Rafa Márquez hace vibrar el Jalisco

En la despedida del capitán rojinegro del Estadio Jalisco, el Atlas se impone 1-0 a Chivas en el Clásico tapatío para enmarcar una noche soñada

El Clásico tapatío fue más fiesta que nunca. Rafa Márquez pisó por última vez el césped del Estadio Jalisco, que agradeció a una leyenda, en un encuentro que no decepcionó y en donde el Atlas se impuso por la mínima diferencia a las Chivas con un gol de vestidor.

Pocos segundos llevaba el encuentro de haber iniciado, y Milton Caraglio realizó un desborde, centrando para el juvenil Edyairth Ortega, quien se encargó de avivar, si es que era posible aún más, le fiesta tapatía dedicada al histórico michoacano.

El Rebaño se rehizo y comenzó a acercarse con mayor soltura, pero sin claridad en las últimas decisiones, mientras que los zorros, de la mano de Caraglio que se las ingeniaba para escurrirse en su banda izquierda, emanaban peligro cada que rebasaban los tres cuartos de cancha y en dos ocasiones estuvieron muy cerca de ampliar la ventaja.

Mientras tanto, el inmueble ensordecía a quien se uniera a la fiesta de Rafa, quien iniciado el segundo tiempo tomó el balón afuera de la media luna rival, con el deseo de abrochar una noche mágica con una de sus distinciones futbolísticas, el tiro libre. Sin embargo, la barrera no lo permitió.

Ambos equipos tuvieron sus oportunidades. Pero el cuadro de Gerardo Espinoza ganó la partida en verticalidad, con sus habilidosos jóvenes de ataque, suficiente para sellar una de las pocas alegrías en casa, y en un día memorable.

En tiempo de compensación, el capitán de los Rojinegros abandonó la cancha con las tribunas brillando por las luces de los celulares y con su nombre coreado por los aficionados.

fdr