón. No puede con Peña, no podrá jamás con Salinas, Fox y Zedillo no le importan, entonces irá por Calderón, aprovechando que a García Luna lo están juzgando en los Estados Unidos.

Ya Olga Wornat ha comenzado el golpe, al publicar un libelo de quejerío la «escritora» llama a Felipe Calderón «un resentido por no ser blanco, por no ser rico».

Olga Wornat deja correr su pluma y exhalar todo su racismo y su clasismo. Para Olga Wornat ser moreno te convierte en un «resentido por no ser blanco». Lo que nos muestra que el título de la obra de Wornat, no debió ser «Felipe, el oscuro», sino «Felipe, el de la piel oscura». Ése es el cuestionamiento con el que se pretende atacar a quien fuera presidente de México de 2006 a 2012. Ese es quien le robó la presidencia a Andrés en el 2006.

Y es justo este personaje en el que Andrés sueña todos los días. No leo ni escucho a Felipe dedicarle tanto tiempo a Andrés, pero sí veo a Andrés hablar todos los días de Felipe, instruir a sus subalternos, y éstos a sus millones de bots (becarios de Morena) a hablar todos los días en contra de quien gobernó hace, al menos 8 años. Andrés se salta por completo el sexenio de Peña Nieto, y cuando decide que es hora de tocarlo, salen vídeos que comprometen su «palabreada Honestidad».

¿Qué será de Andrés cuando los gringos metan a la cárcel a Felipe Calderón si logran vincularlo con García Luna? ¿Qué otro cartucho le quedará entonces? Ésa es su última treta, su última carta, y a dos años de un gobierno fracasado, tiene que empezar a quemarla.